“No comamos insectos”: cómo recuperar el control sobre el sistema alimentario

El evento “ El ataque a los alimentos y a los agricultores y cómo contraatacar ” reunió a médicos, periodistas, científicos, investigadores, agricultores, agentes sociales y políticos de todo el mundo para analizar lo que está sucediendo con el sistema alimentario mundial y describir las estrategias que los agricultores, los responsables políticos y los consumidores están utilizando para devolver el control del sistema alimentario a la gente.

Más de 40 oradores participaron en el simposio

Catherine Austin Fitts del Informe Solari y el autor Patrick Wood dieron inicio al mismo, describiendo cómo los esfuerzos a largo plazo de las élites tecnocráticas para controlar el sistema alimentario están vinculados a una estrategia para concentrar el control sobre el sistema financiero, y cómo los agricultores se están resistiendo .

Los oradores analizaron cómo el glifosato y otros pesticidas , los organismos genéticamente modificados (OGM), las vacunas, las nuevas formas de ingeniería genética y la concentración de tierras —junto con las leyes estatales que dificultan a los agricultores llevar sus alimentos a los mercados, políticas nacionales como la ley agrícola y políticas internacionales como One Health— constituyen en conjunto un ataque global a la alimentación y la agricultura.

“Es muy importante entender que estamos luchando, no sólo por nuestra libertad”, dijo Fitts, “sino que estamos luchando para asegurarnos de que no seamos víctimas de la hambruna, ya sea porque no podremos conseguir comida o porque podremos conseguir comida que no vale la pena comer”.

Los oradores también abordaron cómo “contraatacar”, señalando las revueltas de agricultores en toda Europa, las estrategias de agricultura regenerativa cultivadas por agricultores de todo el mundo y las formas en que los consumidores generan cambios todos los días si “compran alimentos, en efectivo, directamente a los agricultores locales”.

André Leu, director internacional de Regeneration International, abordó cómo se está envenenando el suministro de alimentos y sus implicaciones para la salud humana. Detalló la devastación causada al medio ambiente, los alimentos y la salud por décadas de un sistema agrícola industrial que continúa expulsando a millones de pequeños agricultores de la agricultura cada año, y cómo los agricultores orgánicos regenerativos agroecológicos se están conectando a través de Regeneration International .

Los impactos del glifosato , los OGM y la edición genética

Zen Honeycutt, de Moms Across America, el abogado Michael Baum y los investigadores Don Huber, Ph.D., Stephanie Seneff, Ph.D., y el autor Jeffrey Smith dieron presentaciones sobre los impactos del glifosato , los OGM y la edición genética . Hablaron sobre cómo las campañas de concientización, las demandas y la promoción de políticas han sido efectivas en la lucha para sacarlos del sistema alimentario.

Honeycutt, cuya organización ha estado probando productos para detectar glifosato desde 2013, dijo que el químico peligroso se ha vuelto omnipresente: “Casi todo lo probado ha presentado niveles preocupantes de glifosato”, desde alimentos hasta esperma y vacunas. “Esta contaminación generalizada por glifosato ocurre prácticamente en todas las comidas si no se come comida orgánica… es una crisis nacional”, añadió. El producto químico se ha utilizado popularmente sólo desde mediados de los años 90 en Estados Unidos.

La guerra contra el ganado, la carne y la leche 

Entre los oradores, la agricultora regenerativa Breeauna Sagdal , los abogados John Klar y Pete Kennedy y el fundador de Alliance for Natural Health International, Robert Verkerk, Ph.D., se habló de la guerra contra el ganado, la carne y la leche cruda . Y el Dr. Brian Hooker de CHD habló sobre la gripe aviar , incluido el modo en que se han realizado pruebas masivas para sacrificar bandadas de pollos y ganado.

En una demanda sobre la leche cruda —que cuestiona las restricciones a los productos lácteos no pasteurizados, el único alimento prohibido en el comercio interestatal— Kennedy dijo que la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) “puso sus opiniones sobre la libertad alimentaria en el registro público”. “La FDA declaró que no existían derechos fundamentales a consumir los alimentos que uno elija, a alimentar a sus hijos con los alimentos que uno elija, y que no existía ningún derecho fundamental a la autonomía corporal”.

John Moody explicó cómo los insumos agrícolas han hecho que los alimentos actuales sean menos nutritivos. La Dra. Sherry Tenpenny habló sobre las vacunas que se aplican a los animales que comemos . Elze van Hamelen hizo una presentación sobre lo que llamó “ alimentos farmacéuticos ” o carne cultivada en laboratorio , detallando el proceso de producción y los muchos peligros conocidos y potenciales que surgen de los laboratorios biotecnológicos que elaboran la “carne”.

Tenpenny ofreció una descripción general de los cientos de vacunas aprobadas en los EE. UU. para el ganado, los pollos, los cerdos y los mariscos . El debate reciente sobre las vacunas para animales se ha centrado en la vacuna de ARNm , que está aprobada para los cerdos. Tenpenny dijo: «Necesitamos saber más sobre lo que se ha inyectado en nuestros alimentos durante mucho tiempo».

Varios oradores hablaron sobre la dinámica económica cambiante y las nuevas normas que están obstaculizando y eliminando las tierras agrícolas. Brook DeLorme explicó cómo las líneas de transmisión y los paneles solares están destruyendo las tierras agrícolas.

El programa 30 by 30 de EE. UU.

Margaret Byfield, directora ejecutiva de American Stewards of Liberty , presentó una descripción general del programa 30 by 30 de EE. UU. , una iniciativa federal establecida por una orden ejecutiva de la administración Biden que promete proteger el 30% de la tierra y el agua para 2030 poniéndola bajo control federal. Esa «protección», dijo, pretende que la tierra tenga un uso muy restringido. Impediría que los agricultores utilicen la tierra y requeriría la adquisición de 300 millones de acres por parte del gobierno federal.

“No se trata de conservación”, dijo Byfield, “se trata de control”. Agregó que el programa está vinculado a un plan de empresas como Intrinsic Exchange Group para monetizar y comerciar con la tierra, pero también con procesos naturales como la fotosíntesis y la polinización, una agenda impulsada por organizaciones como la Fundación Rockefeller, el Fondo Mundial para la Naturaleza y la Casa Blanca .

No coman insectos

El periodista James Corbett inauguró la segunda parte del simposio, ofreciendo estrategias que las personas pueden usar a diario para negarse a participar en este sistema tóxico : «No coman insectos», dijo, refiriéndose a la agenda del Foro Económico Mundial de alimentar a las personas con alimentos a base de insectos .

También sugirió boicotear los alimentos ultraprocesados , los transgénicos y otros productos que contienen toxinas, y en su lugar apoyar alternativas comprándoles a agricultores locales, uniendo recursos, trabajando junto con otros y manteniéndose informados.

Corbett dijo que las personas pueden hacer estos cambios gradualmente. “Lo que estoy sugiriendo hoy es que no tiene que ser un cambio de golpe, de un 100% o nada… No, podría ser un proceso gradual de descubrir algo nuevo en tu área, cambiando algo del supermercado por algo que puedas conseguir en algún mercado de agricultores local”.

Varios oradores, entre ellos el Dr. John Day , la herbolaria Sara Woods Kender , Joel Salatin y Leigh Merinoff compartieron estrategias cotidianas para la agricultura, la compra de alimentos, la preparación de alimentos, la vida fuera de la red y la educación de los jóvenes a través de las cuales las personas pueden aumentar su salud y seguridad alimentaria y para que la agricultura pueda ser restaurada, como lo expresó el agricultor Mark Fulford, de un «proceso extractivo» a una «práctica creativa».

Por ejemplo, Judith MgGeary habló sobre cómo ella y otros trabajaron para bloquear con éxito el etiquetado electrónico del ganado que habría obligado a etiquetar a todos los animales de granja, aumentando los costos para los pequeños agricultores y permitiendo la vigilancia de todas las transacciones agrícolas relacionadas con los animales, concentrando las ganancias de las grandes empresas agrícolas.

Ahora, dijo, el USDA ha iniciado un proyecto para exigir el uso de etiquetas electrónicas para el ganado y los bisontes que cruzan las fronteras estatales y, si no se detiene, seguirá ampliándose para vigilar a todos los animales desde el nacimiento hasta la muerte. «Este programa y la forma en que promueve las grandes empresas agrícolas es malo para todos, excepto para las ganancias corporativas», dijo.

Los oradores Mark McAfee, la Dra. Michelle Perro y Meleni Aldridge cerraron las sesiones de oradores discutiendo cómo curarse con alimentos saludables.

Conclusiones finales: La libertad alimentaria es necesaria para todas las libertades

Resumiendo las conclusiones principales, Fitts citó a Klar, diciendo que “la libertad alimentaria es necesaria para toda libertad”, porque la alimentación está vinculada a muchas libertades claves. También dijo que los consumidores pueden proteger su propia salud y mover los mercados. “Tenemos que tomar medidas”, dijo.

“Hemos aprendido que tenemos opciones sobre nuestros alimentos”, agregó Klar, señalando las diferentes propuestas para cultivar alimentos, fortalecer los vínculos entre agricultores y consumidores y aumentar la defensa de sus derechos.

«Somos fuertes juntos», dijo y compartió el consejo que Wendell Berry le dio cuando luchaba por proteger los derechos de los granjeros de Vermont a sacrificar a sus propios animales: «Encuentra a tus aliados».

Nass añadió que la conferencia había demostrado que “el gobierno no nos está dando soluciones sino que nos está creando problemas, y sin embargo los individuos son muy buenos encontrando soluciones”.

“Nunca subestimes lo que es posible”, dijo Fitts, “especialmente si mucha más gente se suma, ya sea como consumidor o como ciudadano”.