Wu, portavoz de la delegación del EPL en la Asamblea Popular Nacional (Legislativo), reunida estos días en Pekín, subrayó que «la cuestión de Taiwán es un asunto interno de China«. Además, el representante advirtió que «cuanto más azucen Estados Unidos y Japón la cuestión de Taiwán, más duras serán nuestras acciones para proteger nuestra soberanía e integridad territorial«.

China considera a Taiwán una provincia rebelde para cuya reunificación no ha descartado el uso de la fuerza desde que los nacionalistas del Kuomintang se replegaron allí en 1949 tras perder la guerra civil contra los comunistas.

A raíz de la ofensiva rusa en Ucrania, un funcionario de la seguridad nacional taiwanesa manifestó que «Pekín podría aprovechar la situación para comenzar una guerra cognitiva con Taiwán que convenza a los habitantes de la isla de que Estados Unidos no honraría su compromiso de defenderla».

La isla ha mantenido el nombre oficial de República de China y la simbología bajo la que los nacionalistas chinos gobernaron también el territorio de la actual República Popular antes de su derrota en la guerra civil, aunque con la democracia surgieron voces que apuestan por romper con ese pasado y declarar formalmente la independencia bajo el nombre de Taiwán.

Conflicto de China y Taiwán

La isla, que se gobierna de manera autónoma, es además uno de los mayores motivos de conflicto entre China y Estados Unidos, debido sobre todo a que Washington es el principal suministrador de armas de Taiwán y sería su mayor aliado militar en caso de conflicto bélico con el gigante asiático.

A raíz de la ofensiva rusa en Ucrania, un funcionario de la seguridad nacional taiwanesa manifestó que «Pekín podría aprovechar la situación para comenzar una guerra cognitiva con Taiwán que convenza a los habitantes de la isla de que Estados Unidos no honraría su compromiso de defenderla».