El expresidente de EEUU ha anunciado que «está listo para seguir adelante y reconstruir el Partido Republicano».
Donald Trump ha sido absuelto del cargo de «incitación a la insurrección», por la Cámara del Senado. El equipo legal ha desmontado en menos de tres horas la acusación de los demócratas, quienes señalaban al expresidente como culpable del asalto al Capitolio el 6 de enero. Es la segunda vez que se celebra un impeachment contra el republicano. Sin embargo, en esta ocasión, los abogados adelantaban que era un juicio político inconstitucional, debido a que «no se puede destituir de su cargo a un expresidente».
No obstante, los demócratas han seguido adelante. Algunos analistas americanos explicaban que este segundo juicio político, más allá de relacionar a Trump con el asalto al Capitolio, escondía otras razones. Si la Cámara del Senado lo condenaba no podría volver jamás a presentarse como candidato en las elecciones. Parece ser que esta era una de las principales motivaciones del Partido Demócrata para celebrar este segundo impeachment.
Los abogados de Trump lo han desvinculado del asalto al Capitolio y han defendido que el expresidente no tuvo nada que ver con las protestas que terminaron con miles de manifestantes paseando por los despachos de los senadores. Para ello, el equipo legal presentó varios vídeos desmontando los argumentos de los demócratas contra Donald Trump. Y sobre todo ha condenado duramente en la Cámara del Senado «el nivel de corrupción de los demócratas» que, además, «cuentan con la complicidad mediática para falsear los hechos y engañar a los estadounidenses».
Los demócratas se habían pasado más de dos días alegando que Trump había utilizado las expresiones «luchar» y «luchar como el infierno», durante su discurso dirigido a los manifestantes que protestaban por el fraude electoral en Washington DC. Estas expresiones dieron pie a los demócratas para que relacionaran al expresidente con la sublevación que se vio en directo el 6 de enero. Si bien, cabe recordar que los hechos siguen siendo investigados puesto que todavía existen grandes interrogantes, como fue el débil cordón de seguridad ese día, o las imágenes en las que se veía a varios agentes abrir las vallas que cercaban el Capitolio.
Los vídeos de la defensa
Los letrados de Trump, Michael Van Der Ven y David Shoen, continuaban el juicio exhibiendo varios vídeos en los que aparecían los demócratas en infinidad de ocasiones pidiendo a sus seguidores «luchar» y «luchar como el infierno», tal y como hiciera el expresidente republicano. En las secuencias se veía a la vicepresidenta Kamala Harris pronunciando la misma metáfora política en repetidos mítines, llegando a contabilizarse dicha expresión hasta 70 veces.
Sendos letrados explicaron que dichas expresiones son habitualmente utilizadas por los políticos americanos. Para defender este argumento, los juristas tiraron de hemeroteca y emitieron imágenes de los demócratas que habían participado en la acusación del juicio político a Trump. En diferentes discursos y mítines, y dándose un contexto muy similar al del 6 de enero de 2020, los demócratas también pedían a los manifestantes y votantes que «lucharan» y que «lucharan como el infierno».
La exposición pública y retransmitida en directo dejaba bastante en ridículo a los demócratas y se podía notar la incomodidad de algunos de ellos durante el visionado de las pruebas. Una de ellas era la senadora Elizabeth Warren, quien también en el mismo contexto que Trump se dirigía a los manifestantes exigiéndoles «luchar» y «luchar como el infierno».
Seguidamente, los abogados daban paso a otro vídeo en el que los pesos pesados del Partido Demócrata usaban términos violentos y llamaban al levantamiento popular contra Trump. Algunos, incluso, blanqueaban el terrorismo callejero perpetrado por Antifa y Black Lives Matter (BLM), y que devastó e incendió numerosas ciudades en EEUU, sembrando el caos y el pánico. Mientras el expresidente republicano aparecía comentando que su partido representaba «la ley y el orden», durante las violentas manifestaciones de los izquierdistas, Joe Biden transmitía que «la gran mayoría eran protestas pacíficas».
En otro vídeo, Nancy Pelosy se preguntaba públicamente «por qué no había más levantamientos en en todo el país», para después añadir que «probablemente los habrá». Otra demócrata claramente se quejaba de que «se necesitaban más disturbios«, en relación a las revueltas de BLM y Antifa. La defensa de Trump expuso que los demócratas sí que son culpables de usar una retórica basada en la instigación del odio y no su cliente.
Otra de las protagonistas de las escenas visualizadas por lo senadores era Maxine Waters, congresista demócrata por California. La política no se cortó en pedir en un mitin empujar a la policía y hacerles ver que «no son bienvenidos». Tras esta escena, nuevamente, Joe Biden salía en la emisión avisando de que si Trump hubiera estado en su escuela de secundaria, «lo llevaría detrás del gimnasio y le daría una paliza«. En este sentido, el senador demócrata Jon Tester también advirtió en un programa de televisión de que había que «golpear en la cara» al expresidente de EEUU. Otro de los congresistas comentaba en la cadena NBC que tenía deseos de «meterle un puñetazo en la cara» a Trump.
Por último, el remate final lo dio el abogado defensor Van Der Veen. El letrado criticó duramente a los demócratas por haber falseado pruebas incluidas en el juicio político con el fin de inculpar al expresidente. De este modo, el jurista enseñó varios tuits y vídeos que habían sido editados y manipulados para convertir las evidencias exculpatorias en pruebas incriminatorias contra Trump. «Esto es muy grave», manifestó el letrado muy enfadado. «En Filadelfia, de donde vengo, si te pillan manipulando las pruebas, tu caso finaliza. Y eso es lo que ha pasado. Los hemos pillado y este caso se debería terminar ya», señaló Van Der Veen.
A continuación, se proyectó una de las piezas claves del juicio político. En las imágenes se vio cómo los demócratas habían eliminado a conciencia las palabras «patriota y pacíficamente», del discurso de Trump el 6 de enero. En la secuencia real se comprobó que el expresidente nunca había alentado a la violencia ni a la destrucción del Capitolio, tal y como aseguraban los demócratas.
«Este juicio político no es más que la venganza contra un hombre basada en el odio y nada más. Es intolerable. Han distorsionado pruebas y han mentido», concluyeron los abogados de Trump.
Finalmente 47 senadores demócratas y 7 republicanos votaron a favor de condenar a Trump. Por el contrario, 43 senadores republicanos votaron por su absolución. Para la condena se requiere una mayoría de 67 votos.
Posteriormente, el abogado Van Der Veen, que había criticado también la labor de los medios de comunicación y su implicación en la manipulación de pruebas, fue entrevistado en directo por una periodista de la cadena CBS. El letrado terminó discutiendo con la presentadora y la entrevista terminó por hacerse viral en las redes sociales. «Lo ocurrido en el 6 de enero en el Capitolio fue desastroso, pero lo que pasó en este Capitolio durante este juicio no lo fue menos. La acusación manipuló evidencias, no investigó nada, y cuando estuvieron frente a la Corte, que es el Senado, como no habían investigado nada manipuló la evidencia, algo que es increíble. Cuando lo descubrimos y lo probamos quedaron expuestos. Los ciudadanos no deberían aguantar esto. Tienen que saber quiénes llevaron a cabo esto». Y agregaba, «los medios deberían empezar a contar las cosas como son. Están dividiendo el país. Están sedientos de sangre. No puedo creer que me pregunte eso, como si estuviera bien falsear un poco una prueba», respondía Van Der Veen a una pregunta en la que la periodista sugería que uno de los tuits presentados, y que habían sido modificados intencionalmente, no era una prueba tan sólida. «Los medios tienen que ir tras la verdad», terminó diciendo el abogado que concluyó arrojando el micrófono al suelo.
Trump, «listo para seguir adelante»
Después de conocer su absolución, Trump realizó una declaración en la que lamentó que los demócratas «tengan vía libre para denigrar el estado de derecho, difamar a la aplicación de la ley, animar a las multitudes, excusar a los alborotadores y transformar la justicia en una herramienta de venganza política». Además, insistió en que él «siempre ha defendido y defenderá el imperio de la ley inquebrantable y a los héroes que la aplican».
De este modo, el expresidente aprovechó para anunciar su regreso y comunicar que está listo para seguir adelante y reconstruir el Partido Republicano. «Está emocionado por el 2022», adelantó el senador Lindsay Graham en la cadena Fox News.
(Elena Berberana. Libertad Digital)