Nuevo ridículo internacional del Gobierno de Pedro Sánchez. La segunda ola de contagios del coronavirus ha provocado que el gobierno británico saque a España de la lista de países seguros, según el gobierno de Escocia.
Tal es la confianza que despierta el Gobierno socialcomunista que solo meses atrás se permitía a través de su ministro de Consumo, Alberto Garzón, decir que el turismo es «precario, estacional y con bajo valor añadido».
La ministra de Exteriores, Arancha González Laya, ha salido a responder a la decisión de Londres de imponer una cuarentena a toda persona que llegue al país desde territorio español
«España es un país seguro, como cualquier otro país alrededor del mundo, ha sabido controlar la expansión del COVID. Estamos trabajando para aislar nuevos casos tan pronto como aparezcan y rastrear sus contactos, y a ellos los separamos para que el resto del país pueda seguir con sus vidas y la economía y el turismo puedan avanzar», dijo Laya en respuesta a la medida de tomada por el Gobierno británico.
La decisión del Reino Unido de establecer desde este sábado un periodo de cuarentena para todas las personas que viajen desde España ha derribado las últimas esperanzas de salvar, al menos, una parte del verano.
Normal que nadie se fía cuando es más que evidente que el Gobierno no tenía preparada una estrategia contundente, tomando medidas por su cuenta, como por ejemplo, ofrecer gratuitamente test a los viajeros que lo soliciten cuando abandonen España, lo que haría innecesaria la cuarentena, como recuerda ABC en su editorial.
«En lugar de ello, toda la gestión se ha dejado en manos de la pusilánime ministra de Asuntos Exteriores, que después de su papelón en el caso de Gibraltar, ahora conoce en carne propia cómo responden de verdad los británicos a sus concesiones. La idea de mantener unos corredores seguros con las islas debería ser, al menos, un objetivo prioritario en estas circunstancias extremas».
