¿Sorprendido por la falta de escrúpulos o la incontinencia verbal de los habitantes del chalet de Galapagar? Pues no. De lo que estoy sorprendido es de las encuestas de intención de voto de esos españoles, seguramente lo son incluso de varias generaciones, que conforman el voto habitual y pronosticable de los podemoguer.
Increíble pero cierto, veo como todos los fines de semana que el voto para Podemos y demás marcas afines, los más, los más de más, o las diferentes marcas blancas del comunismo se mantienen. Y no crean ustedes que están “cocinadas”, es decir enmascaradas de alguna forma por los que las hacen. Puede ser que las del CIS, o alguna otra encargada buscando precisamente oscuras intenciones este algo desviada de la realidad, pero lo cierto es que hay una fuerte base social que los vota, y los va a votar.
Ante mi incapacidad para asumir esos posibles resultados, porque la lógica es mi segunda verdadera fe, tras la cristiana, decido salir a la calle y sondear personalmente esos resultados. Indudablemente es una obra titánica, casi faraónica, pero no persigo obtener esas famosas medias tartas de colores, donde me dan hasta el número de diputados por cada formación. De modo que como no me lo encarga nadie y nadie me lo va a pagar, pues escojo yo cómo, dónde, cuándo y con quién.
De modo que manos a la obra. Me voy al mal llamado “cinturón rojo de Madrid” y me dejo caer por bares, mercados, peluquerías, etc.… Y me llevo una gran sorpresa, no solo en lo que yo andaba buscando, sino en cómo evoluciona el pensamiento en general. Por suerte y aunque eso desvié mi atención, no es quizás el tema de a quién vas a votar en las próximas elecciones, sino diversos aspectos de la situación actual, es de lo que habla la gente, el pueblo, los de a pie.
Y oigo, me meto en las conversaciones y descubro que quizás en vez de preguntar, debo sacar conclusiones de lo que se masca en el ambiente de la calle.
Lo primero es que todo el mundo, y me refiero de momento a los hombres, tienen una pésima impresión, y digo pésima impresión, porque si dijese palabras exactas acabaría en un juzgado por injurias acerca del presidente del desgobierno español. Sin embargo, cuando sondeo el tema de qué pasaría si ahora mismo hubiese elecciones, no saco el mismo resultado. La explicación va desde yo siempre voto socialista, aunque lo hagan mal, hasta los famosos chiringuitos, es decir las subvenciones individuales o colectivas, sobre todo cuando hablamos de jóvenes, de edad cercana a la mediana del país.
Los más jóvenes, son más contestatarios, más de en contra del sistema social-democrático, pero también se encuentran más perdidos, porque a ellos les habían contado el cuento de que la izquierda, los comunistas, la lucha de clases y los sindicatos, y bla, bla, bla, pero hechos son amores y no lindas razones. Se encuentran huérfanos de comunismo, pero tienen miedo de que les llamen fachas, pues en algún aparte todos te comentan algo bueno de VOX. Téngase en cuenta que, aunque todos son muy solidarios, en el fondo son consecuentes con lo de que a los extranjeros les den ayudas que a ellos o sus mayores no les llegan.
Y pasemos a la tercera edad, la de pensionistas y asimilados, que te hablan de muchas cosas, pero que no dejan de pensar en sus pensiones y sobre todo en algunas ventajillas que tienen y que achacan al Gobierno, al cual identifican siempre con la izquierda. Curiosamente, pensionistas que identifican los hospitales con Felipe González, cuando la Red Hospitalaria del INSALUD, los actuales hospitales de las Comunidades Autónomas, se diseñaron en los años setenta, Franco murió en uno de los primeros y si algunos son mucho más recientes es por la secuencia de construcción y los retrasos causados por la financiación de los mismos. Pero los construyó, seguramente en sus ratos libres Felipe González, como la Seguridad Social, una copia de la Fascista Italiana y puesta en marcha en los años cuarenta, por Felipe González, por supuesto.
Podríamos seguir, pero la televisión y digo televisión como única, la que tenía dos canales en 1975 y ahora tiene cientos, distribuidos entre Tve, las autonómicas, las comerciales subvencionadas, etc. siempre arriman el ascua a quien les paga y denigran a quien dice que va a poner orden en el desbarajuste existente. En fin, que a mí no me extraña que el PSOE y Podemos mantengan un poco de equilibrio electoral con la derechita y afines, no así con la mal llamada ultraderecha. Lo cierto es que mientras la propaganda oficial sigue descubriéndonos que la Guardia Civil la fundó Franco, o que la culpa de que España tenga un déficit exterior imposible de pagar y la caja tonta nos aclare que es culpa de la Guerra de Putin y no del robo, saqueo y mala gestión desde el gobierno de Felipe, la gente seguirá votando a quien ya votaba, a quien le paga la pensión o vaya usted a saber. Lo demás es “Facha” como en Italia.
Solo hay una manera de cambiar un poco, que no del todo, el sentido del voto, y es que se cumplan los miedos inventados del Palacio de la Moncloa, eso de que vamos a pasar más hambre y frío que perritos chicos, ahora bien, no basta con los ladrones, estafadores y demás personal… Putin tiene que echar una mano, o si no, esto se mantendrá o quizás cambiemos, como mucho de pastor del rebaño de borregos y entre votos, Indra e incumplimiento del recuento de votos, se ponga a vivir en la Moncloa, el que quiso hacer obligatorio, por sus bemoles en una región, lo que el dictador, que al mismo tiempo nos obligaba, no se atrevió para toda España. Y ahí lo dejo…
 José Antonio Ruiz de la Hermosa es, de primera formación, Sanitario y Capitán retirado de Sanidad Militar. Después, historiador, escritor y divulgador. Actualmente dirige en Decisión Radio varios programas de divulgación histórica y “La Cortina de Humo” sobre la actualidad nacional. |
