Los primeros 100 días de Trump: Un comienzo rápido y trascendental

Al regresar a la Casa Blanca, el presidente Donald Trump implementó una serie de medidas ejecutivas y cambios radicales de políticas, convirtiendo sus primeros 100 días en unos de los inicios de mandato presidencial más importantes en la historia moderna de Estados Unidos.

Como el 47º presidente, Trump retoma el trabajo que dejó y revisa las prioridades clave de su primer mandato que se retrasaron por la investigación de Rusia, se descarrilaron por los disturbios nacionales de Black Lives Matter o se dejaron de lado durante la pandemia de COVID-19.

Trump ha vuelto a centrarse con una intensidad sin precedentes en los temas fundamentales que han definido su agenda Make America Great Again: asegurar la frontera, contrarrestar las prácticas comerciales desleales de China y aumentar la producción energética nacional.

En los tres frentes, el presidente ha tomado medidas que muchos no vieron venir, como apuntar a todos los socios comerciales globales con una amplia estrategia arancelaria o pagar a El Salvador para albergar a miembros de pandillas inmigrantes ilegales.

Trump rompió el récord del presidente Franklin D. Roosevelt de 99 órdenes ejecutivas en sus primeros 100 días, posicionándose potencialmente como uno de los presidentes más influyentes en la remodelación de Washington.

Los partidarios han elogiado los primeros 100 días de regreso de Trump a la Oficina Oval como una restauración de los valores y la fortaleza de Estados Unidos, mientras que los opositores han condenado lo que consideran un exceso y caos.

Trump se ha apresurado a ganar impulso en los frentes interno y externo, reconociendo que sin un progreso rápido, la ventana para avanzar en temas claves de su agenda podría cerrarse rápidamente.

A medida que el presidente cumple 100 días de su segundo mandato, aquí hay un vistazo a sus principales acciones hasta el momento.

Frontera e inmigración

Una de las medidas más notables de Trump fue la represión inmediata de la inmigración ilegal. Inició deportaciones a gran escala y redujo significativamente el flujo migratorio a través de la frontera sur, una medida que obtuvo una amplia aprobación del electorado.

El primer día, firmó 10 órdenes ejecutivas , preparando el escenario para un mayor enfoque en la inmigración ilegal, el crimen y el fentanilo.

Estas acciones incluyeron declarar una emergencia nacional, enviar tropas a la frontera, restablecer la política de Permanecer en México, poner fin a la política de “capturar y liberar”, reiniciar la construcción del muro fronterizo, designar a los cárteles criminales como organizaciones terroristas extranjeras y poner fin a la ciudadanía por nacimiento.

Algunos de estos esfuerzos han sido cuestionados desde entonces en los tribunales.

Además, Trump impuso aranceles a México, Canadá y China en febrero en respuesta a la inmigración ilegal y al fentanilo que fluye hacia Estados Unidos a través de esos países.

Las políticas de Trump han reducido drásticamente los cruces fronterizos a nivel nacional con inmigrantes indocumentados. Los datos de la Patrulla Fronteriza mostraron que marzo tuvo la menor cantidad mensual de cruces fronterizos del suroeste en la historia, con aproximadamente 7180 cruces ilegales.

Economía y Comercio

La inflación disminuyó en marzo gracias a la caída de los precios de la gasolina. Sin embargo, la preocupación por la economía, en particular las políticas comerciales, aumenta la ansiedad y erosiona la confianza del consumidor.

Trump impuso aranceles a casi todos los socios comerciales de Estados Unidos, afirmando que han explotado a Estados Unidos durante décadas.

Esta medida desencadenó volatilidad en el mercado de valores, borrando billones de dólares en valor de mercado y alarmando a millones de personas que vieron cómo sus ahorros para la jubilación se reducían.

Trump instó a los estadounidenses a ser pacientes, diciendo que habrá dolor económico a corto plazo para cosechar beneficios a largo plazo.

En el centro de su política comercial de línea dura hay un hecho inquietante: en 2024, Estados Unidos registró un déficit comercial de 1,2 billones de dólares, el mayor del mundo.

El economista español Daniel Lacalle dijo a The Epoch Times que el gran déficit comercial y la creciente deuda nacional son prueba de que Estados Unidos ha sufrido durante mucho tiempo prácticas comerciales exteriores injustas, incluidas barreras arancelarias y no arancelarias.

La administración mantuvo los aranceles base del 10 % para todos los socios comerciales, pero suspendió los aranceles recíprocos durante 90 días para todos, excepto China. Estados Unidos negocia actualmente acuerdos comerciales con 90 países.

Relaciones entre Estados Unidos y China

La política exterior del segundo mandato de Trump gira en torno a la confrontación con el régimen comunista chino.

El presidente ha impuesto aranceles del 145 por ciento a las importaciones chinas, con el objetivo de poner fin a las prácticas comerciales desleales de Beijing.

La estrategia arancelaria de Trump es construir un bloque comercial global para aislar económicamente a China, según Christopher Balding, miembro senior del grupo de expertos Henry Jackson Society con sede en el Reino Unido.

El presidente también está liberando recursos militares en Europa y Medio Oriente para centrarse en contrarrestar las ambiciones geopolíticas de Beijing, dijo Balding.

A menos de un mes del segundo mandato de Trump, Panamá se convirtió en el primer país hispanoamericano en abandonar la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China bajo presión de Washington. Un grupo liderado por Estados Unidos también anunció planes para adquirir los puertos del Canal de Panamá de una empresa de Hong Kong, otro triunfo estratégico, aunque el acuerdo aún está pendiente.

La administración Trump también está  presionando a sus aliados para que reduzcan los lazos económicos con China, tomen medidas enérgicas contra los transbordos y bloqueen las inversiones chinas.

Si bien Trump ha expresado optimismo sobre alcanzar un acuerdo comercial con Beijing, Balding dijo que los esfuerzos de Washington para debilitar la influencia global del régimen chino continuarán, independientemente del resultado de las negociaciones.

Energía

Trump ha dado rienda suelta a su capacidad para reestructurar el sector energético estadounidense. Tan solo el día de su toma de posesión, firmó seis decretos ejecutivos destinados a «liberar la energía estadounidense», incluyendo uno que declara una emergencia energética nacional. Y desde entonces no ha bajado el ritmo.

Trump ha retirado a Estados Unidos de los Acuerdos climáticos de París, ha eliminado el “mandato” de vehículos eléctricos, ha abierto áreas masivas en Alaska para el desarrollo de combustibles fósiles, ha diluido las restricciones a la industria del carbón, ha derogado montones de regulaciones de la Agencia de Protección Ambiental y ha eliminado las menciones al cambio climático de los sitios web públicos.

También anticipó lo que su administración describe como una “extralimitación” regulatoria estatal y local, despidió a cientos de empleados de agencias federales, derogó los estándares de eficiencia energética de los electrodomésticos y levantó la pausa del gas natural licuado que ya había vencido.

Esa lista es un resumen a grandes rasgos de una larga lista. La esencia de las acciones del presidente es impulsar un cambio radical en las políticas energéticas y ambientales, con un énfasis desregulatorio en todo el gobierno, diseñado para desmantelar el enfoque de la administración Biden en la descarbonización.

El resultado de estas acciones dependerá de los mercados mundiales de petróleo y gas y de la rapidez con que el Congreso pueda adoptar la tan esperada reforma de permisos.

Política exterior

En un torbellino de esfuerzos diplomáticos, Trump lanzó una serie de negociaciones para poner fin a los conflictos en Ucrania y la Franja de Gaza y adoptó una línea dura frente a las ambiciones nucleares de Irán antes de iniciar las conversaciones.

Trump reabrió las conversaciones directas con el presidente ruso, Vladimir Putin, que habían estado congeladas durante cuatro años.

“Mi legado más orgulloso será el de un pacificador y unificador”, dijo Trump en su discurso inaugural del 20 de enero. “Eso es lo que quiero ser”.

El presidente ha presionado a los líderes de Kiev y Moscú para que se sienten a la mesa de negociaciones para un alto el fuego , aunque esas conversaciones se han estancado en gran medida y ninguna de las partes ha expresado su voluntad de comprometerse significativamente con las demandas de la otra.
Por orden de Trump, el enviado especial Steve Witkoff también ha participado en conversaciones con Teherán sobre el futuro de su programa nuclear. Trump ha señalado que no permitirá que Irán desarrolle un arma nuclear y ha declarado estar dispuesto a recurrir a la acción militar contra el régimen iraní para lograr ese objetivo.

Trump también ha  sugerido que Estados Unidos podría apoderarse de la Franja de Gaza, reubicar a sus habitantes y construir una “riviera” en Oriente Medio.

DEI y educación

Trump actuó rápidamente para poner fin a los programas de diversidad, equidad e inclusión (DEI), convirtiéndolos en uno de los primeros objetivos de su segundo mandato.

Si bien los defensores de la DEI argumentan que estos programas ayudan a remediar injusticias históricas contra los estadounidenses negros y otras minorías, Trump y su equipo tienen una visión diferente. Afirman que la DEI viola la ley de derechos civiles al introducir discriminación racial.

En su primer día en el cargo, Trump firmó una orden ejecutiva para poner fin a las iniciativas de DEI en todo el gobierno federal. Medidas ejecutivas posteriores ampliaron la iniciativa, centrándose en la influencia de la DEI en los estándares de acreditación universitaria y las prácticas de contratación federal.

Trump también ordenó la eliminación de los programas de DEI tanto en la educación primaria como secundaria y superior. Una carta del Departamento de Educación del 3 de abril fijó el 24 de abril como fecha límite para que los estados certifiquen que los distritos escolares no utilizan la DEI. Un juez federal bloqueó esta medida antes de la fecha límite.

La administración ha buscado apalancamiento en la financiación federal proporcionada a las universidades y escuelas públicas.

La Universidad de Columbia fue la primera en recibir una exigencia de la administración para abordar el antisemitismo o perder la financiación federal. Aceptó.

Harvard, ante una demanda similar para abordar el antisemitismo y erradicar la diversidad, equidad e inclusión (DEI), adoptó un enfoque diferente. Argumentando la libertad académica, la universidad rechazó las solicitudes y perdió 2 mil millones de dólares en fondos federales. La lucha ahora se resolverá en los tribunales.

En marzo, Trump firmó una orden ejecutiva para facilitar el desmantelamiento del Departamento de Educación de Estados Unidos, un paso más hacia el cumplimiento de una promesa de campaña. También eliminó a aproximadamente la mitad del personal del departamento.

Jonathan Williams, presidente y economista jefe del American Legislative Exchange Council, dijo a The Epoch Times que la orden de Trump tiene como objetivo completar “los asuntos pendientes de Ronald Reagan, quien quería eliminar el departamento en la década de 1980”.

El gobierno ordenó que todas las instituciones de aprendizaje reconocieran solo dos géneros y pusieran fin a las prácticas de la ideología transgénero, prohibiendo que los varones biológicos compitieran en deportes femeninos, una directiva que la NCAA cumplió rápidamente .

DUX

Como parte de su profunda reforma gubernamental, Trump creó el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) y nombró a Elon Musk como asesor especial para liderar el esfuerzo.

A pesar de su nombre, DOGE no es un departamento tradicional a nivel ministerial. Es un organismo temporal, cuya vigencia está prevista para el 4 de julio de 2026.

El equipo de DOGE, que incluye a multimillonarios tecnológicos e ingenieros de software, tiene  la tarea de ayudar a reducir personal, modernizar el software e identificar otros posibles ahorros en las agencias federales. Busca erradicar el despilfarro, el fraude y el abuso, un aspecto clave de la agenda de Trump.

Hasta el momento, DOGE informa que se han ahorrado 160 mil millones de dólares mediante ventas de activos, rescisiones de contratos y otros esfuerzos, muy por debajo de su audaz objetivo de 1 billón de dólares para el primer año.

La rapidez y la audacia del enfoque de Musk han generado fuertes críticas de los demócratas y los medios de comunicación, convirtiendo a DOGE en uno de los elementos más controvertidos de los primeros 100 días de Trump. Según informes, más de 120.000 empleados federales de 30 agencias han sido despedidos desde que Trump asumió el cargo.

Los sindicatos y muchos otros grupos han demandado a DOGE, en particular por su acceso a datos federales sensibles. A principios de abril, el Tribunal de Apelaciones del Cuarto Circuito de EE. UU. autorizó a DOGE a acceder a datos sensibles de tres agencias, manteniendo vigente una orden que le impedía acceder a los datos de la Administración del Seguro Social. Ese mismo mes, un juez federal de Maryland prorrogó la prohibición.

Después de que los ingresos y las ganancias de Tesla cayeran significativamente en el primer trimestre, Musk anunció planes para reducir sus contribuciones a DOGE en mayo.

Batallas legales

La agenda de Trump ha enfrentado más de 100 demandas, muchas de ellas poniendo a prueba los límites entre la autoridad judicial y ejecutiva.

Los estados y grupos externos han buscado desafiar las acciones de Trump en materia de inmigración, la ley DOGE, los despidos masivos dentro del poder ejecutivo y las drásticas suspensiones del gasto, entre otras cosas.

Los jueces de la Corte Suprema también han  intervenido con múltiples decisiones controvertidas sobre apelaciones de emergencia relacionadas con las políticas de Trump.
Los jueces han  programado una audiencia para mayo sobre tres órdenes judiciales de primera instancia que bloquearon la política de Trump que restringía la ciudadanía por nacimiento. Este asunto podría llevar a la corte a aclarar la 14.ª Enmienda, a la vez que ofrece posibles límites al uso de medidas cautelares a nivel nacional, que los republicanos han  descrito como una extralimitación de la autoridad de los jueces bajo la Constitución.

Mientras tanto, los jueces han estado debatiendo hasta dónde pueden acceder para conceder las solicitudes de ayuda de emergencia, en particular en lo que respecta a las deportaciones de Trump bajo la Ley de Enemigos Extranjeros. Tanto liberales como conservadores en la corte han emitido enérgicas disidencias, sugiriendo que sus colegas se han excedido en la autoridad del tribunal.

Salud

En su segundo mandato, Trump está priorizando la salud infantil, las enfermedades crónicas y la seguridad alimentaria, lo que ha sido influenciado en gran parte por su elección de Robert F. Kennedy Jr. como secretario de Salud y Servicios Humanos (HHS).

Kennedy ha liderado un cambio radical en el HHS, eliminando decenas de miles de empleos y reorientando el enfoque de la agencia. Ha impulsado la prohibición de colorantes artificiales y la restricción del uso de cupones de alimentos para eliminar alimentos y bebidas no nutritivos.

El secretario también prometió investigar las causas del aumento repentino del autismo en Estados Unidos. El director de los Institutos Nacionales de la Salud, Jay Bhattacharya, cuya agencia lidera el proyecto de investigación sobre el autismo, afirmó que el plan es publicar una convocatoria de propuestas para septiembre. Los científicos responderán entonces y se aprobarán las subvenciones.

«Me gustaría tener un cronograma dentro de un año, donde comenzarían a publicar los resultados preliminares», dijo Bhattacharya el 22 de abril.

¿Qué sigue?

Al cumplir sus primeros 100 días en el cargo, Trump sigue adelante con su agenda interna, con los recortes de impuestos en el tope de su lista.

Durante su primer mandato, Trump enfrentó la resistencia de algunos legisladores republicanos y a menudo se enfrentó a líderes republicanos como el entonces presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan (republicano por Wisconsin), y el entonces líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell (republicano por Kentucky). Trump ahora parece estar trabajando con mayor fluidez con el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson (republicano por Luisiana), y el líder de la mayoría del Senado, John Thune (demócrata por Dakota del Sur).

En abril, el Congreso aprobó un plan presupuestario, allanando el camino para que los líderes republicanos elaboraran un proyecto de ley amplio centrado en una serie de medidas de Trump sobre defensa, energía, inmigración y recortes de impuestos.

Los líderes republicanos en ambas cámaras tendrán que negociar el paquete de reconciliación y asegurar la aprobación de la agenda legislativa de Trump antes del receso de agosto.

Trump dijo que espera que sus recortes de impuestos impulsen un auge económico y bursátil, ayudando a compensar el dolor causado por los aranceles.

Recientemente propuso un nuevo recorte de impuestos sobre la renta para las personas que ganan menos de 200.000 dólares al año.

“Cuando se reduzcan los aranceles, los impuestos sobre la renta de muchas personas se reducirán sustancialmente, quizás incluso se eliminarán por completo”, escribió Trump en una publicación del 27 de abril en Truth Social. “La atención se centrará en quienes ganan menos de 200.000 dólares al año”.

Epoch Times

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