Un nuevo informe reconoce el inmenso daño causado en “casi todos los ámbitos de la vida pública” por la medida radical del confinamiento.
El primer informe oficial de la investigación sobre la COVID-19 en el Reino Unido (que ha costado al contribuyente británico al menos 300.000 libras esterlinas (355.000 euros) al día durante el último año) contiene una serie de conclusiones previsibles . En concreto, que la planificación de la pandemia en el Reino Unido estuvo plagada de “fallas estratégicas fatales”.
Muy crítico con la política de confinamiento
Pero, de manera bastante inesperada , también es muy crítico de la política de confinamiento del país durante meses seguidos (o, de hecho, de ninguna medida).
La investigación, presidida por la baronesa Hallett, afirma que «la imposición de un confinamiento… debería ser una medida de último recurso«. Aún más extraordinario, acepta que, «Hay quienes sostienen que nunca se debería imponer un confinamiento«.
En su introducción al primer informe de la investigación, que trata sobre “la resiliencia y la preparación del Reino Unido”, la baronesa Hallett también ofrece una reflexión franca sobre los costos del confinamiento:
La vida en el Reino Unido se vio gravemente afectada, ya que la mayoría de sus ciudadanos se quedaron confinados en sus casas. Casi todos los ámbitos de la vida pública en los cuatro países se vieron gravemente afectados. Los sectores de la hostelería, el comercio minorista, los viajes y el turismo, las artes y la cultura, y el deporte y el ocio dejaron de funcionar. Incluso los lugares de culto cerraron.
Los niveles de enfermedades mentales, soledad, privaciones y exposición a la violencia en el hogar aumentaron drásticamente. Los niños perdieron oportunidades de aprendizaje académico y de un desarrollo social valioso.
Reacciones
En respuesta al documento de UnHerd, Toby Green escribió que si bien “el informe completo de la baronesa Hallett contiene críticas notables a la política de confinamiento preferida por el gobierno, que también fue adoptada en todo el mundo”, las “reacciones iniciales de los medios apenas tienen nada que decir sobre las conclusiones del informe sobre los confinamientos”.
Green agregó que, independientemente de su cobertura, la «verdadera historia del informe de Hallett no es que el Reino Unido estuviera preparado para la ‘pandemia equivocada’, sino que recurrió a una política hasta entonces inimaginable [el confinamiento], sin base empírica y en la que no se evaluaron plenamente los riesgos».
Will Jones, editor del Daily Sceptic está de acuerdo en que quienes critican la política de confinamiento “deberían estar agradecidos de que exista algún sentido de ese [escepticismo sobre el confinamiento], dado cómo fueron las audiencias [para la investigación]”.
Se espera que la investigación elabore al menos ocho informes más.
Michael Curzon | The European Conservative
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