“No estamos hablando de políticas públicas, estamos hablando de derechos humanos fundamentales”.
Laurence Trochu, diputada al Parlamento Europeo desde 2024, es coordinadora de la Comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género del grupo ECR.
La periodista Hélène de Lauzun conversó con ella para europeanconservative.com , sobre el próximo debate plenario del Parlamento Europeo sobre la práctica de la gestación subrogada. Por su interés reproducimos dicha entrevista.
El Grupo ECR ha conseguido un debate sobre la gestación subrogada en el Parlamento Europeo durante el pleno de la próxima semana en Estrasburgo. ¿Puede explicar cómo surgió este debate?
El pasado agosto, Reem Alsalem, Relatora Especial de la ONU sobre la violencia contra las mujeres y las niñas, emitió un informe contundente sobre la gestación subrogada , condenando esta práctica por considerarla equivalente a la esclavitud y violatoria de innumerables leyes internacionales. En esa ocasión, solicité al Grupo ECR que solicitara un debate plenario sobre este tema en septiembre. Esto no fue posible por razones técnicas en septiembre ni durante la primera sesión plenaria de octubre, pero el debate finalmente tendrá lugar la semana que viene gracias a una coalición de grupos de derecha sobre el tema, desde el PPE hasta el Grupo ESN. Hemos trabajado arduamente durante las últimas semanas para asegurar este apoyo, y es una verdadera victoria para el Grupo ECR haber logrado un debate sobre un tema tan importante para nuestro grupo. Debemos agradecer al PPE, cuyo apoyo ha sido fundamental.
¿De qué manera el informe de la ONU, publicado este agosto, supone un nuevo avance en el tratamiento de la cuestión de la gestación subrogada a nivel internacional?
El informe de Reem Alsalem, que recibiremos en el Parlamento Europeo en noviembre por iniciativa de mi colega Paolo Inselvini, es el único texto internacional que condena inequívocamente la gestación subrogada en todas sus formas. Y proviene de la institución más oficial posible para todos los países del mundo. Por lo tanto, no tiene precedentes, y era necesario aprovechar esta oportunidad para que el Parlamento Europeo pudiera adoptar una postura más clara sobre un tema complejo.
¿Está reconocida la Declaración de Casablanca a nivel europeo?
La Declaración de Casablanca es un texto histórico en este campo. Firmada por expertos de todo el mundo, Casablanca desempeñó un papel decisivo en la inclusión de la abolición de la gestación subrogada en la agenda global y allanó el camino para avances como la directiva europea sobre la trata de personas, leyes nacionales para la protección de mujeres y niños, la prohibición de la gestación subrogada en la Constitución eslovaca y, por supuesto, el informe firmado por Reem Alsalem, quien asistió a la última conferencia organizada por Casablanca en Roma en 2024. Es una gran labor que deseamos continuar impulsando este debate.
¿Ha abordado ya la UE esta cuestión en el pasado?
La cuestión de la gestación subrogada se menciona específicamente en una directiva europea contra la trata de personas , que condena la explotación de la gestación subrogada. Este es un primer paso, pero no es suficiente, ya que deja la puerta abierta a una gestación subrogada que se consideraría ética por no ser remunerada. Necesitamos ir más allá.
¿Qué competencias tiene la UE sobre la gestación subrogada? ¿No es una competencia exclusiva de los Estados miembros?
Podría considerarse una cuestión de política sanitaria o demográfica, sobre la cual los Estados miembros deben conservar sus prerrogativas. Pero ese no es el punto. La gestación subrogada no es una forma de cuidado. Existe una Carta Europea de Derechos Fundamentales que consagra el derecho del niño a conocer a ambos progenitores, por ejemplo. Se trata de un texto jurídicamente vinculante. El Tratado de la Unión Europea, también vinculante para los Estados miembros, estipula que la UE protege los derechos del niño. La gestación subrogada debe ser condenada universalmente, y existen las herramientas para ello. No hablamos de políticas públicas, sino de derechos humanos fundamentales.
¿Existe cierta complacencia por parte de la UE hacia la gestación subrogada? ¿Existe resistencia a condenarla por parte de algunos eurodiputados o de la Comisión Europea? ¿Llega la UE al extremo de promover esta práctica de alguna manera?
No creo que la Unión sea complaciente en este sentido. Sobre todo, existen importantes divisiones. Algunos países la autorizan, otros la prohíben y otros la toleran. No obstante, la gestación subrogada se fomenta de forma indirecta, en particular mediante el reconocimiento del Certificado Parental Europeo , cuyo objetivo es que todos los Estados miembros reconozcan la filiación artificial, autorizada en un Estado pero no en otro. Pero la contrapartida de estas divisiones es que evitamos hablar de ello y ocultamos la realidad de esta práctica, que resulta bastante aborrecible si se analiza detenidamente. El objetivo de este debate es precisamente desvelar ese velo.
Derechos de las mujeres, derechos de los niños: ¿cuál es actualmente el ángulo más prometedor y más escuchado en la lucha contra la maternidad subrogada?
Creo que es un error separarlas. Al condenar la gestación subrogada, protegemos tanto a las mujeres como a los niños. Separar a un niño de la mujer que lo gesta es una tragedia para ambos, tanto psicológica como biológicamente, cuyas consecuencias aún se desconocen. Es una deshumanización de la mujer, vista como una fábrica de bebés, y del niño, que se convierte en un producto de consumo como cualquier otro. También es una conmoción antropológica y civilizatoria con efectos nocivos para la sociedad.
¿Qué espera del debate que se celebrará próximamente en el pleno? ¿Podemos esperar una resolución próximamente?
El hecho de que este debate se esté llevando a cabo ya es un gran paso adelante. Somos parlamentarios, hablemos de este tema tan importante. Espero que esto concientice sobre la realidad de los problemas que enfrentamos en este ámbito; sobre la realidad de la vida cotidiana de las mujeres cuyos vientres son explotados; sobre la realidad del trauma causado a los niños que son arrancados de sus gestantes. Si esta realidad se aborda sin complacencia ni mentiras, tendrá consecuencias, ¿y por qué no una solución? En cualquier caso, ese es mi objetivo.