En España nacieron dos bebés, concebidos por un robot que inyecta esperma controlado por el mando de PlayStation 5.
Un procedimiento que requiere de la mano experta de un embriólogo lo pudo hacer un ingeniero que, según el Mit Technology Review, no tenía «experiencia real en medicina de fertilidad».
Según estas personas, el principal objetivo de la automatización de la FIV es dar a luz a muchos más bebés. Alrededor de 500.000 bebés nacen cada año en todo el mundo mediante FIV. El objetivo es aumentar el número de niños que nacen cada año de medio millón a 30 millones. Aunque aún no existe una máquina de fertilidad completa, la automatización de partes del proceso, como la inyección de esperma, la congelación de óvulos o la reproducción de embriones, podría permitir una aplicación más radical e innovaciones, como la edición de genes o incluso úteros artificiales.
Overture Life ha presentado una solicitud para patentar un biochip de un laboratorio FIV en miniatura. Según la empresa, ese sistema de fertilidad autónomo podría ser usado por cualquier ginecólogo común.
La FIV ha experimentado una «progresiva digitalización, automatización y robotización» en los laboratorios desde que comenzó a utilizarse como método para traer bebés al mundo.
Los robots no son los únicos que están acelerando el desarrollo de la fecundación in vitro, la inteligencia artificial también juega un papel importante desde 2018. Debido tanto a los robots como a la IA, el papel del personal empieza a no tener sentido incluso.
Los investigadores ya sueñan con máquinas de fertilidad y úteros artificiales que gesten niños en centros científicos hasta el nacimiento. Incluso hay quienes imaginan robots que puedan ser lanzados al espacio repletos de óvulos y espermatozoides criopreservados hacia algún planeta distante, donde esas máquinas podrían arrancar y crear una nueva sociedad humana.
Además de los problemas éticos y morales de la FIV, estamos en el umbral de un nuevo mundo terrible e inquietante en el que el hombre y la mujer son y serán cada vez más inútiles. Cada vez estamos más en manos de las máquinas. Estamos perdiendo nuestra capacidad humana, Y por el camino destruyendo muchas vidas humanas.
(Con información de IfamNews /20 minutos)
