El PP de Castilla y León, presidido por Alfonso Fernández Mañueco, ha aprobado una partida de 5,25 millones de euros para regularizar inmigrantes ilegales y reforzar la «inclusión laboral». Esta ayuda, pactada con UGT, CCOO y la CEOE, canaliza fondos públicos a través del programa INI, que pretende legalizar a extranjeros en situación irregular. El PP financia la inmigración ilegal a través de subvenciones se convierte en una realidad inaceptable para muchos ciudadanos que defienden el orden, la legalidad y el interés nacional.
Esto resume con precisión una política que premia la entrada ilegal al país y promueve el uso de recursos públicos en beneficio de quienes han violado nuestras leyes migratorias. La izquierda aplaude; la derecha pacta. Y el pueblo paga.
Partidas millonarias para legalizar ilegales
El documento firmado por la Junta contempla ayudas concretas: 639.000 euros a UGT, 416.666,67 a CCOO y 216.666,67 a la CEOE. Todas destinadas a «facilitar la regularización administrativa» de inmigrantes ilegales, asistir en la homologación de títulos y proporcionar asesoría jurídica.
¿Dónde queda la seguridad jurídica? ¿Dónde el cumplimiento de la ley? El PP, que debería representar el orden y la autoridad, cede al chantaje ideológico de la izquierda y consagra su complicidad. El mensaje es claro: entrar ilegalmente en España tiene premio.
Más ayudas para la casta sindical
Pero el escándalo no termina ahí. Además de financiar la inmigración ilegal, el PP riega de dinero público a los sindicatos y a la patronal con subvenciones millonarias. En noviembre del año pasado, el Ejecutivo de Mañueco concedió 3.959.860 euros: 1,48 millones a la CEOE, y 1,23 millones a UGT y CCOO cada uno. ¿El objetivo? Cubrir gastos de personal, formación, asesoría y otros lujos de la maquinaria sindical.
En junio, esta ayuda se reeditó con una nueva inyección de dos millones de euros. Un mes antes, el PP autorizó subvenciones por 1,2 millones para promover el IV Acuerdo Marco de Competitividad: 600.000 euros para la CEOE, y 300.000 euros para cada uno de los sindicatos. El PP inmigración ilegal subvenciones es parte de una red más amplia de financiación a las élites que parasitan al contribuyente.
Dinero para los de siempre, recortes para el pueblo
Mientras se financia la regularización de ilegales y se paga la fiesta sindical, el PP recorta fondos destinados a empresas en crisis y medidas reales de bienestar laboral. La Junta retirará créditos que podrían aliviar a autónomos y pequeños empresarios para dárselos a UGT, CCOO y la CEOE. La traición es doble: a los trabajadores y a los votantes.
Refleja, además, un patrón político donde el interés electoral y la presión ideológica priman sobre el sentido común y la justicia social. Lo que debería ser política de Estado se convierte en un negocio de subvenciones.
La derecha cobarde y la izquierda satisfecha
El PP de Mañueco no es oposición al globalismo ni alternativa al sanchismo. Es su cómplice útil. Subvenciona las mismas estructuras que destruyen nuestras fronteras, identidad y prosperidad. UGT y CCOO, pilares del socialismo y comunismo respectivamente, reciben millones del PP, mientras este presume de firmeza ideológica.
Un PP que financia el desastre
El PP financia la inmigración ilegal a través de subvenciones no es un titular: es una verdad escandalosa que refleja la bancarrota moral del partido que debería defender el Estado de Derecho. Mientras UGT, CCOO y la CEOE se enriquecen, los ciudadanos honestos soportan la presión fiscal y la inseguridad creciente.
