La Policía Nacional alerta al padre Custodio Ballester: “Temo que los yihadistas atenten contra su vida”

El sacerdote está siendo perseguido por delito de odio por la justicia española.

“Temo que los yihadistas atenten contra su vida”

El inspector jefe de la Policía Nacional Ricardo Ferris ha lanzado una advertencia directa al sacerdote Custodio Ballester: “No baje la guardia, puede ser objeto de un atentado yihadista”.

La alerta, difundida en una entrevista concedida a La Voz de Europa, llega en un momento de máxima tensión en España, donde los católicos afrontan una creciente persecución judicial y mediática por defender la fe y la verdad.

La alerta de Ricardo Ferris pone en evidencia la deriva ideológica y moral del Estado español frente a quienes se atreven a decir lo que otros callan.

Un inspector absuelto que no teme decir la verdad

Ricardo Ferris, absuelto recientemente por la Audiencia Provincial de Valencia del falso delito de odio que le imputaron por vincular con datos estadísticos la inmigración ilegal y delincuencia, ha demostrado una vez más su valentía. El agente se convirtió en símbolo de resistencia frente a la censura izquierdista que domina las instituciones.

En sus declaraciones, Ferris expresa su preocupación por el sacerdote Custodio Ballester, quien también ha sido señalado por la justicia española bajo acusaciones de “delito de odio”. Su “pecado” fue advertir sobre el peligro del islam radical para la civilización cristiana.

La persecución contra ambos refleja una tendencia alarmante: en España se condena a quienes defienden los valores cristianos, mientras se protege a quienes atacan nuestra fe y cultura.

“No baje la guardia, puede ser objeto de un atentado yihadista”

repite Ferris, consciente del riesgo real que supone enfrentarse al islamismo radical en un país cada vez más sometido al pensamiento único.

Delitos de odio: la nueva inquisición del globalismo

Los llamados “delitos de odio” se han convertido en un instrumento de control ideológico. En lugar de proteger la convivencia, el poder político los utiliza para silenciar voces disidentes. Como bien señalan muchos juristas, el concepto de “odio” es tan vago que puede aplicarse arbitrariamente a cualquier opinión que incomode al sistema.

Mientras se criminaliza la defensa de la fe católica, se promueve una ideología laicista y relativista que margina toda referencia a Dios.

El padre Custodio Ballester, un sacerdote en el punto de mira

El P. Custodio Ballester, conocido por su compromiso pastoral y por su defensa firme de la tradición cristiana, vive una persecución ideológica sin precedentes. Ha sido censurado por denunciar el avance del islam radical y por advertir de sus consecuencias sobre Europa.

El propio sacerdote lo expresó con claridad meridiana:

Si algún día sufro una agresión, habrá que pedir explicaciones a quienes me han puesto en el disparadero”.

Estas palabras reflejan no solo el peligro que afronta, sino también la responsabilidad moral y jurídica dela asociación islamista que le ha acusado, al Estado y fiscalía si algo llegara a sucederle. En lugar de protegerlo, las autoridades lo exponen, alimentando un clima de hostilidad hacia los católicos comprometidos con la verdad.

Ferris, con su advertencia pública, no solo muestra solidaridad, sino también una actitud profundamente cristiana: defender la vida y alertar del mal cuando se aproxima.

Una justicia ideologizada contra los defensores de la fe católica

El caso de Ricardo Ferris y el del padre Custodio Ballester revelan un patrón preocupante: la utilización política de la justicia para castigar a los que se oponen a la agenda izquierdista y globalista.

Ferris fue llevado ante los tribunales por decir una verdad estadística —la relación entre inmigración y delincuencia—. Ballester, por advertir sobre el peligro del islamismo. Ambos comparten el mismo enemigo: la corrección política que censura la verdad.

España vive un momento de fractura moral, donde la libertad de expresión y la libertad religiosa se ven amenazadas por el miedo y la manipulación.

En este contexto, Ricardo Ferris y el padre Custodio Ballester se convierten en un grito de resistencia frente a la injusticia institucionalizada.

La fe no se calla ante la amenaza

El mensaje de Ricardo Ferris al padre Custodio Ballester es más que una advertencia personal; es un símbolo del coraje cristiano frente a la persecución ideológica.

La defensa de la verdad, la libertad y la fe católica no admite silencios ni concesiones. Hoy, más que nunca, España necesita hombres valientes que hablen sin miedo y denuncien el avance del totalitarismo globalista.

La alerta de Ricardo Ferris al padre Custodio Ballester no solo resume una noticia: representa una declaración de principios frente al miedo y la censura.

Comparte con tus contactos:

Deja un comentario