“Y a ti que más te da” | José Antonio Ruiz de la Hermosa

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Lo sucedido esta semana, que no es más que el prólogo de la que viene y el devenir de la pasada y, así, hasta el infinito, o sea, la destrucción final del mundo que conozco me ha llevado a retrotraerme en mi propia historia y la de mi Patria. Bueno, y también en la de las patrias de los demás, pues en esta aldea global, se está tratando de reducir a meros números a las personas y sobre todo a las identidades. Permítanme que repase mi historia, el cómo y el porqué de la situación que me ha llevado a las conclusiones finales de este artículo.

Hace ya algunos años, cuando Rajoy entregó sin lucha la presidencia del Consejo de Ministros de España a los social-comunistas, bueno en realidad a los representantes del Globalismo y del Comunismo Internacional, creí, estúpidamente, que no me quedaba ya nada por ver u oír, más que lo que en esos días y los del desgobierno de Rajoy había contemplado desde el poco tiempo que me dedicaba a seguir los pasos de la política española. Pero…, me equivocaba.

Durante años he seguido el devenir de España. Primero y en mi juventud, tratando de ilustrarme con los conocimientos sobre la teoría política, luego adentrándome en la práctica. Probé a vivir el sueño de una España “Justa” de una Patria por la que luchar y una ideología que me llevaba a la espiritualidad, Pero esa “FE” era ya un alma sin cuerpo. Después probé con la evolución a la democracia de los que, aun habiendo estado en el Régimen anterior, creí que querían servir a la Nación. En ambos casos me equivoqué, pues si había alma y podría regresar al cuerpo y, los transeúntes a la democracia, en realidad lo eran hacia la teocracia del poder económico, y no precisamente el de mantener a España entre las diez potencias económicas mundiales y, sobre todo mantener la esencia de lo español.

Al final, el Ejército me salvó de la política y vi los toros desde la barrera. No solo eso, sino que pude observar sin poder pronunciarme, comparar con otras tierras y otras gentes y, finalmente, evaluar resultados. La evaluación es simple: Nuevamente España sirve de laboratorio de experimentación. La Masonería Internacional, verdadero garante de la acción globalista, ha elegido a quien en su día sirvió a su principal enemigo, la Iglesia Católica y todos sus valores Y en ese momento nos encontramos.

Al igual que hace ya muchos años, se han ido seleccionando y enseñando a actuar a personas carentes de ningún tipo de moral, creencia y escrúpulos, situándolas en lugares claves, en que como simples correas de transmisión ejecuten los mandatos de la agenda 2.030, simplemente ejecuten, pues no tienen por qué conocer ni el porqué, solo realizar el cómo. Lógicamente esta misión no se podría encargar a personas medianamente capaces de tener conciencia. Y así, nos encontramos, son las acciones más irresponsables en manos de quien debiera ser el valladar de quienes actúan contra el pueblo español y en definitiva contra España.

Oigo continuamente las críticas a la capacidad mental o de conocimientos de quienes nos desgobiernan, y yo pregunto. ¿pero ustedes todavía no se han dado cuenta de que están ahí por esa causa? En realidad, ninguna de ellas se encuentra ahí por casualidad. Simplemente y esto lo digo por aquellos que conocen el funcionamiento del sistema democrático español y el funcionamiento de los partidos, que en sí mismos son en realidad una oficina de colocación, en la cual no se busca al más capacitado para defender tecnológicamente posturas y sobre todo servir a la Nación. No, mi experiencia y mi visión de la jugada es muy diferente. Y afirmo esto, porque no es casualidad que exista el “tito Bernie”. El tito Bernie es lo que el sistema busca y quiere. Lo que sucede con él es que ha rebasado la línea que le marcaron, o simplemente quien verdaderamente mueve los hilos ha decidido cambiar las reglas del juego o cambiar a quien juega.

En ningún momento creo que el tito Bernie sea una excepción, al revés, es lo normal en un sistema corrupto. En el cual, si ustedes se fijan ha habido un enriquecimiento brutal de quienes no tenían nada y ahora o hasta hace poco han sido los dirigentes. La famosa página de transparencia, donde los personajes públicos cuentan lo que tienen, es más falsa que un euro con la cara de Popeye el marino. Simplemente, es un engaño. Esta semana un intrépido reportero, con muy pocas luces, se ponía a las puertas de una sala donde había actuado, y nunca mejor dicho, una responsable máxima en este juego. Los entrevistados, negaban la mayor, es decir que el partido que seguramente les paga indirectamente, en un puesto del entramado, fuese corrupto. El problema no es ese, es que a los que no les pagan, y además les están arruinando, también niegan la mayor.

Por eso, cuando inopinadamente un periodista de repente se despierta y hace su trabajo preguntando por los actores descubiertos con las manos en la masa, recibe una respuesta muy democrática: “Y a ti que más te da”… Algo que en cualquier país anglosajón, donde también cuecen habas, significa la muerte política de quien la pronuncia. Aquí no, porque quien la pronuncia es un engranaje más del sistema. Aunque con una diferencia y como dije antes: “Patxi Nadie”, posiblemente esté muy nervioso porque no entiende cómo está pasando esto. Simplemente, quien de verdad manda, quizás les esté enseñando la puerta de salida a estos actorcillos de segunda fila. Mientras, calientan en la banda del campo los jugadores que van a saltar a continuar el encuentro y el espectáculo. Y por eso, al que pregunta, qué más le da, si al final pasara lo previsto y no hay oposición, ni política, ni social.

Por desgracia, por más que miro desde mi barrera, no veo más que jugadores de igual catadura en este campo de juego. Salvo un milagro, nuestra maravillosa vida, la que hemos vivido desde los años cincuenta para acá, está cerca de irse por el sumidero de la estupidez de quien se deja robar y además aplaude a los “Odsman” o Kapos de los Sonderkommando de nuestro campo de concentración. Y ahí lo dejo…

José Antonio Ruiz de la Hermosa

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