“Debemos pasar a la ofensiva sin disculparnos por ser conservadores” —Presidente de Nazione Futura, Francesco Giubilei

Debemos pasar a la ofensiva
(Una batalla política sin una batalla cultural previa no se puede ganar. Si no transformamos primero el marco cultural, las victorias políticas serán frágiles o temporales)

Francesco Giubilei es un Historiador, editor y ensayista. Preside Nazione Futura, el principal think tank conservador de Italia, desde el cual ha construido una red intelectual y política que conecta corrientes soberanistas, conservadoras y cristianas en toda Europa.

En los últimos años se ha consolidado como una voz clave en los debates sobre la identidad europea, la soberanía nacional y la resistencia cultural al proyecto posnacional promovido desde Bruselas.

El periodista Javier Villamor le entrevista. Por su interés reproducimos dicha entrevista.

¿Qué es Nazione Futura y por qué es importante estar presente en esta batalla por el alma de Europa?

Nazione Futura es el principal think tank conservador italiano. Para nosotros, estar aquí hoy no es solo un placer, sino también un deber: un deber hacia nuestros amigos de Hungría, Francia, el Reino Unido, España y muchos otros países que han venido a participar y ayudar a organizar esta conferencia.

Es especialmente importante que este evento se celebre en Bruselas, que teóricamente es la capital de la Unión Europea. Sabemos que la Unión Europea no siempre actúa como una entidad conservadora y que muchas de sus políticas van en la dirección opuesta a nuestras ideas. Precisamente por eso, es importante estar aquí.

Además, no podemos olvidar lo que ocurrió hace un año o año y medio en otras conferencias conservadoras, cuando grupos vinculados a Antifa intentaron atacar nuestra libertad de expresión e interrumpir estos debates. Estar aquí también es una clara afirmación del derecho a hablar y pensar libremente.

Se habla mucho de una Europa posnacional. ¿Siguen siendo relevantes las naciones para el futuro de Europa?

Creo que Europa se enfrenta hoy a dos posibles caminos. Uno es la idea de una Europa de naciones. El otro es el proyecto de los Estados Unidos de Europa. Este último, en mi opinión, es un completo error.

La Unión Europea ya está cometiendo numerosos errores: con el llamado Pacto Verde, con las políticas migratorias, con las restricciones a la libertad de expresión y en muchos otros ámbitos. Sin embargo, la respuesta que propone una parte de la izquierda es siempre la misma: dar aún más poder a Bruselas en lugar de repensar el modelo.

Desde una perspectiva conservadora, abogamos por una confederación con menos competencias compartidas y un genuino respeto por el principio de subsidiariedad. Este principio también es particularmente importante en el pensamiento católico. Una Europa de naciones no es un retroceso, sino una alternativa más realista que respeta mejor la diversidad histórica y cultural del continente.

¿Qué mensaje les enviaría a los jóvenes, quienes son clave en esta batalla, pero quizás no siempre comprendan su profundidad? ¿Qué diferencias observa entre generaciones?

Es absolutamente esencial conectar con las generaciones más jóvenes y comprender su forma de pensar. Durante décadas, la izquierda ha trabajado con gran eficacia el concepto de hegemonía cultural, y no podemos ignorar esa realidad.

Cuando hablamos de hegemonía cultural, no nos referimos solo a los medios tradicionales —periódicos, revistas o universidades—, sino también a plataformas que influyen directamente en los jóvenes, como el entretenimiento, las series de televisión y las redes sociales. Basta con observar el papel que desempeñan servicios como Netflix o ciertas dinámicas en las redes sociales.

Por eso es crucial que los conservadores se fortalezcan en estos espacios. Si queremos conectar con las generaciones más jóvenes, debemos estar presentes donde consumen cultura, ideas y narrativas.

¿Estamos todavía en una batalla cultural o hemos entrado de lleno en una batalla política?

Nos encontramos en una batalla cultural y política. Incluso añadiría una tercera dimensión: la judicial. No debemos olvidar que muchas decisiones políticas hoy en día se ven bloqueadas por sentencias judiciales, tanto a nivel nacional como europeo.

Pero hay un punto fundamental que no debemos perder de vista: una batalla política sin una batalla cultural previa no se puede ganar. Si no transformamos primero el marco cultural, las victorias políticas serán frágiles o temporales.

Por eso es esencial librar simultáneamente las batallas culturales y políticas.

Para concluir, ¿qué mensaje darías a los jóvenes para animarlos a involucrarse en esta lucha?

Les diría que sean valientes. Que defiendan sus ideas sin vacilar. Y que comprendan que, a veces, no basta con defenderse; también hay que pasar a la ofensiva política.

No podemos pasarnos todo el tiempo justificándonos: «No somos fascistas», «No somos racistas», «No somos homofóbicos». A veces debemos confrontar directamente a la izquierda sobre los mismos temas que considera suyos.

La cultura, por ejemplo, donde el pensamiento de Gramsci sigue siendo central. La naturaleza, contra la falsa afirmación de que el conservadurismo es antiambiental, cuando en realidad existe un auténtico conservadurismo verde. Europa, al distinguir claramente entre Europa y la Unión Europea. O la cuestión de las mujeres: en Italia, tenemos una primera ministra.

Hay muchos ámbitos en los que debemos pasar a la ofensiva, sin disculparnos por ser conservadores. Solo así podremos ganar la batalla por el alma de Europa.

Comparte con tus contactos:

1 comentario en «“Debemos pasar a la ofensiva sin disculparnos por ser conservadores” —Presidente de Nazione Futura, Francesco Giubilei»

Deja un comentario