La ONU debe desaparecer

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La reciente amenaza ONU aborto Guatemala ha destapado nuevamente el verdadero rostro de la élite globalista: presionar a los Estados soberanos para que rindan su autoridad, su soberanía y sus leyes ante ellos y una ideología impuesta desde despachos no electos.

La ONU: de arbitro internacional a activista ideológico

La Organización de las Naciones Unidas nació con una promesa de paz, pero ha degenerado en un instrumento al servicio de la izquierda más radical y de la agenda woke internacional al servicio de las élites globalistas. Su injerencia en Guatemala demuestra que ya no busca mediar, sino imponer, chantajear, gobernar las naciones.

El llamado Comité de Derechos Humanos de la ONU ha exigido a Guatemala modificar sus leyes provida, tachándolas de «violación de derechos humanos». Lo más grave es que ahora intenta redefinir el concepto de «embarazo forzado» para incluir cualquier negativa al aborto.

“La negación del aborto constituye un ‘embarazo forzado’ y esto supone una violación del tratado de derechos civiles de la ONU”, afirmó dicho pseudo organismo, dejando claro que su objetivo es obligar a los Estados miembros a rendirse ante esta agenda ideológica.

Guatemala: nueva víctima de la amenaza ONU aborto

La amenaza de la ONU a Guatemala no es un caso aislado. Se trata de una estrategia bien definida para avanzar a través del chantaje, la amenaza y la imposición en la legalización del aborto y otras medidas ideológicas disfrazadas de derechos humanos. Lo grave es que estos «comités» no tienen carácter vinculante, pero actúan como si sus decisiones fueran obligatorias.

La ONU refleja el abuso de poder de organismos supranacionales sin control democrático. Nadie eligió a estos expertos. Nadie los votó. Sin embargo, pretenden legislar por encima de las constituciones nacionales.

Nuevas amenazas: redefinir los crímenes de lesa humanidad

La ONU está negociando un nuevo tratado sobre crímenes de lesa humanidad. En él podría incluirse una definición perversa y ampliada de «embarazo forzado». Países como Canadá, Reino Unido, Unión Europea y los países nórdicos impulsan que se incluya toda denegación de «servicios de salud sexual y reproductiva».

Esto incluiría el aborto, la ideología de género, y la educación sexual integral desde edades tempranas. La ONU es un instrumento de la agenda 2030, del globalismo anticristiano, del relativismo moral que destruye naciones y valores.

El globalismo contra la soberanía

La presión contra Guatemala tiene un objetivo claro: imponer el aborto como derecho internacional y criminalizar toda postura provida. Esto sienta un precedente muy peligroso.

Hoy es Guatemala. Mañana podría ser cualquier país que defienda la vida desde la concepción. Esta amenaza ONU aborto Guatemala no es más que una advertencia: si no cedes a sus exigencias ideológicas, serás difamado, presionado y se te acusará de crímenes de lesa humanidad.

La ONU debe desaparecer

El sistema está podrido desde su origen. La ONU se ha transformado en el brazo ejecutor del izquierdismo globalista. Si una organización como esta puede declarar que proteger a un niño por nacer es un crimen, entonces ha dejado de servir a la humanidad.

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