El Gobierno de Canadá dio luz verde a la eutanasia sin permitir el derecho al cuidado paliativo

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Pedro Sánchez, promotor de la cultura de la muerte, sigue los mismos pasos que Trudeau

Canadá, con el globalista Trudeau a la cabeza, se ha convertido en uno de los países que más apoya la aberración y crimen de la eutanasia. A lo largo de 2022, según los últimos datos proporcionados por el Gobierno de Justin Trudeau en el Informe de Asistencia Médica para Morir (MAID), más de 13.200 personas decidieron acabar con su vida. Esto supuso que el 4,1 % de las muertes totales de Canadá ha sido por la eutanasia. Y la tendencia, por desgracia, como no podía ser de otra manera es ascendente. Es lo que quieren. Promocionar la eutanasia para que cada vez más personas acabe con su vida.

El gobierno canadiense ignora los cuidados paliativos

Esto podría haberse evitado con los cuidados paliativos, pero el presidente decidió dar luz verde a la eutanasia sin permitir el derecho a un final de la vida digno.

Y es que la ley de eutanasia canadiense, en vez de ayudarles a vivir, como se haría con una ley de cuidados paliativos, lo que busca es que la gente muera. En 2021 sufrió un cambio: podían recurrir a estos programas de eutanasiarse personas con afecciones físicas graves y crónicas, aunque no supusiesen un riesgo para su vida. Esto es, la eutanasia ya no va dirigida a personas con enfermedades terminales sino a personas con algunas enfermedades crónicas. Y mientras, se ignora y abandona la posibilidad de los cuidados paliativos.

Idea errónea de los cuidados paliativos

En este sentido, la canadiense Rebecca Vachon, directora del programa de salud del grupo de expertos Cardus, una asociación dedicada a aclarar y fortalecer, a través de la investigación y el diálogo, las formas en que las instituciones de la sociedad pueden trabajar juntas para el bien común, denuncia que en Canadá existe «una idea errónea» de que los cuidados paliativos se dan «solo al final de la vida de una persona». Así, afirma que hay muchos malentendidos sobre lo que realmente implica el cuidado paliativo.

Este cuidado, casi inexistente en el país, lleva a los ciudadanos enfermos a decidir siempre acabar con su vida. Tal y como informa Vachon, los pacientes no quieren saber nada de estos cuidados porque piensan que los médicos se desentienden de su trabajo y «renuncian a hacer su labor». Algo que no es cierto, ya que muchos de ellos están en contra de acabar con la vida de las personas.

Trudeau en contra de los cuidados paliativos

Al hilo, Vachon alega que el cuidado paliativo universal debería haber estado disponible siempre. De hecho, la Asociación Médica Canadiense defendió que este cuidado permanente debía estar disponible obligatoriamente en el país para todos. Sin embargo, Trudeau decidió dar luz verde a la eutanasia sin establecer el derecho al cuidado paliativo. Esto le convierte en el único país que ha tomado esta dura decisión.

El Gobierno de Pedro Sánchez sigue los mismos pasos que Trudeau. Son dignos títeres del globalismo que están implementando la agenda de la muerte tanto en España como en Canadá,

Fuente: María Fernández | El Debate

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