Transición ecológica | Jacinto Seara

Existe un ministerio para cumplir lo mandado en la Agenda 2030-50, y una de las últimas acciones realizadas es donar 150 millones de los fondos Next Generation. Así empieza a cumplir lo que el comunicado de prensa del Intergovernmental Panel on Climate Change-Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de junio de 2023, dice: “El acceso a las energías y las tecnologías limpias mejora la salud, especialmente en el caso de las mujeres y los niños; la electrificación con bajas emisiones de carbono, los desplazamientos a pie y en bicicleta y el transporte público mejoran la calidad del aire, la salud y las oportunidades de empleo, a la vez que fomentan la equidad. Los beneficios económicos para la salud humana derivados solo de la mejora de la calidad del aire serían aproximadamente iguales, o quizás incluso superiores, a los costos que implican reducir o evitar las emisiones”. Leámoslo bien, están eliminando los transportes individuales de motor clásicos. Es lo más llamativo, de hecho, están recortando nuestra libertad. Realmente es lo que pretenden con todas esas acciones, muy bien redactadas y explicadas. Hay que reconocer que en una parte incluye el tratamiento de residuos orgánicos que, bien tratados en centrales específicas, sustituyen a los combustibles fósiles.

 Las primas al régimen especial se disparan. Lo donado a las renovables ya ha sido de 85.000 millones… y costarán 115.000 millones más. Como vemos, las cuentas se han quedado cortas. Hemos sufrido precios de energía eléctrica nunca vistos. Seguimos con unos precios por encima de lo normal y de lo que realmente sería posible en España. La reducción de costes la pagamos por otro lado. Las hidroeléctricas reciben retribución a la inversión y también a la operación, con lo que pueden cubrir los mayores costes de las instalaciones de producción. Así es posible tener beneficios por las energías renovables, cogeneración de alta eficiencia y centrales de residuos y ser competitivas con el resto de las tecnologías.

Curiosamente se produce unos resultados muy positivos de decenas de euros en las empresas hidroeléctricas, y al mismo tiempo se quejan de que necesitan más ayudas del Estado para cubrir los costos de instalación de las energías de producción eléctrica renovables.

Jacinto Seara | Científico y Escritor