Primero los perros, luego los humanos | Jeffrey A. Tucker

Por supuesto, la idea es intensificar esto con el tiempo a medida que la oposición se debilita, aumenta el cumplimiento y la idea de los chips de computadora debajo de la piel de todas las mascotas se normaliza. ¿Ha oído hablar del transhumanismo, que es la integración de humanos con máquinas en un solo organismo? Esto es transanimalismo, y la implantación de chips en las mascotas es un gran paso en esa dirección.

Después de todo, no hay nada en particular en el chip que ofrezca algo único que una etiqueta no pueda ofrecer. El propósito no es permitir encontrar a su mascota si se escapa. El chip no tiene un rastreador GPS. Si lo desea, hay formas muy fáciles de conseguirlo con un Airtag o algún otro dispositivo de rastreo. El chip solo ayuda a encontrar a la mascota si se lleva al perro al veterinario, se escanea y aparece el número de teléfono del dueño. Parece mucho más fácil simplemente ponerle una etiqueta al perro para obtener ese resultado.

Dicen que una placa se puede cambiar, al igual que un chip. Es más complicado, pero al menos una placa tiene la ventaja de ser más humana y segura. Hay casos de envenenamiento por la implantación de un chip en los perros, son raros, pero existen. Una simple placa no tiene nada de invasivo, pero no refleja el tecnoutopismo de la práctica de implantar un chip en las mascotas.

Estaba hablando con algunos expertos serios en enfermedades infecciosas y vacunación. Nunca habían oído hablar de esta regla ni de esta práctica. Mi fuerte impresión es que la mayoría de la gente nunca ha oído hablar de esta práctica, aunque los nuevos dueños de perros se enfrentarán a la presión de muchos veterinarios, sin duda. De hecho, la presión comienza desde la primera visita. Proponen una vacuna tras otra, pero aclaran a regañadientes que todas, excepto la de la rabia, son opcionales. Una vez que el ciclo comienza, no se detiene y el chip se convierte en la opción recomendada para mantenerse al día.

De hecho, todos los países de la Unión Europea ya han implementado la obligación de implantar un chip en los perros. El Reino Unido también lo hace. No tengo información de primera mano, por lo que supongo que la aplicación y el cumplimiento de la normativa son irregulares, pero si recurres al veterinario, te encontrarás con una presión directa. El médico fingirá estar sorprendido al descubrir que tu mascota aún no tiene un chip e insistirá en que se lo pongan de inmediato. Esto también significa que se implantará un chip a todas las mascotas nuevas.

El chip en sí es del tamaño de un grano de arroz. Puede perderse en el interior y también puede ser expulsado con el tiempo. También puede dejar de funcionar. La tecnología, en otras palabras, no es infalible y todavía es experimental, pero eso no detiene a los entusiastas y a los mandantes.

La lógica se remonta a la nueva afirmación que se encuentra en los círculos epidemiológicos y vacunológicos. La idea es que las enfermedades de “expansión” están aumentando de alguna manera; es decir, hay una creciente propensión de enfermedades a pasar de los animales a los humanos. Todavía no he encontrado ninguna evidencia incontrovertible de esta afirmación, pero se hace con frecuencia en la literatura. De hecho, cuando estalló el gran debate sobre el origen del SARS-CoV-2, los partidarios de la idea del origen natural se enfurecieron especialmente al afirmar que la COVID-19 era un caso exactamente de esto.

El debate sobre la gripe aviar está, de hecho, ligado a esta afirmación de que se está extendiendo cada vez más. Quienes quieren utilizar la gripe aviar para otro ensayo de la plataforma de ARNm tienen grandes esperanzas de que esto sea exactamente así. Por eso, el Departamento de Salud y Servicios Humanos ha emitido un aviso de la Ley PREP para la gripe aviar, que activa una Autorización de Uso de Emergencia y, por lo tanto, la indemnización de una vacuna contra la gripe aviar.

Durante el lanzamiento de la vacuna contra la COVID-19, algunas ciudades importantes experimentaron con pasaportes de vacunación. La ciudad de Nueva York intentó segregar a toda la ciudad de los no vacunados entre el 18 de septiembre de 2021 y el 7 de marzo de 2022, utilizando una aplicación llamada Key to NYC. La ciudad gastó 100 millones de dólares en desarrollarla, pero no funcionó. Se estropeaba constantemente y nunca fue capaz de integrar las vacunaciones de fuera del estado. Fue un fracaso. Pero, en ese momento, otras ciudades pensaron que esto era el futuro y lo copiaron. Boston, Nueva Orleans y Chicago cerraron para que los no vacunados no pudieran ir a bibliotecas, bares, restaurantes, museos o teatros.

Europa y Canadá hicieron lo mismo. Australia sigue intentando que la gente vincule su historial médico con su tarjeta de vacunación digital en el teléfono. No es ni un poco exagerado sugerir que el objetivo real es implantar un chip en toda la población con controles gestionados por una aplicación cuyos datos se comparten con las agencias gubernamentales. La implantación de esta tecnología en perros forma parte de la implementación, un método para que la población se acostumbre a la vigilancia sanitaria digital mediante chips subcutáneos. Necesitan que se normalice para que la gente acepte.

Siempre se avanza paso a paso. Lo que comienza con los animales se pretende que llegue a los humanos. En este momento, la gente se ha vuelto extremadamente resistente a las órdenes de vacunación e incluso a las vacunas más recientes que prometen el paraíso pero provocan miocarditis. Este es un problema importante para la industria que esperan que la próxima pandemia pueda rectificar, por eso estamos escuchando tanto sobre la gripe aviar estos días.

La mayoría de la gente no sabe nada sobre esta nueva tendencia y probablemente se sorprendan al saber que está ocurriendo. Pero, ¿qué se supone que debe hacer la persona promedio? Los mandatos no suelen venir de las legislaturas, sino de las burocracias, que implementan las reglas como si tuvieran un poder ilimitado para hacer lo que quieran. Si pueden salirse con la suya con los perros y los gatos, las personas serán las siguientes en la lista. De hecho, esa es la cuestión.