Los ‘poderosos’ del Club Bilderberg le han quitado su apoyo a Sánchez, el títere de Soros

El presidente, al igual que el resto de participantes españoles, recibió ya en marzo la invitación a asistir al encuentro de líderes mundiales por parte de la presidenta del Santander, Ana Botín, quien actúa como delegada de Bilderberg en España.

Sin embargo, Pedro Sánchez no asistirá al cónclave del llamado “Gobierno del mundo en la sombra”. Quería solo asistir parcialmente para hacerse una foto. Una asistencia a la carta

La organización no permite esa ‘asistencia a la carta’. Se explica, que, una vez reunido el Club Bilderberg, en esos cuatro días no es posible salir del hotel. Aceptar la invitación implica un compromiso de asistir, no comentar las deliberaciones, y participar en todas las sesiones que se desarrollan entre el jueves y el domingo. Es decir, secreto absoluto.

También se exige acudir sin acompañante: la invitación es únicamente para esa persona. Dentro del hotel donde se realiza la reunión no se puede ir con escolta.

No se puede tampoco llegar en un coche propio. Se ha de utilizar un vehículo proporcionado por la organización, que se distingue por tener una “B” en la luna delantera.

¿Por qué Sánchez huye de los ‘poderosos’ de Bilderberg?

Sin embargo, Pedro Sánchez ha huido por segunda vez de reunirse con los ‘poderosos’ del Club Bilderberg. Ya en el año 2015, solo unos meses después de ser elegido secretario general del PSOE, se le citó como uno de los integrantes de la delegación española que participaría en esa edición.

Desde otros ámbitos del PSOE se defiende que otros miembros del partido si han asistido al Club Bilderberg. Se citan los casos de Felipe González, Javier Solana, Joaquín Almunia y José Luis Rodríguez Zapatero.

En sus 70 ediciones, esta es la tercera ocasión que se celebra en España, después de que en 1989 se diera cita en el Balneario Isla de La Toja (Pontevedra) y en 2010 en el Hotel Dolce de Sitges (Barcelona). En ambas ocasiones, acudieron como anfitriones los entonces presidentes del Gobierno, Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, los dos socialistas.

Pero en ninguna de ambas ocasiones que se le ha invitado Pedro Sánchez ha asistido. ¿Por qué?

Enfrentamiento entre poderes globales: Soros vs Club Bilderberg

La excusa oficial desde dentro del PSOE es que Pedro Sánchez ha rechazado participar en el Club Bilderberg “exclusivamente por cálculo político”. Pero eso es una simple excusa. Hay una verdadera razón que se oculta.

Según señalan expertos, ahora se está produciendo un enfrentamiento entre globalistas, encabezado por una parte por George Soros, marxista radical, y los globalistas del Club Bilderberg, capitalismo judío.

Y en este contexto, Sánchez es el títere de Soros en España, y actúa como tal. Veamos varios detalles que explican muchos de los actos de Sánchez en la actualidad.

En primer lugar, recuérdese que la primera persona con la que se reunió Sánchez nada más salir elegido presidente del gobierno fue con Soros. Ahora aprovecha cualquier evento internacional para verse con su hijo, el sucesor de George Soros.

Por otra parte, Pedro Sánchez está enfrentado en la actualidad con los representantes del Bilderberg en España. Así, cada vez es más evidente el distanciamiento, casi ruptura, con la presidenta del Banco Santander, Ana Botín, actual delegada de Bilderberg en España, así como con Juan Luis Cebrián, ex presidente ejecutivo de Prisa, y exdelegado de Bilderberg.

Asimismo, el reconocimiento del estado de Palestina este pasado 28 de mayo, así como los ataques continuos a Israel, siguen los intereses de Soros con respecto a los globalistas judíos.

El club Bilderberg va a dejar caer a Sánchez

El rechazo de Sánchez a asistir a la reunión de Bilderberg hay que considerarlo como un punto sin retorno en el enfrentamiento entre ambos grupos globalistas. Se le estaba dando a Sánchez la posibilidad de negociar durante cuatro días una salida pactada.

Pero Sánchez no ha querido y se ha agarrado como un clavo ardiendo a Soros como si fuera su tabla de salvación. Sabe que es con Soros o nada.

Enfrente los globalistas del Club Bilderberg no se han quedado quietos, Los últimos escándalos que han ido surgiendo en los medios de comunicación sobre la posible corrupción de su esposa Begoña Gómez y que le afectarían también a Sánchez no han dejado de aumentar.

Ya no es una guerra local sino entre poderes globales. En esta guerra, siempre pueden coger a chivos expiatorios en un momento dado, pero la guerra es otra.