El borrador de la nueva ley vasca de educación ya está en el Parlamento de Vitoria. Este primer documento, elaborado sobre la base de las aportaciones hechas por los expertos en la comisión de Educación, aboga por un «sistema multilingüe» con el euskera como «eje vertebrador» y donde, eso sí, habría que «priorizar» dicha lengua en las relaciones sociales entre alumnos y profesores.

Bildu negocian en secreto el verdadero contenido que finalmente tendrá la normativa.

La cuestión más polémica, como siempre, tiene que ver con el euskera. Y aquí hay diferencias: mientras los herederos de ETA de Bildu apuestan por la inmersión lingüística al estilo de Cataluña, por el contrario el PNV prefiere ir en la misma dirección pero con una velocidad menor: el predominio del euskera con las dos lenguas oficiales.

Así, el borrador de la legislación en ciernes no apuesta por la inmersión, sino que permitiría a los diferentes centros educativos construir sus propios proyectos lingüisticos en función de su particular entorno sociocultural. La meta sería común: el dominio de los alumnos de las dos lenguas oficiales, euskera y español, al término de la educación secundaria. Pero el camino sería diferente: hecho a la medida de cada centro educativo.

Además, el texto Bases para una educación del siglo XXI, habla de «priorizar» el uso del euskera en las relaciones entre alumnos y profesores, o sea, lo que se lleva haciendo desde hace treinta años. Sí sería novedosa la creación de un Instituto para el Aprendizaje de Euskera que se ocuparía sobre todo de formar al profesorado. El documento también apuesta por tomar «medidas eficaces» que sirvan para «compensar» las carencias en euskera mediante actividades extraescolares que se desarrollen en dicho idioma.

Acuerdo PNV-Bildu

No es un secreto que los dos partidos nacionalistas están de acuerdo en buena parte de lo que debería ser la nueva ley de educación. En los trabajos de la Comisión de Educación, PNV y Bildu han dado sobradas muestras de que coinciden en no pocos puntos. Y los peneuvistas ya han dejado claro que quieren un acuerdo con los bilduetarras. La gran duda estriba en si los jeltzales querrán llegar tan lejos como los abertzales, ya que estos últimos proponen una «inmersión lingüistica general».