Sigue la guerra fría entre la presidencia de la Generalitat (Quim Torra) y la del Parlament (Roger Torrent) a cuenta de las resoluciones contra la Monarquía aprobadas el viernes en un pleno extraordinario y publicadas en el boletín oficial sin los puntos que chocan con el Tribunal Constitucional. Una decisión, esta última, ejecutada por el secretario general de la cámara, Xavier Muro, que desató la ira de Torra, quien llegó a pedir su cese para culminar el desafío al Rey y al Alto Tribunal.
Ahora, han sido los propios letrados los que han tenido que salir al paso ante las presiones del president de la Generalitat con un comunicado en el que defienden su trabajo y profesionalidad ante las advertencias de parte del independentismo, especialmente de JxCat y la CUP. En un gesto insólito, los letrados del Parlament han dirigido un escrito a la Mesa en el que reivindican su «independencia» y cierran filas con el secretario Xavier Muro.
En el escrito, que firma la junta de letrados del Parlament, éstos recuerdan que el Alto Tribunal «ha impuesto personalmente al secretario general el deber de cumplir sus resoluciones y de no realizar actos jurídicos o materiales de la responsabilidad que tiene atribuida que puedan ignorar o eludir este deber», a riesgo de incurrir en responsabilidades «incluso penales». Y entre ellos, especifican, «se halla el ordenar la publicación de las resoluciones parlamentarias».
Los letrados también subrayan que los servicios jurídicos de la cámara catalana forman parte de la administración parlamentaria «y están integrados por funcionarios públicos que actúan con independencia de criterio y con objetividad» en el ejercicio de sus funciones, y que deben ajustarse a la legalidad tal y como ha hecho Muro, especifican en la misiva.
Y es que, después de que el independentismo desafiara al Rey y al TC con la votación un puñado de resoluciones antimonárquicas en el pleno, de la publicación oficial del Parlament ha quedado fuera, por ejemplo, la reprobación al Rey Felipe VI de la CUP, el fragmento que tilda a la Monarquía de «delincuente» o la referencia al 1-O y a la declaración unilateral de independencia. El texto conjunto de JxCat, ERC y la CUP sí mantiene que la mayoría de la cámara declara que «Cataluña es republicana y, por lo tanto, no reconoce ni quiere tener rey».
De hecho, al final del documento publicado en el boletín oficial del Parlament se adjunta una nota del citado secretario general de la cámara catalana, Xavier Muro, en la que esgrime su «deber» de «impedir o paralizar cualquier actuación jurídica o material que pueda suponer el incumplimiento» de las decisiones del Constitucional y explica que han quedado excluidos de la publicación los puntos controvertidos.
A los reproches públicos del president y de gran parte de la bancada de JxCat –han exigido públicamente desde «expedientes» a funcionarios hasta el cese de Muro y la publicación íntegra de las resoluciones– se han sumado las críticas de la CUP a Roger Torrent (ERC). «Es imprescindible que esto se publique (los puntos borrados)», aseguran.
(Cristina Rubio. Diario La Razón)