Juan José Omella, el arzobispo nacionalista que mueve los hilos en la política española

Omella: un mediador del y para el independentismo.

Lo primero que hay que decir es que no son las dos partes los que le proponen. Son los separatistas catalanes quienes le han propuesto. ¿Por qué?

Omella es, ante todo y claramente, un nacionalista catalán- por no decir separatista-, y ha sabido usar esta característica política para, por ejemplo, en 2017 asesorar al separatista republicano de ERC -Oriol Junqueras- además de ofrecerse como mediador entre Carles Puigdemont y Mariano Rajoy. Ahora sería entre Puigdemont y Sánchez.

Tal y como han revelado diversos medios de comunicación, el cardenal Omella reúne varios requisitos que lo sitúan como uno de los candidatos ideales para el golpista separatista Puigdemont:

• Es el máximo responsable de los obispos en España ya que es el presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) desde 2020 – y hasta 2024. Una elección de la mayoría de los obispos que claramente tomaba la dirección del Vaticano siguiendo la línea ‘progresista’ de las preferencias del Papa.
• Tiene un sentir nacionalista más próximo a las tesis separatistas y tiene relación directa. De hecho Omella es nacionalista.
• Goza de la plena confianza del Papa Francisco. Además, desde marzo forma parte del grupo permanente de cardenales que aconseja al Papa Francisco en el gobierno de la institución. Desde que llegó a la presidencia. De convertirse en el relato sería con el aval del Vaticano.
• Tiene una magnífica relación con el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños – del que se dice que pertenece a la masonería-, y que gestiona la relación del Ejecutivo con la Iglesia católica. Omella, en el plano político ha sabido entenderse con el Gobierno de coalición y ha sido muy comprensivo con el separatismo.
• Omella: un mediador del y para el independentismo. Omella tiene experiencia como negociador de los separatistas catalanes. Como ya se ha mencionado, ésta no es la primera vez que Omella busca un papel de mediación en el proceso independentista. Siendo arzobispo de Barcelona se ofreció a arbitrar entre la Generalidad y La Moncloa en 2017, en el golpe de estado separatista del 1O.
• Ya impulsó de la Iglesia este proceso en el pasado. Además, hay que recordar que la Conferencia Episcopal Tarraconense (CET), que es el órgano que reúne a los obispos de la comunidad catalana, fue el que instó a la mediación de Omella en 2017. El CET también avaló los indultos a los condenados del procés hace dos años sin que Omella les corrigiese en Madrid. Omella actuó en aquel momento de la mano de Oriol Junqueras.

En definitiva, es la persona ideal del nacionalismo para avanzar en la amnistía como primer paso hacia la autodeterminación. Y el máximo representante de la Conferencia Episcopal Española parece que avala este proceso rupturista. ¿También el Vaticano?