Estrategias de pactos: poder por encima de los principios
El acercamiento entre el PP y Junts ha generado una mezcla de críticas y apoyos dentro del partido. La dirección de Génova, liderada por Feijóo, busca alianzas con los partidos independentistas para «echar a Sánchez», lo que ha llevado a muchos votantes – y pocos políticos- a cuestionar si los principios del partido están siendo sacrificados en favor del poder.
Feijóo ha dejado claro su deseo de «dialogar» con Junts, aunque ha puesto límites a este acercamiento, como aseguró en una entrevista en Onda Cero: «No habrá foto en Waterloo». Esto es, poner límites a una foto, que es una simple cuestión estética y sin importancia, pero no a los temas profundos como la unidad de España. Esos son negociables.
La estrategia de Feijóo aunque ha generado un cierto runrún en Génova, no habrá una revuelta interna. La dirección del partido ha asegurado su autonomía para tomar decisiones sin interferencias, especialmente desde Madrid
Algunas voces críticas de cara a sus electores… pero al final hacen lo que les dictan
Algunos barones como Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, o Alejandro Fernández, líder del PP catalán, han sido voces críticas en este debate pero de cara a sus votantes, ya que al final «han tragado» con la política de pactos y blanqueamiento impuesta por Feijóo.
Así, Isabel Díaz Ayuso, aunque habla de su oposición a los independentistas, al final ha dado un paso atrás, permitiendo a Feijóo explorar opciones de pacto con Junts. Preguntada sobre esta posibilidad, Ayuso comentó: «En los Parlamentos, cuando uno va a votar, hay veces que coinciden las votaciones con quien uno no tiene nada que ver».
Por su parte, desde Cataluña, Alejandro Fernández, aunque también ha demostrado su oposición a cualquier entendimiento con Junts, al final, el PP catalán ha suavizado su tono apoyando conversaciones «limitadas» con Junts para desalojar a Sánchez.
Un sistema partitocrático: alternancia en el poder sin principios
El acercamiento del PP con fuerzas independentistas no es solo una estrategia política, sino un síntoma de un sistema basado en el régimen partitocrático PP-PSOE, que ha demostrado ser corrupto y corruptor. Este sistema de alternancia en el poder da la falsa sensación de democracia, pero en realidad, ambos partidos están más interesados en mantener el poder que en defender principios claros y coherentes.
Este contexto político subraya cómo el PP y el PSOE, a pesar de sus diferencias, operan dentro de un sistema que prioriza la alternancia en el poder sobre la coherencia ideológica. La disposición del PP a pactar con Junts es un reflejo de este sistema, donde la toma del poder es el único objetivo real, aún a costa de la renuncia a principios.
En definitiva, el PP, bajo el liderazgo de Feijóo, está navegando en aguas peligrosas al buscar pactos con partidos como Junts y PNV. Este movimiento, criticado como un intento de blanquear a golpistas e independentistas, revela un sistema político donde el poder es la única constante.
La alternancia entre PP y PSOE no puede seguir siendo una excusa para eludir responsabilidades y principios fundamentales en la defensa de la unidad y soberanía de España.
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