La Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de EE. UU. confirmó por unanimidad el fallo de un tribunal inferior en Franciscan Alliance v. Becerra que protegió a unos 19.000 profesionales de la salud en Franciscan Alliance, una red católica de atención médica, de realizar procedimientos médicos contra su conciencia.
El fallo del tribunal inferior prohibió permanentemente al Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés) de EE. UU. “requerir a Franciscan Alliance que realice cirugías de transición de género o abortos en violación de sus sinceras creencias religiosas”.
Becket, el asesor legal que representa a Franciscan Alliance, dijo que el tribunal explicó que la protección permanente del estatuto era apropiada para los trabajadores de la salud.
“Este fallo es una gran victoria para los derechos de conciencia y la atención médica compasiva en Estados Unidos”, dijo Joseph Davis, abogado de Becket, en un comunicado . “Los médicos no pueden hacer su trabajo y cumplir con el Juramento Hipocrático si el gobierno les exige realizar procedimientos dañinos e irreversibles contra su conciencia y experiencia médica”.
“Durante años, nuestros clientes han brindado excelente atención médica a todos los pacientes que la necesitan”, dijo Davis . “El fallo de hoy garantiza que estos médicos y hospitales puedan continuar haciendo este trabajo crítico de acuerdo con su conciencia y juicio médico profesional”.
Mandato
El mandato se emitió por primera vez hace seis años como parte de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, comúnmente conocida como Obamacare. Becket señaló que esto se aplicaba a “prácticamente todos los médicos del país”.
La sección 1557 de Obamacare prohíbe que los programas de atención médica que reciben fondos federales discriminen a los pacientes por motivos de sexo.
En mayo de 2016, HHS emitió una regla que interpreta la prohibición de la Sección 1557 de «discriminación por motivos de sexo». Definió la discriminación sexual para incluir la discriminación basada en la “interrupción del embarazo” y el concepto en disputa de “identidad de género”.
Franciscan Alliance afirmó que la regla de 2016 violó la Ley de Procedimiento Administrativo (APA) al definir la «discriminación sexual» de manera inconsistente con el Título IX, que protege a las personas de la discriminación basada en el sexo en programas educativos o actividades que reciben asistencia financiera federal.
Esta regla fue rápidamente impugnada por nueve estados y un grupo de organizaciones religiosas y recibió protección de los tribunales federales en Dakota del Norte y Texas.
Franciscan Alliance también afirmó que la regla de 2016 violó la Ley de Restauración de la Libertad Religiosa (RFRA, por sus siglas en inglés) al obligarla a realizar abortos y cirugías de reasignación de género que no concuerdan con sus sinceras creencias religiosas.
Becket dice en su sitio web que la administración de Biden y la ACLU estaban “insatisfechos con no poder obligar a los proveedores de atención médica religiosos a violar su fe” y apelaron la decisión ante el Quinto Circuito.
