14 comunidades autónomas permiten la participación injustas de deportistas transexuales con mujeres en nuestro país. Con la negativa de varias federaciones internacionales, estas leyes deberán variar
Al rugby, en 2020, se ha unido la FINA (Federación Internacional de Natación), que ha prohibido la participación de todas aquellas mujeres transexuales que hayan pasado alguna fase de la pubertad como hombre, es decir a los 12 años. De esta forma, la organización quiere evitar que el desarrollo muscular o el nivel de oxigenación y testosterona que logra un joven durante la adolescencia permita sacar ventaja a estos deportistas ‘trans’.
No es la única organización que ha pensado en implantar una solución a este problema del que se quejan muchos deportistas. Por ejemplo, la UCI (Unión de Ciclistas Internacional) ya está elaborando un protocolo para actuar ante estos casos. Incluso la FIFA va a estudiar qué hacer con los deportistas transgénero.
De este modo, ya no será posible ver cómo el trans Lia Thomas destroza injustamente a sus rivales femenisnas en la piscina por su condición de transexual.
Estudios científicos
Presiones del lobby trans
Álvarez cuenta que el Comité Olímpico Internacional, ante las presiones de asociaciones en defensa de la transexualidad, se lavó las manos y dejó en manos de las federaciones internacionales la normativa respecto a los transexuales que participan en categoría femenina y de hombres autodefinidos como mujeres, de ahí que ahora, una por una, estén saliendo los organismos de cada disciplina y deporte a mostrar su legislación.
«Esto no exime al COI de pronunciarse», señala Álvarez, ya que hay países que no permiten la participación de personas transgénero en el deporte femenino. Si hay una federación que sí lo permita, se creará un conflicto entre las partes que acabará en los tribunales. Ahí, irremediablemente, el Comité deberá ofrecer su punto de vista.
Desde la Asociación contra el Borrado de Mujeres señalan que «el movimiento trans está dispuesto a todo con tal de validar su identidad», pero creen que el deporte no es la vía, ya que ahí lo que prima es «el juego limpio, valor principal en el deporte», algo que desaparece cuando aparecen atletas con una superioridad física evidente gracias a la genética. De ahí que muchas organizaciones feministas estén en contra de la aceptación de transexuales en el deporte femenino, ya que las borra del mapa y las deja fuera de sus categorías para ser dominadas por hombres que se sienten mujeres.
14 comunidades permiten competir a deportistas transgénero
En España, 14 comunidades autónomas permiten la participación en competiciones deportivas de categoría femenina siendo transexual e incluso, en algunas, no es necesario haberse sometido a un cambio de sexo: con autodefinirse como mujer es suficiente para participar. Es el caso de Aragón, donde «las personas transexuales pueden participar en las actividades deportivas de acuerdo a su identidad de género autodeterminada, aunque la registrada no coincida con esta». Así lo afirma la Ley 4/2018, de 19 de abril, de Identidad y Expresión de Género e Igualdad Social y no Discriminación de la Comunidad Autónoma de Aragón.
Irene Montero engaña
Que las federaciones internacionales cambien su normativa impidiendo el acceso de transexuales o imponiendo una edad límite supone, según Ángeles Álvarez, que tengan que cambiar -o eliminarse- todas estas leyes que permiten la participación en campeonatos deportivos con tan solo la autodeterminación, sin necesidad de cambio de sexo. Considera que Irene Montero «engaña a la ciudadanía porque ella habla de género, algo que no es registrable. En el registro civil se valora el sexo y la edad, por lo que Montero, con su ley, busca que cualquiera pueda cambiar su sexo autodeterminado».
(Con información de VozPopuli)