La formación verde ganó 1.024 inscritos a pesar de que 10.024 afiliados se dieron de baja en 2021. El 65% del presupuesto aún proviene de subvenciones públicas
Vox, a pesar de que 10.024 afiliados se dieron de baja en 2021, sigue creciendo. Lo hace gracias a que otras 11.118 personas decidieron inscribirse durante ese mismo periodo.
La formación verde acabó el año con 63.468 militantes, lo que supone un crecimiento de 1.094 afiliados respecto al curso anterior. Casi un 2%. Gracias a ello, y al incremento en la cuantía de algunas cuotas, Vox logró aumentar un 9% sus ingresos privados, que alcanzan los 5,1 millones de euros.
El 65% de su presupuesto proviene de subvenciones públicas.
Vox cerró el pasado ejercicio con unos ingresos de 15,6 millones de euros. El 65% de esa cantidad procede de subvenciones públicas, a pesar de que sus integrantes han mostrado su intención de eliminarlas. El secretario general, Javier Ortega Smith, denuncia que su formación es la única que promueve la iniciativa y justifica seguir cobrándolas porque «lo contrario supondría salir a la arena política con las manos atadas a la espalda y los ojos vendados».
Un dirigente de Vox asegura confiar «poco» en que el resto de formaciones accedan a suprimir esa vía de financiación. Insiste en que el suyo es el único partido sin deudas y quita hierro al número de bajas que se han producido en el último año.
Causas del gran número de bajas
Llama mucho la atención el gran número de bajas que tienen. Son varias posibles causas posibles: La primera, que Vox haya abandonado algunas de sus tesis originarias o no ha cumplido con ellas, como es el caso de las autonomías; otra posible causa es la estructura «centralizada, casi militar» y que es imposible salirse del guión oficial; otra ha podido ser la polémica variación de los estatutos que fue realizada en la asamblea general ordinaria, celebrada el pasado 1 de abril de forma telemática – aunque fue refrendada por el 91,2% de sus afiliados, pero algunos acusaron a la formación de intentar «cercenar» la democracia interna-
Economía saneada
Vox gastó el año pasado poco más de 14 millones de euros. La cantidad más importante, 3,3 millones de euros, se utilizó para pagar a los 111 empleados de la formación. Otros 2,4 millones sirvieron para financiar a Disenso, el think tank del partido.
La formación verde cuenta con 10,2 millones de euros en el banco, no tiene deudas y podrá concurrir a las próximas elecciones sin recurrir a créditos. Las aportaciones de los afiliados aumentaron un 9% el año pasado y alcanzan ya los 5,1 millones de euros. Las cuotas fluctúan entre los nueve euros mensuales de la donación ordinaria y los 50 euros de la donación «a la carta».
