Financiados con dinero negro

Pero ahora, el Centro Europeo para la Ley y la Justicia publicó un informe en el que denunciaba que la agenda de la ONU estaba dirigida por fundaciones que promueven la agenda del lobby LGTBI y el abortismo con dinero negro

El informe del Centro Europeo para el Derecho y la Justicia describe detalladamente cómo se utiliza una red de canales de financiación privada para el sistema de derechos humanos de la ONU con el fin de promover discretamente determinados objetivos políticos, entre ellos el aborto y la agenda del lobby LGBTI.

Intento de rechazo

Los supuestos expertos de la ONU y sus colaboradores de organizaciones no gubernamentales, financiados por las mismas fundaciones privadas, acusaron al Centro Europeo de Derecho y Justicia de ser “poco profesional”, “poco ético” e “impreciso”, aunque ninguno de ellos negaron la existencia de flujos de financiación privada y la influencia éste que ejerce en el sistema de derechos humanos de la ONU, ni en sus críticas presentadas por escrito ni en sus intervenciones del 3 de septiembre.

Tampoco negaron el incumplimiento por parte de los expertos de la ONU de rendir cuentas de al menos 11 millones de dólares de fondos no contabilizados. En cambio, los expertos de la ONU y sus colaboradores atacaron al Centro Europeo para la Ley y la Justicia, insistiendo repetidamente en que no había nada que ver.

Fionnuala D. Ní Aoláin, presidenta del Programa de Mujeres de la Open Society Foundations y relatora Especial de la ONU sobre derechos humanos y lucha contra el terrorismo, calificó el informe de “ataque falaz a la integridad de los procesos especiales”.

Además, entre las organizaciones no gubernamentales que se hicieron eco de estos mismos argumentos en la reunión del 3 de septiembre se encontraban asociaciones abortistas y LGBT: el Centro de Derechos Reproductivos, Amnistía Internacional, la Comisión Internacional de Juristas y la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersexuales, todas ellas vinculadas a la Fundación Open Society.

Sin embargo, otras organizaciones no gubernamentales independientes se mostraron sorprendidas por la virulencia de las críticas contra el informe del Centro Europeo para la Ley y la Justicia. El Instituto de Investigación de ONGs instó a los relatores especiales a “abordar el fondo y no sólo atacar al mensajero”.

(Con información de Hispanidad)