Herramientas de manipulación social | Eusebio Alonso

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A pesar de que muchos todavía no se hayan apercibido de ello, vivimos unos tiempos en los que la realidad que percibe el ciudadano se fabrica en buena medida por los medios de comunicación. Mucha gente, muy posiblemente demasiada, ya está instalada en una realidad ficticia que han creado estos medios en beneficio de intereses políticos y de los grupos de poder. El mundo de Orwell puede considerarse una realidad en España, gracias a los políticos, a la falta de independencia de instituciones que nos deberían proteger, a los avances tecnológicos y a unos medios de comunicación mayoritariamente vendidos al mejor postor.

Para crear esta realidad ficticia se hace uso de ciertas herramientas sociológicas, tecnológicas y políticas. Antes de pasar a describir unas cuantas, me gustaría visitar algunos conceptos y consideraciones generales relacionados con la sociología y la psicología. Conceptos que ayudarán a ilustrar la descripción las herramientas de manipulación social, y a los que se hará referencia cuando sea oportuno.

Modelo de los tres cerebros del ser humano

Se acepta, de manera generalizada, que el cerebro humano actúa como si estuviera constituido por tres cerebros diferentes. Cada uno de los cuales con distinto cometido funcional.

Cerebro Instintivo o Reptiliano. Maneja funciones vitales e instintos. Gestiona la supervivencia.

Cerebro Emocional o Límbico: Gestiona las emociones. Es rápido y automático, y requiere un nivel bajo de consciencia.

Neocortex. Es el cerebro consciente. Se asocia con el raciocinio. Es más lento y necesita hacer una interpretación de la información sensorial recibida.

La ventana de Overton

Este concepto refleja la evolución moral de una sociedad. La citada ventana es arrastrada, a través de las herramientas de manipulación, según interesa a los poderosos. El proceso siempre es el mismo. Algo puede empezar siendo impensable y, progresivamente, evolucionar a conceptuarse como radical, luego aceptable, después sensato y finalmente popular, alcanzando finalmente el estatus de política y jurídicamente aceptado. Un buen ejemplo de este deslizamiento de la ventana de Overton es el aborto, que ya se considera, en países autodenominados como “progresistas”, un derecho.

Disonancia cognitiva

En caso de existir una discrepancia entre razón y creencias, se dará, con toda probabilidad, mayor peso a aquello coherente con las creencias existentes. Es decir, lo que esté instalado en el cerebro Límbico. Siempre gana el inconsciente (hemisferio derecho), aunque ello entre en contradicción con el enfoque racional. No se puede convencer a alguien que ya está convencido de algo que vaya en contra de sus creencias. Es más fácil engañar a la gente, que convencerla racionalmente de que ha sido engañada (Jonathan Swift).

Indefensión aprendida.

Supone el hecho de sembrar en el individuo la idea de que, aunque algo no lo vea como aceptable, es inútil que se oponga, porque con sus solas fuerzas no conseguirá cambiar nada. Esto produce una indolencia social que da por buena cualquier cosa: degeneración, abuso, latrocinio, tiranía, etc…; sin la menor resistencia. Así, por ejemplo, muchos piensan que como todos los partidos amparan y fomentan la corrupción, es porque ésta es inevitable y, como tal, hay que aceptarla.

Realidad Woke (Realidad Hueca, si se me permite la ironía, aunque la traducción formal de la RAE es “Realidad Concienciada”)

En origen era el movimiento que se enfrentó al racismo. Posteriormente abarcó cuestiones de desigualdad social en relación con el «género» y la orientación sexual. A partir de 2010 reúne a los movimientos progresistas que enfatizan la política identitaria del colectivo LGTB, la comunidad negra y el feminismo radical. Se caracterizan por autovictimizarse, reclamando privilegios y censurando las opiniones discrepantes mediante la cultura de la cancelación, consistente en anular a todo aquel que cuestiona sus puntos de vista y exigencias.

Grupo de pertenencia

En sociología un grupo de pertenencia es aquel en el que los integrantes participan de manera activa, comparten valores, creencias e intereses y, consecuentemente, existe una identificación entre todos sus miembros. Se trata de grupos bastante excluyentes con todo aquel que no forme parte de ese colectivo, o tenga creencias y valores diferentes. Cuando son conscientes de su influencia social, reclaman, con demasiada frecuencia, privilegios a cambio de apoyo a los partidos políticos que detentan el poder o, simplemente, a cambio de un compromiso de no beligerancia.

A continuación, paso a describir las herramientas de manipulación social que considero más usadas en la actualidad, ilustradas con unos pocos ejemplos, de los muchos que existen.

El Relato

En lo que afecta a la manipulación social, el relato o narrativa supone, con frecuencia, presentar una versión falsa o interesada de la realidad con intención de deslizar la ventana de Overton, foto instantánea de la moral de una sociedad, en la dirección que más interese al poder. Ojo, no confundir ética y moral. La primera es invariable, mientras que la segunda transige con los intereses sociales de cada momento. La ética no se puede pervertir, la moral sí. Los gobernantes, en mayor medida aquellos de izquierda, por su habilidad histórica para falsificar la verdad y su carencia de límites, no escatiman esfuerzos para reconducir la opinión ciudadana a través del uso del falso relato.

Veamos unos pocos ejemplos …

  • Se defiende la agenda 2030, que nadie ha votado explícitamente en ningún país del mundo, con el argumento de que es la única opción viable para garantizar el futuro del planeta. El miedo aparece constantemente en el tablero de juego. El miedo es un agente eficaz para la sumisión y el control social. La citada agenda se aplica únicamente en Europa. Continente que tan solo es responsable del 10% de las emisiones de CO2 del planeta, y cuya aplicación está condenando a la desaparición de todo el sector primario. Aprovechando esta circunstancia, unos pocos se hacen con el control de las tierras cultivables, la producción de comida sintética y el monopolio de las semillas genéticamente modificadas. Lo que creará, con seguridad, un monopolio alimentario en el futuro. Para reemplazar los productos del sector primario, que han dejado de ser competitivos por las trabas medioambientales impuestas, nos llega comida procedente de otros países con escasos controles sanitarios y de calidad. ¿Alguien sabe en qué medida va a influir este esfuerzo suicida que supone la agenda 2030 en el futuro del planeta, cuando nadie más que Europa está dispuesta a aplicarla? ¿Alguien conoce como van afectar estas políticas en el futuro a nuestras libertades, bienestar e independencia? Pues témanse lo peor.
  • Proceso de normalización de la pederastia. Manifestaciones de ministros de un gobierno reciente hacen pensar que el tradicional concepto de pederastia ha progresado, entiéndaseme la ironía del término progresar, de ser algo inaceptable, cuando se consideraba una depravación el abuso de menores a los que la sociedad tiene obligación de proteger mientras no tengan suficiente capacidad para discernir lo bueno de lo malo; a un discurso con que se pretende asignar a los niños la libertad de escoger, voluntariamente, la sexualidad que más les guste sin límite de edad ni consentimiento paterno. De momento la sociedad es reacia a aceptar tal despropósito, pero no descarto que, aprovechando la indefensión aprendida, más pronto que tarde, este enfoque se aceptará cuando se consiga vender como un logro social, y todos los que se opongan a él sean considerados unos retrógrados enemigos de la libertad. Al tiempo…
  • La defensa mediática y política del orgullo LGTBI. Colectivo que convierte su sexualidad en un circo y en un negocio pagado por el contribuyente, produciendo en la población, especialmente en los niños, espectadores inocentes de estas exhibiciones de mal gusto, la idea de que la única sexualidad de la que se puede estar orgulloso es aquella contra natura. ¿Es que acaso no se puede vivir esa legítima identidad sexual de una forma discreta y sin hacer uso del dinero público? ¿Por qué se quiere educar a los niños en la sexualidad que establece el pensamiento Woke sin que los padres puedan ejercer un legítimo derecho de veto?
  • Ante las nuevas convocatorias electorales, la izquierda finge proteger los avances progresistas alcanzados, que, en su mayoría, simplemente representan privilegios para unas minorías que profesan un afecto incondicional a sus protectores. Minorías como son: el colectivo del séptimo arte, tan poco premiado por la taquilla, el colectivo LGTBI, los sindicatos subvencionados (lógicamente de izquierdas), el feminismo parasitario radical, los animalistas y unos cuantos más. Estos colectivos se convierten en elementos disgregadores de enfrentamiento y fractura social mediante la creación de grupos de pertenencia al servicio de los partidos políticos que les premian. Por desgracia, el enfrentamiento entre grupos siempre produce rédito electoral. Se legisla para favorecer a los colectivos afines y mantener su status de privilegio con el silencio cómplice de la oposición. Privilegios que se han disfrazado de logros sociales para que nadie se atreva a cuestionarlos.
  • Infundir miedo a la denominada “ultraderecha”, que son todos los que cuestionen los privilegios progresistas. Miedo también a las futuras pandemias y a una hipotética guerra. Nos quieren convencer de que si queremos estar protegidos debemos aceptar sus propuestas sin discutir.

La verdad ya no existe desde que ésta se puede comprar y vender. Se intenta ocultar el cuestionamiento y la discrepancia. Se pretende hacernos creer que la única información fiable es la de los medios de comunicación oficiales. Casualmente, los mismos que están subvencionados para apoyar el relato oficial. Todos los demás son desacreditados, calificándolos de fuentes de desinformación que más pronto que tarde serán perseguidos con nuevas leyes de censura con la excusa de que todo lo que papá Estado hace es para protegernos.

El Lenguaje

Una de las estrategias más recurridas es la de entrar en la mente a través del lenguaje, estimulando el cerebro Límbico. El lenguaje se vale de muchos recursos. Entre ellos se encuentran:

Información subliminal. Estrategia que ya han usado en el pasado, y posiblemente sigan usando, compañías para vender sus productos mediante la colocación de un mensaje en el subconsciente del individuo. Ese mensaje subliminal puede ser una imagen que se entremezcla a gran velocidad para evitar que sea perceptible. Aunque también puede ser un audio en frecuencias extremas de la banda audible. Estos mensajes se instalan en el inconsciente para crear, sutilmente, creencias

Metáforas y asociación de conceptos. Describen algo no visible mediante la denominación de algo perceptible, con objeto, principalmente, de infundir miedo en la población. Algunos ejemplos relacionados con la gestión del Covid son:

  • Metáfora de la guerra para infundir miedo en las alocuciones de las autoridades. El miedo produce sumisión y obediencia.
  • Se menciona, de pasada, el apelativo de Estado Federal para hacer un cuestionamiento tácito e implícito de la monarquía.
  • Tsunami de contagios. Crea miedo ante una infección segura, salvo que decidas “libremente” ponerte unas vacunas cuya necesidad, eficacia y seguridad son, cada día, más cuestionables.

Arquetipos. Son palabras que producen en nuestra mente una asociación. Con frecuencia se usan para asignar una autoridad fuera de discusión (expertos, patriotas, etc…) o para descalificar y criminalizar al disidente (negacionistas, ignorantes, fascistas, etc…). Algunos de ellos están tergiversados intencionadamente con un significado diferente al etimológico.

Neolengua. 

La Neolengua busca controlar el pensamiento de la población mediante la eliminación o sustitución de palabras y a su vez de los conceptos asociados. Permiten eliminar aquellas palabras que no convienen al poder. Se crean nuevas palabras para inculcar una nueva manera de pensar mediante un proceso de planificación lingüística. Imagínense que se descartase de nuestro léxico la palabra “libertad”. Sería imposible que supiéramos de la existencia de ese concepto y, como resultado, seríamos incapaces de disfrutarlo. Numerosos estudios psicológicos defienden que el uso de la Neolengua puede alterar las creencias personales.

En sus estudios, Benjamin Lee Whorf demostró que la lengua nativa puede condicionar la forma de pensar de las sociedades.

Existe una auténtica ingeniería lingüística cuyo objetivo es el de realizar un control social mediante la estimulación de las emociones de las que es responsable el cerebro límbico. Los seres humanos somos animales emocionales antes que inteligentes. Nuestro comportamiento se basa en buena medida en las creencias que nos han implantado en nuestro subconsciente, antes que en los conocimientos adquiridos. Solo por poner un ejemplo de esta ingeniería lingüística, comprobamos que al aborto se le denomina  interrupción del embarazo. Puede parecer estúpido, pero es evidente que se quiere omitir que se trata de una interrupción definitiva con intención de hacerlo más aceptable.

Este proceso de transformación del lenguaje mediante ingeniería lingüística constituye el movimiento denominado PostTrueWorld (el mundo de la post-verdad). Sin duda, los eufemismos ocultan el auténtico significado de las cosas.

Los Datos

Los datos se falsifican o se encubren según interese para engañar a un público poco crítico. Existen innumerables ejemplos de ello. Baste con citar unos pocos:

  • A pesar de existir un centro oficial de seguimiento epidemiológico en España, como es el instituto Carlos III, responsable de los informes RENAVE, no se ha publicado ninguna estadística sobre la eficacia a posteriori de las vacunas contra el Covid. Ni aquí, ni en ninguna parte del mundo. Todo lo que hay, sobre eficacia, son los estudios a priori realizados por las propias farmacéuticas que son parte interesada en el negocio. En mi artículo Estadisticas-del-covid19 doy mi opinión, fundamentada en un estudio estadístico de regresión, sobre la causa de esta increíble omisión de información. Información esencial para la toma correcta de decisiones sobre la conveniencia de vacunarse contra el Covid. Por sorprendente que parezca, ya ni siquiera la ciencia se libra de sospecha en esta farsa a escala mundial. ¿Estaremos asistiendo también al declive de la ciencia independiente?
  • Las estadísticas de Monitorización de Mortalidad (MoMo), elaboradas por el instituto Carlos III, indican que en el periodo de 2021 a 2023, años límite incluidos, ha habido una sobremortalidad de 46.328 personas. Resulta sorprendente que el INE declare que en ese mismo periodo la esperanza de vida al nacimiento haya aumentado en cerca de un año. Sorprende que con más muertos de los esperados la esperanza de vida aumente. ¿Alguien me lo puede explicar?
  • Presentación del valor de la deuda pública en términos relativos al PIB para ocultar su subida constante y desenfrenada en términos absolutos.
  • Se alardea de la evolución de las cifras del paro sin mencionar el empleo estacional ni los llamados fijos discontinuos que alcanzan una cifra cercana al millón y cuyo empleo no proporciona recursos para vivir todo el año y requieren de una ayuda económica.

La Falacia

Con frecuencia, los medios descalifican sin aportar evidencias objetivas. Raro es el noticiario televisivo que muestre con preocupación el auge de la llamada “ultraderecha” en España y en Europa. Esta denominación la establecen, por conveniencia, aquellos que quieren aparecer en el panorama político como partidos centrados, con el propósito de mostrar la considerable diferencia existente entre su oferta política y la de aquellos partidos a los que pretenden desacreditar. El ciudadano medio asocia el término de extrema derecha o ultraderecha con los movimientos fascistas, surgidos en Europa, en la primera mitad del siglo XX. Muy posiblemente, poco o nada sabe de que el partido de Hitler se llamaba nacional-“socialista” o que Mussolini, fundador del partido fascista, procediera del partido socialista italiano. Casi nadie recuerda que el comunismo, hoy perfectamente blanqueado por la democracia, fue responsable de más de 100 millones de muertos en el siglo XX.

Una vez creada la asociación, el subconsciente del ciudadano, con escasa capacidad de cuestionamiento crítico, se predispone sin tomarse la molestia de analizar nada. Abundando en este asunto, la inmensa mayoría de los medios han presentado recientemente algunas manifestaciones violentas contra esos partidos llamados de “ultraderecha” desde una distancia cómplice, cuando el tratamiento objetivo debería ser la de desacreditar al violento que es el que se comporta de forma totalitaria, ya que cualquier otra cosa sería una falacia malintencionada impropia de un medio de comunicación serio e imparcial.

Lo que debería preocupar al ciudadano con criterio son los totalitarismos. No olvidemos que éstos, sean de izquierda o de derecha, se caracterizan por lo mismo: la eliminación de la independencia de los poderes del Estado, la persecución del discrepante, incluso de forma violenta, la eliminación del debate público, la identificación de una minoría como responsable de todos los males de la sociedad, el control de los medios de comunicación y el adoctrinamiento en las aulas. Supongo que, si existiera algún parecido de la actual realidad de nuestro país con estas inquietantes características del totalitarismo, sería una mera coincidencia. Entiéndase la ironía.

Otro ejemplo de falacia que quiero mencionar es el tratamiento informativo de la inflación. La inflación no representa, como casi todo el mundo cree, la subida del precio de los bienes, sino la reducción del valor del dinero con el que se adquieren. Ambos conceptos son diferentes. El incremento de la inflación es consecuencia de la decisión de los gobiernos de poner en marcha la máquina de hacer billetes. Como la riqueza del país no habrá cambiado cuando se toma esa decisión, inevitablemente el dinero que tenemos se habrá depreciado en la misma medida que el crecimiento de la masa monetaria. Sin embargo, resulta muy conveniente buscar excusas para justificarla como, por ejemplo, la guerra de Ucrania. No hay que olvidar que otra razón por la que se incrementa el precio de la cesta de la compra es el encarecimiento de los productos del sector primario debido a las trabas productivas que impone la agenda 2030.

La imagen y los símbolos

Sin ningún escrúpulo se utiliza la imagen al servicio de la desinformación. El propósito es el de crear miedo o rechazo. Baste con citar un par de ejemplos:

  • Se ocultó intencionadamente la violencia ejercida por los independentistas catalanes en las manifestaciones posteriores al 1 de octubre de 2017, con objeto de suavizar los hechos a la vista del ciudadano
  • Se presentaron los movimientos de protesta en Ferraz, tras el anuncio de la ley de amnistía, como movimientos fascistas violentos que había que rechazar con contundencia. Este enfoque tenía por objeto agravar los hechos a la vista del ciudadano. Es verdad que aparecieron, en algunas ocasiones, grupos minoritarios violentos, perfectamente conocidos e identificados por la policía, pero la mayoría era gente pacífica, de cierta edad, que solo querían visibilizar su protesta. Lo acredito porque yo estuve allí en unas cuantas ocasiones. No descarto, en absoluto, que estos grupos violentos que por allí aparecieron estuvieran financiados por aquellos con interés en desacreditar esas concentraciones. No sería la primera vez ni será la última.

Los símbolos son usados a veces como recurso para canalizar afectos. En este mundo abducido por la preocupación climática se intenta sustituir los afectos naturales hacia la propia descendencia, por afectos a animales. Se criminaliza la defensa de la vida, mientras se defiende, hasta la extenuación con el uso de símbolos, a animales en peligro de extinción.

Recuerdo haber transmitido mi perplejidad a un conocido sobre el porqué consideraba él el aborto como un derecho y, sin embargo, se desvivía por defender al lince ibérico. La respuesta no se hizo esperar. Me respondió con toda frialdad que su comportamiento obedecía a que había menos linces que seres humanos. Sin duda, ese es el camino por el que nos quieren llevar: la deshumanización globalista al encuentro del Gran Reinicio (Big Reset). ¡Vayan preparando su testamento vital!

Dispositivos móviles

La dependencia mundial de los dispositivos móviles para el entretenimiento, para acceso a la información y para la comunicación, nos hace sujetos involuntarios e inconscientes de geolocalización, manipulación informativa y vulneración de nuestra intimidad, compartiendo información, sustraída sin nuestro permiso, de nuestros gustos e intimidad. Los dispositivos móviles son el referente moderno de la famosa Telepantalla de la sociedad tiranizada que Orwell presentaba en su novela 1984. Todavía hay muchos ingenuos que piensan que Alexa o Siri tienen como única función la de servir a los intereses del usuario que los ha adquirido. No se engañen, el único dispositivo móvil discreto es el que está con la batería agotada. Desconfíen de un móvil supuestamente apagado. Siempre mantiene alguna funcionalidad latente que nunca conoceremos.

Monopolio de la educación

El modelo educativo de la izquierda, que siempre ha pretendido una educación exclusivamente pública, posibilita el adoctrinamiento en las aulas. Un Estado libre y bienintencionado debe favorecer la competencia y ayudar a la libre elección de educación. La competencia es la única garantía de máxima calidad al mejor precio. No es casualidad que la izquierda no quiera ni oír hablar del cheque escolar que facilita la libre elección educativa a un precio justo. No obstante, los políticos de izquierdas no tienen escrúpulos, mientras defienden en sus discursos la igualdad de todos, en llevar a sus hijos, con cargo a nuestros impuestos, a los mejores colegios privados, mientras muchos ciudadanos, la mayoría, no tienen opción de elegir. Como diría Orwell en su libro «La rebelión en la granja»: «todos los animales son iguales, pero unos más que otros».

Control de la información a la que se puede acceder

La información que no interesa a los poderosos desaparece de internet, dejando, como mucho, unos pocos enlaces a algún cuestionable chequeador de veracidad que suele presentar una argumentación poco rigurosa, aunque suficiente para una amplia parroquia que adolece de falta de pensamiento crítico. A falta de fundamento serio que apoye un desmentido, el desmentido se apoya en creencias sembradas en la población y en falacias tipo que el público no sabe identificar.

Prueben a buscar en internet el “informe del hospital de Barbastro” que establecía una correlación importante entre los primeros muertos por Covid con los vacunados contra la gripe estacional. No lo encontrarán. Tan solo podrán hallar desmentidos mediocres de los chequeadores de veracidad, pero nunca encontrarán el informe original. Estos chequeadores, nunca imparciales, se apoyan en una afirmación que no es concluyente, ya que es cierto que correlación no significa necesariamente causalidad, pero mucho menos significa no causalidad. Con lo cual el argumento usado en el desmentido carece de validez.

¿Qué se puede hacer?

He aquí unas pocas sugerencias de defensa contra la manipulación social:

  • Tener clara nuestra escala de valores y comprometernos con ellos, adquiriendo un compromiso inquebrantable con nuestra visión de la vida.
  • Recuperar el poder y la libertad personal que quieren quitarnos. La espiritualidad, que pretenden eliminar, da sentido a nuestra vida.
  • Desarrollar el pensamiento crítico, identificando falacias tipo, exigiendo evidencias serias de todo, escuchando puntos de vista diferentes y apoyando, en caso de duda, siempre la opción minoritaria.
  • Tomar consciencia de nuestro papel en la farsa creada para dejar de colaborar con ella.
  • No caer en la estrategia del miedo. Mantener la calma y evitar confrontaciones. No tiene utilidad alguna intentar convencer a alguien de aquello que choca contra sus creencias. Sería tiempo perdido. En caso de disonancia cognitiva, recuerden que siempre gana el cerebro Límbico.
  • No perder nunca el sentido del humor.

Eusebio Alonso | Licenciado en ciencias físicas. Subdirector del diario online  Adelante España.

 

 

 

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7 comentarios en «Herramientas de manipulación social | Eusebio Alonso»

  1. Se nota que el autor del articulo tiene (a) poco conicimiento del contenido de la Agenda 2030 y (b) de su proceso de aprobación e implementación.

    De igual forma no se da cuenta que estamos viviendo en democracia y hay libertad de expresion con periodicos y publicaciones de derecha como de izquierda. No existe censura en España. En lo que se esta equivocando el autor es que si la mayoria no sigue su pensamiento, esto no significa que hay una manipulacion de masas. Simplemente significa que su ideario no es capaz de atraer a la mayoria de votantes.

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    • Lo que digo sobre la agenda 2030 es que no se ha votado explícitamente en ninguna parte del mundo. Ni siquiera en la ONU que es donde se aprobó en 2015. Las buenas palabras contenidas en los ODSs no significan nada cuando vemos el efecto nefasto que está teniendo su aplicación en nuestra sociedad. Espero que el amable lector me indique cómo la agenda 2030 va a mejorar nuestro bienestar y nuestras libertades futuras. Por favor, sin hacer uso de falacias tipo. Mejor con evidencias.
      Sin duda, hay publicaciones de izquierda y derecha aunque ya se está empezando a amenazar a los que no siguen el discurso que conviene al poder. Es cierto que todas se valen, en mayor o menor medida, de herramientas de manipulación aprovechando el escaso nivel en pensamiento crítico de buena parte de los españoles. Si he hecho alguna distinción con la izquierda es porque su uso de la manipulación excede todos los límites. Intento ilustrarlo con unos pocos ejemplos, pero no son los únicos. Hay muchísimos más. Lo de que vivimos en democracia y libertad es bastante cuestionable. ¿Me puede usted decir donde está la representación en las cámaras con escaños vacíos de los ciudadanos que se abstienen en las elecciones? ¿Acaso es ilegal no votar y por eso merece el desprecio del sistema? ¿Por qué los votos valen mas en unas regiones que en otras o si están concentrados o no lo están? ¿Por qué no hay listas abiertas? ¿Por qué tenemos instituciones redundantes que solo incrementan el gasto público? ¿Por qué cada día tenemos menos libertades y pagamos más impuestos? No se esfuerce demasiado, las evidencias lo dicen todo.

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      • Una gran respuesta a quien, como tantos otros», convencidos» del sistema, sólo repiten, como papagayos, mantras establecidos. Enhorabuena la Redacción.

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  2. Excelente artículo. Agradezco al autor el esfuerzo realizado en su análisis y redacción. Toca muchos temas interesantes para reflexionar sobre la situación de España y el mundo en general.

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  3. ¿Que no existe censura Sr. Matías?

    ¡Si no se puede hablar de Franco como no sea en los términos «políticamente correctos» que la progresía se encarga de repetir!

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