Moreno Bonilla (PP) impulsa la islamización de las aulas en colegios e institutos de Andalucía

Enseña una cultura que es incompatible con la nuestra y que, entre otras cosas, relega a la mujer a un papel secundario.

Islamización de las aulas: un peligro creciente en España

La islamización de las aulas avanza en Andalucía con el aval del Partido Popular de Juanma Moreno Bonilla. El Gobierno andaluz mantiene el plan de impartir lengua árabe y cultura marroquí en colegios e institutos.

El presidente autonómico asegura que el programa seguirá en marcha sin cambios. Este curso ya está implantado en 95 centros educativos, la cifra más alta de toda España.

Mientras tanto, el gasto público en profesorado islámico se dispara, mientras la enseñanza de la religión católica retrocede. Un síntoma claro de la deriva ideológica que amenaza a las familias españolas.

Moreno Bonilla impulsa la islamización de las aulas

El PP andaluz ha dejado claro que seguirá reforzando el plan de lengua árabe y cultura marroquí. La consejera de Desarrollo Educativo, María del Carmen Castillo, defendió en el Parlamento que este programa resulta “válido” y debe mantenerse.

Esta decisión supone un paso más en la islamización de las aulas. La Junta destina cada vez más recursos a impulsar la presencia del islam en el sistema educativo, mientras se reduce el apoyo a la religión católica.

Los datos oficiales lo confirman. Andalucía gastó 843.061 euros en 2024 para pagar profesores de islam, frente a los 591.864 euros de 2023. Esto representa un aumento del 42% en solo un año.

Por el contrario, el presupuesto para la asignatura de religión católica descendió un 6% en el mismo período. El contraste refleja con claridad qué modelo educativo impulsa el Gobierno de Moreno Bonilla.

La islamización de las aulas frente a la tradición católica

La islamización de las aulas supone una amenaza para la, esencia, identidad cultural y religiosa de España. No se trata de un mero programa lingüístico. El plan enseña una visión del islam que impone valores contrarios a los principios cristianos y relega, entre otras cosas, a la mujer a un papel secundario.

La educación no puede convertirse en un instrumento para diluir nuestras raíces. España se ha forjado sobre la tradición cristiana, la defensa de la familia y la transmisión de valores sólidos.

Sin embargo, el PP andaluz cede al discurso multiculturalista globalista, promoviendo un islam político que se expande bajo la bandera de la tolerancia. Esta realidad es funcional a la agenda 2030 y al globalismo, que buscan desmantelar la identidad nacional.

El problema no reside solo en el PSOE, que históricamente ha promovido estas medidas. Ahora el PP, y más con Moreno Bonilla, se convierte en aliado de esa estrategia. Y lo hace con recursos públicos que deberían servir para fortalecer la enseñanza católica.

Consecuencias sociales de la islamización de las aulas

La islamización de las aulas no es inocua. Tiene efectos directos en la convivencia y en la transmisión cultural. Al priorizar el islam en las escuelas, la Junta de Andalucía margina la fe mayoritaria de los españoles.

Además, se normaliza una cultura incompatible con nuestra tradición. Una cultura que en muchos países islámicos limita la libertad religiosa, persigue a los cristianos y niega la igualdad real entre hombres y mujeres.

Este modelo educativo abre la puerta a una fractura social. En lugar de integrar a los inmigrantes bajo el marco de valores españoles, se fomenta una separación cultural que debilita la cohesión nacional.

La inversión en profesores de islam, muy superior al apoyo a la religión católica, representa un agravio para las familias que desean transmitir la fe cristiana a sus hijos.

Moreno Bonilla: un globalista al servicio de la agenda globalista

El papel de Juanma Moreno Bonilla en la islamización de las aulas no es casual. El presidente andaluz se ha mostrado en varias ocasiones como un político alineado con el discurso globalista.

Mientras presume de gestión moderada, impulsa políticas que benefician al islam y marginan la tradición cristiana. Su postura refuerza la estrategia de la izquierda y de organismos internacionales que promueven la diversidad cultural como dogma político.

El PP andaluz se convierte así en cómplice de una transformación educativa que ataca directamente a la identidad de España. No se trata solo de educación, sino de un proyecto político que busca redefinir los valores de nuestra nación.

La enseñanza de lengua árabe y cultura marroquí en casi un centenar de colegios representa un símbolo de esta deriva. El PP no frena la islamización; la acelera.

La islamización de las aulas en Andalucía demuestra que tanto el PSOE como el PP avanzan en la misma dirección: debilitar la enseñanza católica y promover una cultura ajena a nuestra identidad. El aumento del 42% en el gasto en profesorado islámico, unido al descenso en la enseñanza católica, confirma esta estrategia.

La islamización de las aulas no puede convertirse en el futuro de nuestros hijos.