Sánchez iniciará su campaña de acoso y censura contra los medios después de verano tras las elecciones europeas

Pedro Sánchez, ha asegurado que su «única autocrítica es no haber actuado antes ante el problema de los digitales y las webs». De esta forma, horas después de concluir su paripé con el amago de dimisión, Pedro Sánchez ha dejado la puerta abierta a cerrar e ilegalizar medios de comunicación críticos con el Gobierno. Al más puro dictador bolivariano.

Pedro Sánchez no contento con eso, concedió el martes su segunda entrevista, en este caso en la Cadena Ser, después de su pantomima del lunes. En la entrevista con Àngels Barceló en el programa ‘Hoy por hoy’, además de hablar sobre la posibilidad de presentarse como candidato de cara a las siguientes elecciones, Sánchez tuvo palabras sobre medios de comunicación y lo que él llama “la máquina del fango”.

Ir contra los medios de comunicación críticos y la libertad de expresión

Sánchez tiene claro que estos medios independientes son los únicos que no controla, y en su hoja de ruta para dar un golpe de estado no puede permitirse un mínimo de crítica o disidencia. Sánchez es consciente que lo que hoy es pequeño mañana puede crecer hasta convertirse en un verdadero obstáculo. Por eso los quiere eliminar. Y para ello apuntó directamente a los que denominó “pseudomedios”.

Estas fueron sus palabras: “Estos medios digitales, o páginas web… ¿Sabemos quién las financia? ¿Tienen transparencia? Son preguntas muy importantes de responder. He tomado la decisión de liderar este debate, pero no monopolizarlo, porque no voy a poder sólo desde el poder Ejecutivo. Estoy decidido a abordar esta tarea”. En definitiva, al más puro estilo comunista dictatorial, no admite la libertad de expresión y va a liderar la censura y represión contra dichos medios. Es lo más grave que se ha oído nunca, porque vienen directamente de la boca de un presidente de gobierno.

¿Para cuándo?

Y aquí no es determinar si Sánchez va a cumplir su amenaza o si fue, por el contrario, un farol. Eso no es la cuestión. La pregunta es cuándo la va a realizar. Y Sánchez va a trabajar en paralelo: por una parte, ahora hay dos elecciones seguidas -elecciones al Parlamento de Cataluña del 12 de mayo y al Parlamento Europeo del 9 de junio- y luego viene el verano. Por ello, no habrá novedades hasta después de las elecciones, y partir de entonces algún pleno del Congreso de los Diputados ya sí podría acoger un debate sobre este tema e ir calentando el ambiente.

Será, por tanto, después del verano. Pero mientras, planificarán las nuevas medidas reguladoras coercitivas y de represión sobre lo que publican – y lo que puedan publicar- los medios de comunicación. Serán medidas, medidas, acordados con sus socios comunistas y separatistas

“El fango o yo”, el lema del dictador Sánchez

La estrategia de Pedro Sánchez pasa en estos momentos por mimetizar su persona con democracia. Que una cosa sea la otra, convirtiendo su causa en la de todos. “Nuestro país necesita hacer una reflexión colectiva que abra paso a la limpieza, a la regeneración, al juego limpio. Llevamos demasiado tiempo dejando que el fango colonice impunemente la vida política, la vida pública, contaminándonos de prácticas tóxicas inimaginables hace sólo unos años”, afirmó este lunes.

Con esta estrategia, Sánchez, a más estilo del dictador venezolano, busca aglutinar en torno a él todo el voto «democrático» para las próximas elecciones catalanas y europeas bajo el lema: “O el fango o yo”. Su permanencia en la presidencia del Gobierno, aseguran, anticipa una ofensiva que abra paso a la limpieza. “Venimos a limpiar”, va a insistir.

Fuente. El Confidencial Digital