La destreza de la manipulación | José Ignacio Echegaray

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Como no podía ser de otro modo, Sánchez nos ha comunicado que sigue. No cabía esperar otra cosa. Tiene muchos frentes abiertos y como buen escapista ha montado un numerito con varios fines:

1.- Desviar la atención para que no se hable de los temas que afectan a su mujer, ni de la corrupción del PSOE, ni del caso Pegasus, ni de la amnistía, ni de etcétera, etcétera, etcétera.

2.- Mandar un mensaje de resistencia y apoyo a los catalanes para arrimar el ascua a su sardina en las elecciones.

3.- Reforzar su posición para, bajo la rimbombante expresión “regeneración democrática”, permitirle atacar con más ahínco al Poder Judicial, que tanto le estorba, y a la libertad de expresión porque no le gusta oír la verdad.

Analicemos algunas de las frases que ha dicho en su mensaje de hoy:

“Ataque indiscriminado a personas inocentes”

“Ejercicio del odio, de la insidia y de la falsedad hacia terceras personas”

“Que las mentiras más groseras sustituyan el debate respetuoso y racional”

“Ver cómo se intenta destruir su dignidad sin el más mínimo fundamento”

Nada nuevo, estas frases o similares las vienen repitiendo machaconamente Sánchez y todos los que le rodean, desde que empezaron a publicarse en los medios los temas relacionados con su mujer y con la trama de corrupción del PSOE.

Clarísimamente, hoy se refería a su mujer, de la corrupción de su partido, nada de nada. Todavía estamos esperando a que explique por qué todas las noticias publicadas sobre su mujer son falsas. Si es inocente y si todo lo que dicen los medios son mentiras, lo tiene muy fácil, que presente la correspondiente demanda ante el juzgado y que ahí se demuestre su inocencia. Si no ha hecho ninguna de las dos cosas será porque no son falsas las acusaciones.

Las publicaciones han aportado medios de prueba, bien documentales, o bien contrastados con empresas o personas implicadas en las tramas. Si estas pruebas son falsas, la solución es demandarles judicialmente para que se esclarezca el asunto.

Tampoco han hecho nada de esto, que hubiera sido lo lógico si verdaderamente todo fuera mentira, consecuentemente, tendremos que inferir que lo que aportan los periodistas son pruebas ciertas.

Luego entonces, lo que ha dicho hoy Sánchez es pura palabrería que, además, es un ataque directo a la libertad de prensa y de expresión.

Seguimos analizando el contenido de su mensaje:

“O decimos basta, o esta degradación de la vida pública determinará nuestro futuro condenándonos como país”

¿A qué quiere decir basta? ¿A que haya libertad de expresión? ¿A implantar la censura y que solo se pueda publicar lo que él diga? Eso es lo que hicieron sus compañeros de partido en la Segunda República. Parece que le gustaría repetirlo.

“No es una cuestión ideológica, estamos hablando de respeto, de dignidad, de principios que van mucho más allá de las opiniones políticas”

Le compro la frase, el problema es que, en muy pocas o ninguna ocasión lo ha practicado. Desde que llegó al poder ha gobernado siempre desde la ideología.

“Si consentimos que los bulos deliberados dirijan el debate político”

¿A qué bulos se refiere? ¿A todo lo que han probado los periodistas? El debate político con Sánchez es imposible porque jamás contesta a lo que se le pregunta, lo habitual es que responda con un ataque a quien ha osado preguntarle. Cuántas veces le han preguntado en el Congreso por los temas de su mujer y él ha contestado pidiendo la dimisión de Isabel Diaz Ayuso.

“Confundir libertad de expresión con libertad de difamación”

Aquí ya asoma la patita para ver cómo se pueden suprimir todos los medios de comunicación que no son afines al régimen. Por otra parte, la difamación es algo que se practica asiduamente en sus filas. Por poner dos ejemplos muy recientes: la acusación contra la mujer de Alberto Núñez Feijoo diciendo que se había servido de su marido para favorecer a una empresa. Quedó demostrado que era falso. Todavía están esperando a que pidan disculpas. Y la insistencia de acusar como corrupto al hermano de Isabel Diaz Ayuso cuando hace tiempo que se ha archivado su tema, tanto en España como en Europa.

“Asumo mi compromiso de trabajar sin descanso, con firmeza y con serenidad por la regeneración pendiente de nuestra democracia”

Miedo me da. Ya veremos cuanto tarda en publicar una ley de defensa de la democracia en la que se acabe con la libertad de expresión y se intervenga el Poder Judicial. Es lo que hicieron en 1931 con la Ley de Defensa de la República.

“Apelo a una sociedad que supo sobreponerse a las terribles y profundas heridas del peor de sus pasados”

Efectivamente, así fue. Los españoles nos olvidamos de nuestras diferencias y de los bandos para vivir en paz y democráticamente, y lo conseguimos, hasta que llegó Zapatero y resucitó todas las inquinas guerracivilistas. Sánchez ha seguido la misma línea con mucha aplicación. No se como tiene el descaro de decir eso.

“Forma parte de un movimiento reaccionario mundial que aspira a imponer su agenda regresiva mediante la difamación, la falsedad y el odio”

Se está mirando en su propio espejo con la Agenda 2030 y el Foro de Puebla.

La conclusión final es que, como siempre, los marxistas tienen una especial destreza para desfigurar la realidad, manipulando creencias y emociones con el objetivo de influir en la opinión pública y en las actitudes sociales. Esto se llama posverdad.

José Ignacio Echegaray | Colaborador de Enraizados

 

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2 comentarios en «La destreza de la manipulación | José Ignacio Echegaray»

  1. Un psicópata narcisista especialmente malvado y despreciable, y a la vez tan torpe e inepto que cuesta trabajo asumir que siga engañando a tanto ingenuo/incauto y que no haya provocado un levantamiento masivo de una sociedad civil tan adormecida como hedonista, amoral, cobarde y miserable. Los borregos y demás basura que lo siguen apoyando y jaleando no dejarán de hacerlo porque no dan para más, son una secta infecta, y muchos están defendiendo su cargo o la paguita.

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