«Defensa de la Hispanidad» ya va por la quinta edición. Es un ensayo fascinante que tiene un poco de historia, de filosofía, de política, y en muchos aspectos de fondo, sus conclusiones son sorprendentemente actuales. A Ramiro de Maeztu le pasa como a G. K. Chesterton en el Reino Unido: ensayos de la primera mitad del siglo XX que son recuperados y puestos en valor para comprender nuestra realidad, y que, como en este caso, son editados y vueltos a editar. La celebración de la fiesta del 12 de Octubre bajo el nombre de «Fiesta de la Hispanidad», en España y en todas las naciones hermanas -desde Estados Unidos, Caribe, Hispanoamérica y Filipinas- hacen grandes a quienes nos contaron cómo y por qué es un orgullo celebrar y defender unos hechos y una identidad que han configurado para siempre la historia de la humanidad.
Maeztu está considerado como uno de los ensayistas y pensadores más prestigiosos de Europa, en su época. En el caso de España, lo es junto con Unamuno y Ortega y Gasset. En su prosa directa y sin artificios, influida por el ensayismo inglés, la expresión, se pone al servicio del pensamiento. Numerosos puntos de vista sobre las realidades políticas, sociales y económicas siguen vigentes. Su polifacética actividad y su presencia en numerosos escenarios, desde la guerra, en las trincheras de la Primera Guerra Mundial, el apogeo norteamericano en las calles de Nueva York, la política en el Congreso, la diplomática en Buenos Aires, y un largo etcétera. Viajar, reflexionar, comprender, proponer. Sus escritos suman miles títulos, entre crónicas, artículos, ensayos, prólogos, intervenciones públicas, discursos, libros. Fue, sin lugar a duda, un personaje excepcional, que supo lo que es la precariedad de la vida, las consecuencias de una mala política, la vuelta a la fe, las lecciones de la historia, los signos de los tiempos, o -en el caso de España- la necesidad del despertar social y cultural.
Ramiro de Maeztu
Editorial Rialp
344 páginas