La cursilería en la política española actual: Entre la comunicación emocional y la superficialidad | Albert Mesa Rey

Como ciudadano entrado en años en los que se supone que la vida me ha dado cierta madurez y raciocinio, causa sonrojo, vergüenza ajena y como no mucha indignación, los discursos de la casta política que tenemos que soportar casi siempre, pero muy especialmente en fechas previas a las convocatorias electorales. Parece como si nuestros “próceres” hayan decidido infantilizar la sociedad con mensajes propios de niños de primaria apelando más a emociones que a la racionalidad.

Practicada sistemáticamente por políticos mayoritariamente del espectro político de la izquierda, que parafraseando al Ingenioso Hidalgo “de cuyo nombre no quiero acordarme”, en la política española contemporánea, la cursilería se ha convertido en un fenómeno notable que merece una atención sociológica.

Definiendo la cursilería

La cursilería puede definirse como un exceso de sentimentalismo o afectación en la expresión o comportamiento, que tiende a ser percibido como artificioso, superficial o poco auténtico. Se manifiesta a través de gestos, palabras o acciones que buscan apelar a las emociones de manera exagerada, muchas veces sin una base genuina o sincera. La cursilería a menudo implica una tendencia hacia lo adornado, lo melodramático o lo idealizado, y puede ser vista como una forma de comunicación o expresión que carece de profundidad o autenticidad.

El auge de la cursilería en la política española actual

En un contexto político marcado por la desconfianza hacia las instituciones y los líderes políticos, la cursilería se presenta como una estrategia para ganar la simpatía y la confianza del público. La polarización política, la fragmentación social, el enfrentamiento y la creciente demanda de autenticidad por parte de los ciudadanos, la presencia de la cursilería plantea interrogantes sobre la comunicación política, la identidad y la percepción pública.

La cursilería en la política española actual se manifiesta de diversas formas, desde discursos cargados de emotividad hasta gestos grandilocuentes en eventos públicos. En un panorama político cada vez más dominado por la competencia mediática y la lucha por la atención del público, los políticos a menudo recurren a estrategias que buscan generar una conexión emocional con los ciudadanos.

La cursilería puede ser vista como una forma de diferenciación en un panorama político altamente competitivo. En un entorno donde los políticos buscan destacarse y captar la atención del público, recurrir a la emotividad y lo sentimental puede ser una forma efectiva de sobresalir en medio del ruido mediático. En la política española, la cursilería ha sido evidente en varios contextos y momentos a lo largo de la historia, pero muy particularmente en la actualidad que nos ha tocado vivir.

Un ejemplo destacado es el uso de las redes sociales como plataforma para proyectar una imagen de autenticidad y cercanía emocional. Los políticos recurren a fotos familiares, anécdotas personales y mensajes emotivos para humanizar su imagen pública y establecer una conexión emocional con sus seguidores. Algunos otros ejemplos notables serían:

Discursos excesivamente emotivos: Políticos que recurren a discursos cargados de emotividad exagerada, utilizando metáforas floridas y lenguaje poético para apelar a las emociones de los ciudadanos.

Gestos grandilocuentes en eventos públicos: Algunos líderes políticos han sido vistos realizando gestos ostentosos en eventos públicos, como abrazos efusivos o lágrimas públicas, con el objetivo de generar simpatía y conexión emocional con la audiencia.

Uso de simbolismo exagerado: La utilización excesiva de simbolismo en la presentación pública, incluyendo referencias históricas idealizadas y una estética ornamental en la imagen y la comunicación política.

Anuncios políticos cursis: En campañas electorales, se han producido anuncios políticos que recurren a una narrativa cursi, enfocándose en historias personales emotivas o situaciones sentimentales para transmitir un mensaje político.

Uso de redes sociales para proyectar una imagen cursi: Algunos políticos utilizan las redes sociales para compartir contenido que busca proyectar una imagen de autenticidad y cercanía emocional, recurriendo a fotos familiares, anécdotas personales y mensajes emotivos para conectar con los ciudadanos.

Estos ejemplos ilustran cómo la cursilería se ha manifestado en diferentes aspectos de la política española, desde la comunicación verbal y no verbal hasta la proyección de una imagen pública en medios tradicionales y digitales.

Impacto y críticas

Si bien la cursilería puede tener cierto impacto en la percepción pública y en la conexión emocional con los ciudadanos, también ha sido objeto de críticas. Muchos consideran que este enfoque superficial y emotivo es manipulador y poco sincero, y que en última instancia, socava la confianza en la política y en los líderes políticos.

Además, la cursilería puede restar credibilidad a los políticos, especialmente cuando se percibe como excesiva o fuera de lugar. En un momento en el que los ciudadanos demandan transparencia y autenticidad en la política, los políticos que recurren a la cursilería corren el riesgo de alienar a una parte de la población que valora la honestidad y la coherencia.

Conclusión

La cursilería en la política española actual es un fenómeno complejo que refleja las dinámicas sociales, culturales y políticas de la sociedad contemporánea. Si bien puede ser una estrategia efectiva para generar una conexión emocional con los ciudadanos y diferenciarse en un panorama político competitivo, también plantea desafíos y críticas en términos de autenticidad y relevancia política. En última instancia, la cursilería en la política española actual es un fenómeno digno de estudio sociológico que ofrece una ventana para comprender las complejidades de la comunicación política y la construcción de la identidad pública en el siglo XXI.

La cursilería en la política española actual puede entenderse como una respuesta a la creciente demanda de autenticidad y cercanía por parte de los ciudadanos. Gracias una vez más por leerme.

Albert Mesa Rey es de formación Diplomado en Enfermería y Diplomado Executive por C1b3rwall Academy en 2022 y en 2023. Soldado Enfermero de 1ª (rvh) del Grupo de Regulares de Ceuta Nº 54, Colaborador de la Red Nacional de Radio Emergencia (REMER) y Clinical Research Associate (jubilado). Escritor y divulgador.