España lidera el abandono escolar y el 36 % de sus universitarios tiene un empleo inferior a su formación

Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin
Los jóvenes estudiantes españoles recorren su camino por las aulas entre las sombras y la incertidumbre. No en vano, nuestro país ha vuelto a marcar récords en sus tasas de abandono escolar temprano.

Abandono educativo temprano

La tasa de abandono educativo temprano en 2022 se situó en un 13,9 %, la más alta de la UE tan solo por detrás de Rumanía. Este porcentaje hace referencia al número de jóvenes de 18 a 24 años que no ha completado la segunda etapa de secundaria (FP de grado medio, básica o bachillerato) y que, además, no ha seguido con ningún tipo de formación.

Desde 2012, la tasa de abandono temprano en España ha ido disminuyendo. Según datos del Ministerio de Educación, la diferencia entre hombres (16,5 %) y mujeres (11,2 %) sigue siendo significativa.

El fracaso escolar

Antes de esa etapa, las bases también llevan aparejadas sus propias amenazas. El informe PISA, al que se enfrentan los alumnos del estadio inmediatamente anterior a los que luego pueden engrosar las tasas de abandono educativo, es decir, los de 15 años, no ha salido bien.
Así, la investigación de la OCDE concluyó que España seguía cotizando a la baja en desempeño educativo. Nuestros alumnos obtuvieron en 2022 una puntuación de 473 en matemáticas y de 474 en lecturas, mientras que en 2018 habían alcanzado un promedio de 481 y 477.
Es decir, que los estudiantes de 15 y de 16 años han marcado sus peores resultados de la historia en matemáticas, a la vez que han emborronado sus cifras en lectura.
Además, existe una brecha entre hombres y mujeres que no recibe la atención necesaria por parte de las instituciones. El 67 % de los fiascos en las aulas corresponden a los hombres, pero parece que el problema se ignora por el hecho de ser hombres.
Por otra partes, tres de cada cuatro escolares que abandonan el sistema educativo antes de tiempo son niños. Y, sin embargo, o precisamente por eso, el problema no está ni en la agenda política ni mediática. Este tema no se atiende porque se trata de hombres. Cuando hay un problema con las niñas, nos volcamos todos, pese a que les suele ir fenomenal en la escuela.

Sobrecualificación estéril

En la otra parte de la balanza, y habiendo superado los golpes que tumban a aquellos que integran las listas del fracaso escolar y el abandono educativo, están aquellos, y no son pocos, que acaban superando tantos obstáculos que en la meta se ven sobrecualificados, y quizás dedicándose a un trabajo que poco o nada tuvo que ver con lo que estudiaron o, si lo tiene, es precario y mal pagado.
España lidera la sobrecualificación en la Unión Europea, y es que el 36 % de los universitarios tiene un empleo inferior a su formación.
Algunas anomalías que ocurren en el mercado laboral español se dan con más frecuencia que en el resto de países europeos.
Los expertos, tras analizar los datos de Eurostat, concluyeron que los trabajadores que cuentan como mínimo de una licenciatura universitaria y que sí ocupan un puesto adecuado a su formación, eran poco más del 63 % en 2022.

La losa de las leyes educativas

Por último, todas estas contrariedades han intentado ser abordadas desde las diferentes leyes educativas, pero estas normativas –hasta ocho desde 1980–, lejos de lograr su objetivo, han acabado por enmarañar aún más tanto al sistema en general como a profesores y estudiantes en particular.
A la conocida como ley Wert, aprobada en 2013 bajo el Ejecutivo de Mariano Rajoy pero que casi no se implantó, le ha seguido la ya conocida como ley Celaá que no solo en nada mejora la situación, sino que empeora la situación, tal y como se está pudiendo comprobar en los últimos informes.
Mientras, el gran pacto de Estado, pedido hasta la saciedad por profesionales, docentes, pedagogos y, en general, por la comunidad educativa, sigue sin llegar pese a su urgencia, Lo que se quiere por parte de los políticos es una masa de escolares a los que pueda adoctrinar. La política en España en materia de educación se ha dedicado a destruir lo que se hizo en el pasado y a intentar manipular y adoctrinar a los niños. No interesa ningún pacto educativo. No interesa la educación. Solo el adoctrinamiento.
(con información de El Debate)

Deja un comentario