Entre los principales accionistas está BlackRock, que ocupa el primer lugar del ranking con un 5,24% en el capital de la compañía. De hecho, en noviembre del año pasado apostó por la compañía alemana, casualidad (?) cuando compró un paquete de 80.000 acciones que para ese momento costaron 12,5 millones de euros y al día de hoy se valorizaron 40%. Le siguen otros fondos de inversión como Wellington Management (5,08%) y Capital Group (5,05%). La lista se complementa con otros fondos que compraron acciones después del estallido de la guerra, con Vanguard, FMR y Europacific Growth con poco más de 3% cada una; y cierran Dimensional Found, Fil Limited, M&G y Lsv AM con 2,9% cada una.

Máximos históricos en bolsa

Desde que se iniciara la guerra el 24 de febrero de 2022, Rheinmetall ha ido encadenando máximos históricos en bolsa hasta tal punto que se ha revalorizado un 213,8% en solo un año. Sus acciones han pasado de los 106 euros el 20 de febrero de 2022 a los 226,60 actuales.

En esta semana, decisiva en la decisión de mandar Leopard a Ucrania, y concretamente el 24 de enero, los títulos de la empresa cerraban en 223,1 euros mientras que a media sesión del día 25 se había revalorizado cerca de un 2% tras confirmarse la noticia.

Y, como no podría ser de otra manera, el fabricante alemán de armamento acaba de elevar sus previsiones de ventas por la mayor demanda de armas. Según recoge la agencia Reuters, el director ejecutivo de Rheinmetall, Armin Papperger, le dijo a la revista alemana Stern que espera que las ventas crezcan entre 11.000 y 12.000 millones de euros en 2025, frente al rango de 10.000 a 11.000 millones de euros estimado por la empresa en noviembre. Para 2022, espera unas ventas de 6.500 millones de euros.

La compañía, fundada en 1889 para suministrar munición al entonces Imperio Alemán, dice que tiene disponibles un total de 139 Leopard, 51 del modelo 2 y 88 del modelo 1, el más antiguo.

BlackRock y la reconstrucción de Ucrania

Hace dos semanas, el presidente de Ucrania tuvo una videoconferencia con el director ejecutivo de BlackRock, Larry Fink, en la que llegaron a un «acuerdo para coordinar los esfuerzos de inversión para reconstruir la nación devastada por la guerra». El plan de reconstrucción se hará con objetivos fijados en el corto plazo, como se señaló tras la citada reunión, de la que se reveló también que algunos ejecutivos del gigante financiero visitarán Ucrania este año para «asesorar al Gobierno ucraniano sobre cómo estructurar los fondos de reconstrucción del país», algo que ya se estipulaba en un acuerdo de colaboración firmado el 10 de noviembre de 2022 por el Ministerio de Economía de Ucrania y BlackRock Financial Market Advisory (FMA).