La abstención del PP permite tramitar en Castilla y León la ley LGTBI impulsada por el PSOE que intensifica el adoctrinamiento a los niños en los colegios
El adoctrinamiento de género avanza sin freno en colegios y empresas gracias a la complicidad entre PP y PSOE. La prueba más reciente: la abstención del Partido Popular ha permitido la tramitación de la ley LGTBI presentada por el PSOE en Castilla y León.
El texto consta de 76 artículos y fue defendido por el procurador socialista Miguel Hernández Alcojor. La propuesta incluye medidas que buscan «incorporar el tratamiento de la diversidad sexual, de género y familiar en todas las etapas educativas», lo que se traduce en un ataque directo a la libertad de enseñanza y a la autoridad de los padres.
Esta ley impone que los colegios —ya sean públicos, concertados o privados— garanticen una “educación para la inclusión y la diversidad”, un eufemismo más para justificar el adoctrinamiento de género desde la infancia.
Decir PP es decir PSOE. Ambos partidos actúan como un solo bloque ideológico, y en lugar de defender la neutralidad de las aulas, las convierten en campos de reeducación ideológica.
El PP financia sindicatos para imponer la ideología de género en las empresas
El adoctrinamiento de género no se limita a las aulas. También se extiende al ámbito laboral con el aval del Partido Popular. El Gobierno de Castilla y León, dirigido por el PP, ha anunciado subvenciones por 983.500 euros a sindicatos y organizaciones empresariales para imponer la ideología de género en las empresas.
La medida publicada en el Boletín Oficial de Castilla y León (BOCYL) contempla fondos para “promover entornos laborales igualitarios y libres de discriminación entre hombres y mujeres”. Bajo esta frase políticamente correcta, se oculta el verdadero objetivo: inyectar ideología de género en las estructuras laborales, sustituir la meritocracia por el activismo, y hacer de cada empresa un nuevo frente de ingeniería social.
Las subvenciones fomentarán proyectos centrados en la prevención de violencia contra la mujer y la cultura empresarial basada en la equidad de género. De nuevo, palabras huecas que sirven de excusa para financiar a sindicatos ideologizados con dinero público.
Una coalición ideológica al servicio de la agenda 2030
La colaboración entre PP y PSOE en Castilla y León demuestra que estamos ante una coalición ideológica, no ante dos partidos opuestos. Bajo distintas siglas, aplican la misma agenda: la agenda 2030, con sus políticas de género, subvenciones millonarias y censura y represión contra quienes defendemos la familia y la vida.
El adoctrinamiento de género no es un error aislado. Es una estrategia premeditada. Utilizan la legislación educativa y las subvenciones laborales como instrumentos para transformar la mentalidad social, debilitando la familia natural y desdibujando la identidad personal.
Lo que vemos en Castilla y León es solo una muestra del verdadero proyecto que PP y PSOE ejecutan en todos los niveles: el sometimiento de la nación a una ideología perversa y aberrante.
