Los terroristas de la CDR manejaban videos explicativos sobre cómo detonar un explosivo adosado al cuerpo

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27-02-2021 Incendian un furgón de la Guardia Urbana durante la manifestación en defensa de la libertad de Pablo Hasél y los derechos sociales tras 12 días de protestas, en Barcelona (España), a 27 de febrero de 2021. La protesta ha sido convocada por Arran, la CUP, Endavant, el SEPS y los CDR, entre otros para reclamar: `amnistía total, disolución de los antidisturbios autodeterminación y pan, techo y trabajo´. El rapero Pablo Hasel ingresó la mañana del 16 de febrero en el centro penitenciario de Ponent, en Lleida, tras ser arrestado por los Mossos d'Esquadra. Está condenado por la Audiencia Nacional a dos años, cuatro meses y quince días de cárcel por los delitos de enaltecimiento del terrorismo e injurias a la corona. POLITICA Lorena Sopêna i Lòpez - Europa Press

El escrito de la Fiscalía de la Audiencia Nacional en el que pide el procesamiento de los CDR encausados por un delito de pertenencia a organización terrorista, recoge que a uno de ellos, Germinal Tomás Abueso, se le encontró un vídeo autograbado en su móvil en el que se le observa realizando un circuito electrónico y explicando la utilidad del mismo, siendo ésta la de explosionar un artefacto adosado al cuerpo de una persona de tal manera que, aunque la persona que lo porte fuera abatida, la detonación del explosivo se produciría.

En el escrito de 43 páginas, al que ha tenido acceso Europa Press, el teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Miguel Ángel Carballo, realiza un repaso al papel de cada uno de los encausados en los hechos y explica que todos ellos comparten principios ideológicos favorables a la independencia y el activismo radical para conseguirla.

GERMINAL TOMÁS

De lo investigado, el fiscal indica que Germinal Tomás se encuadra en la confección de sustancias incendiarias, deflagrantes y explosivas, así como en la obtención de informaciones relativas a posibles objetivos. En la producción de esa ‘termita’ trabajaba junto a Jordi Ros y Alexis Codina en el domicilio de este último.

Sus visitas a esa vivienda se sucedían habitualmente en horas nocturnas y estaba varias horas a lo largo de un periodo de tres a cuatro meses. Los implicados manifestaban su preocupación por la peligrosidad de las actividades que estaban realizando, como queda de manifiesto en diversas conversaciones entre ellos.

Enmarcado en esas pruebas que hacían en el jardín de Codina, el investigado habría adquirido los conocimientos necesarios (con asesoramiento de expertos), y realizó la compra y la búsqueda de las sustancias o elementos necesarios para su fabricación realizando pruebas con dichas sustancias y otros artefactos.

También se le encontraron otros documentos, como el denominado ‘Taller de química espectacular’ –un manual sobre reacciones químicas–, un archivo en el que se detalla la funcionalidad de los óxidos de hierro –uno de los elementos clave para la confección del agente termita–, o un manual sobre la experimentación con electrólisis.

Hallaron un vídeo autograbado en su móvil en el que se le observa realizando un circuito electrónico y explicando la utilidad del mismo, siendo ésta la de explosionar un artefacto adosado al cuerpo de una persona de tal manera que, aunque la persona que lo porte fuera abatida, la detonación del explosivo se produciría.

De acuerdo con el escrito del fiscal, Eduardo Garzón ejercía dentro de la organización «un papel fundamental de dirección, coordinación, dinamización y planificación» de las actividades y tenía «una fuerte ascendencia sobre algunos de los miembros» con un papel dirigente en diferentes acciones como la desarrollada para impedir el traslado de los presos del ‘procés’ desde Lledoners en 2019.

Indica que se evidencia de lo investigado que se coordinaba con otras células dedicadas a elaborar la sustancia incendiaria denominada ‘termita’ para la fabricación de explosivos, también se encargaba de la obtención de material y de la financiación necesaria para llevar a cabo las actividades de la organización.

Suma que en julio de 2019 participó en una reunión en la empresa KEQUCO de Montcada i Reixach (Barcelona) que fue punto de encuentro de diferentes células que estarían llevando a cabo actividades de fabricación y elaboración de las sustancias explosivas. Querían coordinarse y planificar la logística necesaria para las mismas, y a esa reunión acudieron también Jordi Ros, Esther García Canet y Sonia Pascual.

Añade que también participó en reuniones de la plataforma Tsunami Democratic para preparar acciones como el bloqueo en el aeropuerto de El Prat o el corte de autopistas, que se ejecutaron tras la sentencia a los líderes del ‘procés’ en 2019. También se le detectó en lugares «donde se llevaban a cabo actos de violencia radical independentista, como en la acción desarrollada el día 15 de junio de 2018 en la ocupación de diversos ayuntamientos, dentro de la iniciativa del CDR con el lema ‘Tomemos el Poder 15J’.

ESTHER GARCÍA CANET Y SONIA PASCUAL

De Esther García Canet recuerda el fiscal que tenía un marcado activismo radical con su pertenencia al CDR de Mollet del Vallés y que su papel en la organización no se limita a saber que se hacía en el laboratorio clandestino del domicilio de Alexis Codina, sino que participó en acciones «ilícitas».

Dice que tenía un papel fundamental de «dinamización, dirección, planificación y coordinación de de las mismas y que su figura era «un referente de coordinación entre los diferentes grupos e individuos que tendrían el cometido de llevar a cabo acciones subversivas de alto nivel». Sostiene que era «cadena de transmisión entre los grupos radicales y los estamentos superiores».

La encuadran como fundadora en la aplicación Signal del grupo ‘GaarRapata’ en el que estaban varios de los miembros del ERT, y entraba en el grupo ‘Batcueva’ en el que estaba la «célula productiva» y que fue creado para la fabricación y elaboración de sustancias explosivas.

Canet es la persona que habría establecido el contacto con ‘expertos’, personas con el rol profesional químico o físico. Estando puntualmente al corriente de las pruebas semanales que se realizaban con sustancias y los avances en su producción.

Además, realizó reconocimientos de zona y búsqueda de objetivos para planificar acciones sobre infraestructuras críticas llegando «a marcar el momento de llevar a término los citados actos».

De Sonia Pascual, el fiscal indica que no sólo sabía del laboratorio clandestino, sino que además ejercía «funciones de dirección y coordinación, con contactos ‘más arriba'». Visitaba la ‘batcueva’ (el mencionado laboratorio) y participaba en grupos de redes para dar apoyo a detenidos en acciones de los CDR.

Señala que participaba en el grupo ‘No surrender’ en el que se coordinaban aparentemente para llevar a cabo acciones desde la máxima discreción. Y apunta que también participó en el bloqueo de El Prat, en los incidentes frente a la delegación del Gobierno de octubre de 2019 y en el corte de la frontera con Francia.

XAVIER BUIGAS Y QUERALT CASOLIVA

De Buigas, el informe destaca que tenía un marcado activismo radical y que ejercía un papel relevante y fundamental dentro de la organización terrorista, siendo la persona que recibió del denominado ‘CNI catalán’ el encargo de preparar la logística necesaria para ocupar el Parlament de Cataluña. De hecho, en su vehículo se encontró un cuaderno con apuntes realtivos a esa operación.

Dinamizaba y coordinaba también acciones de los CDR de la comarca del Osona y el Ripollés y su papel era el de autorizar esos actos y asignar tareas según los conocimientos de los distintos miembros de la organización radical.

De Queralt Casoliva el Ministerio Público destaca su militancia dentro de la Esquerra Independentista y que era integrante del CDR de la localidad barcelonesa de Sentmenat. En la organización ejercía funciones de coordinación y fue detectada su presencia en dos ocasiones en agosto de 2019 en el laboratorio del domicilio de Alexis Codina.

Era persona de confianza de Esther García Canet y participaba en el grupo de Signal denominado ‘grup de suport i xarxes’ para el apoyo a los detenidos por actividades de los CDRs. También estaba en el ‘No Surrender’ en el que se coordinaron para una acción delictiva.

(Agencias | Cope | Adelante España)

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