Cada vez nacen menos niños en España. En apenas seis años, los nacimientos se han desplomado un 20%, pasando de los 375.791 entre enero y noviembre de 2017 a los 302.290 en el mismo periodo de 2022, según las estimaciones que realiza mensualmente el Instituto Nacional de Estadística (INE) a través de las inscripciones registradas en los Registros Civiles informatizados.

El INE permite analizar el hundimiento de los nacimientos por edad de la madre y, lo que se concluye con los datos es que las mujeres de todos los grupos de edad tienen menos hijos ahora que hace seis años o que hace tres (justo antes de la pandemia irrumpiera en la vida de los españoles).

En todos los grupos de edad de entre 15 y 39 años se ha reducido la natalidad, en el orden del 20%. En términos absolutos, destacan los descensos en las mujeres de entre 30 y 34 años, con 31.325 nacimientos menos en 2022 que en 2016, quedando ya por debajo de los 100.000. Lo mismo ocurre entre las mujeres de 35 a 39 años, donde los nacimientos entre enero y noviembre de 2022 se redujeron hasta los 91.030 niños, 23.137 menos que seis años antes.

Finalmente, mujeres de entre 25 y 29 años dieron a luz en los 11 primeros meses del año a 51.470 niños, que son 15.009 menos que en el mismo periodo de 2016.

Por regiones, la caída también es generalizada.

En todas las autonomías se registran menos nacimientos ahora (entre enero y noviembre de 2022) que en 2016. En todo caso, destacan los descensos de Melilla (-43%), Ceuta (-33%), Asturias, Canarias y País Vasco, las tres últimas con un 25% menos de nacimientos que entonces. En las comunidades que menos caen los nacimientos son Murcia (-13%), Baleares (-14%), Comunidad Valenciana (-15%), Aragón (-17%) y Madrid (-16%).

En términos absolutos, destaca Andalucía, con 14.699 nacimientos menos que seis años antes, Cataluña, con 11.530 menos, y Madrid (-10.221).

El drama de las pensiones

El problema demográfico agrava la sostenibilidad futura de las pensiones, recién reformadas y con un gasto al alza. La cuestión es cómo mantener a un volumen de pensionistas que crece en el tiempo, con una gran generación a punto de entrar en edad de jubilarse (los conocidos como ‘baby boom’, hijos de la explosión demográfica de la posguerra, nacidos entre 1957 y 1977), mientras los trabajadores potenciales se reducen.

España tiene una de las tasas de dependencia más altas de Europa, con una media de dos trabajadores por pensionista. Esta se disparará en los próximos años con la jubilación de la generación del baby boom. Eurostat, la oficina estadística de la UE, espera que para 2050 haya menos de dos personas en edad laboral por cada persona mayor dependiente.