En 2022, los bancos centrales habrán comprado la mayor cantidad de oro en la historia reciente. Según el Consejo Mundial del Oro , las compras de oro por parte de los bancos centrales han alcanzado un nivel no visto desde 1967.
Los bancos centrales del mundo compraron 673 toneladas métricas en los primeros tres trimestres de 2022 y en el tercer trimestre la cifra fue de casi 400 toneladas métricas. Esto es interesante porque el flujo de los bancos centrales desde 2020 ha sido eminentemente de ventas netas.
¿Por qué los bancos centrales mundiales están agregando oro a sus reservas? Puede haber diferentes factores.
El mayor porcentaje de reservas de la mayoría de los bancos centrales son dólares estadounidenses, que generalmente vienen en forma de bonos del Tesoro de EE. UU. Tendría sentido que algunos de los bancos centrales, especialmente el de China, decidieran depender menos del dólar.
Los bancos centrales han estado hablando sobre la idea de emitir una moneda digital, que cambiaría por completo la forma en que funciona el dinero en la actualidad. Al emitir una moneda digital directamente en la cuenta de un ciudadano en el banco central, la institución financiera tendría pleno acceso a la información de los ahorradores y, lo que es más importante, podría acelerar el mecanismo de transmisión de la política monetaria al eliminar los canales que evitan una mayor inflación. de suceder: el canal bancario y el respaldo de la demanda de crédito.
Lo que ha impedido que la inflación suba mucho más es que la forma en que se transmite la política monetaria siempre es frenada por la demanda de crédito en el sistema bancario. Obviamente, esto ha llevado a un gran aumento en los precios de los activos financieros y todavía provocó que los precios se dispararan cuando el crecimiento de la oferta monetaria se utilizó para pagar los gastos y subsidios del gobierno.
Si los bancos centrales comienzan a emitir monedas digitales, el nivel de destrucción del poder adquisitivo de las monedas observado en los últimos 50 años será extremadamente pequeño en comparación con lo que puede ocurrir con el control desenfrenado del banco central.
En tal entorno, el estatus del oro como reserva de valor sería inigualable.
Hay más razones para comprar oro.
La liquidez era el talón de Aquiles de las criptomonedas. Unas cuantas subidas de tipos por parte de la Fed desmintieron rápidamente la idea de que las monedas digitales solo podían aumentar de valor. Las criptomonedas no combatieron la expansión monetaria; más bien, fueron uno de sus efectos. El oro era ahora una de las pocas verdaderas reservas de valor que quedaban.
Los bancos centrales necesitan oro porque pueden estar preparándose para un período de devastación monetaria sin precedentes.
El Financial Times afirma que los bancos centrales ya están sufriendo pérdidas significativas como resultado de la caída del valor de los bonos que tienen en sus balances. A finales del segundo trimestre de 2022, la Reserva Federal había perdido 720.000 millones de dólares, mientras que el Banco de Inglaterra había perdido 241.000 millones de dólares. Actualmente, el Banco Central Europeo está revisando sus finanzas y se prevé que también incurrirá en pérdidas significativas.
El Banco Central Europeo, la Reserva Federal de EE. UU., el Banco de Inglaterra, el Banco Nacional Suizo y el banco central de Australia «ahora enfrentan pérdidas potenciales de más de $ 1 billón colectivamente, ya que los bonos que alguna vez fueron rentables se convierten en pasivos», según Político .
Si un banco central experimenta una pérdida, puede llenar el vacío utilizando las reservas disponibles de años anteriores o solicitando ayuda a otros bancos centrales. Al igual que un banco comercial, puede experimentar dificultades significativas; sin embargo, un banco central tiene la opción de recurrir a los gobiernos como último recurso. Esto implica que el agujero lo pagarán los contribuyentes, y los costos son astronómicos.
La ola de destrucción monetaria que podría resultar de un nuevo récord en la deuda global, enormes pérdidas en los activos del banco central y la emisión de monedas digitales solo encuentra un verdadero refugio seguro con siglos de estatus probado como reserva de valor: el oro. Esto se debe a que los bancos centrales son conscientes de que los gobiernos no están recortando el gasto deficitario.
¿Por qué los bancos centrales aumentan sus compras de oro justo cuando aparecen pérdidas en sus balances? Para aumentar su nivel de reserva, disminuir las pérdidas y prever cómo las monedas digitales recién creadas pueden afectar la inflación. Dado que comprar bonos soberanos europeos o norteamericanos no reduce el riesgo de perder dinero si la inflación se mantiene alta, es muy probable que la única opción real sea comprar más oro.
Los bancos centrales de las naciones industrializadas harán un esfuerzo por reducir sus balances para combatir la inflación, pero también descubrirán que los activos que poseen continúan depreciándose. Un banco central que está perdiendo dinero no puede expandir inmediatamente su balance ni comprar más bonos soberanos. Se ha establecido una trampa de liquidez. La flexibilización cuantitativa y las tasas de interés bajas son necesarias para valores de activos más altos, pero una mayor liquidez y restricción financiera pueden prolongar las presiones inflacionarias, lo que luego aumentaría la presión sobre los precios de los activos.
La idea de que imprimir dinero no conduciría a la inflación sirvió como base para el espejismo monetario. La evidencia de lo contrario ahora demuestra que los bancos centrales se enfrentan a un serio desafío: son incapaces de sostener la expansión múltiple y la inflación de los precios de los activos, bajar los precios al consumidor y financiar el gasto público deficitario al mismo tiempo.
Entonces, ¿por qué oro? Porque inevitablemente surgirá un nuevo paradigma en la política como resultado de los desastrosos efectos económicos y monetarios de años de relajación excesiva, y ni nuestras ganancias reales ni nuestros depósitos de ahorro se benefician de eso. Lamentablemente, los bancos centrales se han visto obligados por los gobiernos a elegir la represión financiera cuando se les presentaba la opción de una moneda sólida.
La única razón por la que los bancos centrales compran oro es para proteger sus balances de sus propios programas de destrucción monetaria; no tienen más remedio que hacerlo.
Daniel Lacalle/ Epoch Times
