Es un estreno, pero no se ha escuchado nada nuevo. Más de lo mismo. Nada nuevo bajo el sol. El discurso casposo de siempre de los comunistas que intentan cambiar de careta para decir siempre lo mismo.
Veto a los dirigentes ‘históricos’
Llamó la atención, por ejemplo, el planteamiento de Yolanda Díaz de vetar que otros rostros conocidos del espacio de Unidas Podemos acudieran a la presentación de Sumar. Muchas explicaciones se han dado. la más clara es que, visto lo visto en la creación de Podemos, no quiere que nadie le haga sombra. Y es que Yolanda quiere ser la única líder desde el principio. Un enfoque que puede rebajar el atractivo de la militancia pero a la comunista Yolanda no le importa. Y por eso, Díaz centra su proyecto política más en la participación y la inclusión de la «sociedad civil» que no le da problemas.
El acto en la plaza de Matadero
La plaza de Matadero se ha llenado con un público a medio gas, para presenciar la salida al escenario de la «penúltima» esperanza de la izquierda comunista, porque allí ha nacido un nuevo experimento político incierto de los comunistas que promete dar no pocos dolores de cabeza a las fuerzas que forman la coalición de Unidas Podemos.
Pero por si había dudas, Díaz ha vuelto a decir que este “movimiento ciudadano” no va de partidos. O sea, lo de siempre. Lo mismo que dijeron con el movimiento 15M. Por eso no ha subido a ningún político tradicional.
Los de siempre
Sí, Yolanda Díaz ha interpelado a los de siempre y a lo de siempre: “Tiene que hablar la gente, los profesionales, las cajeras de supermercado, los arquitectos, los urbanistas, las limpiadoras… Ya está bien de que hablen los de siempre”. O sea, más de lo mismo. Innovación más bien poca en este discurso ya gastado desde el principio.
El mismo 15 m…pero distinto
Yolanda Díaz ha prometido otra forma de hacer las cosas. Como siempre! Otro 15-M que sabe que no se puede repetir: “Sé que estáis hartas de ruido, de que se vote en contra de una reforma laboral aunque esté cambiando la vida de la gente. La política es otra cosa. Es escuchar y escuchar con mucha calma. Es dialogar, tender la mano y después, sí, ser capaces de llegar acuerdos para cambiar la vida de la gente”.
En verdad, la convocatoria de Sumar ha despertado una cierta expectación, pero no excesiva.
Baja aceptación en redes
Aun así, Sumar tarda en despegar en las redes. Los perfiles oficiales no están sumando todos los seguidores que les gustaría. En Twitter, por ejemplo, el principal canal de difusión de información política, Sumar cuenta con algo más de 38.000 usuarios (datos del viernes). Se trata de cifras por debajo de las expectativas, según comentan varias fuentes de Unidas Podemos.
Podemos, Izquierda Unida o Yolanda…¿quién ganará?
La dirección morada ha analizado estos datos, y reciben con cierto alivio esta dificultad de los equipos que apoyan a Díaz. Podemos, que en Twitter cuenta con 1,5 millones de seguidores, goza de una ventaja estratégica que quiere explotar para imponer su tesis a la política gallega. Podemos quiere que las cuotas de poder en Sumar se repartan entre partidos, contabilizando su fuerza política actual. Los morados quieren así imponer a Díaz sus nombres para las futuras listas electorales, aunque la gallega tiene un planteamiento más rupturista y aspira a no verse con las manos atadas en ese delicado proceso.
Por su parte, Izquierda Unida ofrece a la política gallega todo su apoyo logístico y de militancia para que Sumar se presente en toda España. En el acto de Madrid, por ejemplo, IU y también Comisiones Obreras movilizaron a sus cuadros y bases para llenar el espacio en el que Díaz dio su primer mitin como candidata in pectore de Sumar. Aun así, fuentes de IU admiten tener «dudas» sobre el proyecto de Díaz. Y también sobre la manera en la que está organizando sus primeros movimientos.