Elon Musk tiembla por la fuerza del relato | José Antonio Ruiz de la Hermosa

Esta semana, el gran líder de la democracia que desde España ya lidera el “wokismo” y el movimiento que pretende desmontar al trumpismo y, de paso, las acciones de Elon Musk en las redes. Increíblemente, este señorito de, “qué guapo soy y qué tipo tengo” pretende, a golpe de BOE, hacerse con el control de las redes en el mundo.

Para ello, lo primero ha sido presentar en el Congreso un documento con tres puntos, que aporta tres medidas concretas. Tres, entiendo que más habrían sido un dispendio inusitado y, además, ¿creen ustedes que los funcionarios del partido único del poder en España son capaces de elucubrar más tiempo y más medidas de una sentada? No lo crean. Posiblemente haya sido para ellos un esfuerzo titánico, por lo que dudo que en breve se planteen hacer en algún tiempo otro esfuerzo similar. Pero por fortuna para ellos, el relato ya está hecho hace mucho tiempo y, tan solo, hay que adaptar sus ideas a cosas muy concretas. O sea, a las que se salen del discurso monolítico.

Porque los planteamientos del gran timonel son básicamente: recuperar el control de las redes. Claramente el problema es que si les dejamos a los “patriots” que hablen y escriban lo que piensan o quieren, y si, además, lo razonan adecuadamente, es posible que los borregos se den cuenta de que lo son y que, además, hay otros pensamientos y otros caminos. Es malo que la gente piense, y mucho más malo que sepan que, además de la versión oficial del partido único, que ni es partido, ni es obrero, ni es español, bueno quizás sea socialista, pero estilo URSS. En fin, que es peligrosísimo, que se pueda perder el relato, sobre todo por lo que ha costado alienar a base de subvenciones al populacho.

Y para ello, nada mejor que ese plan registrado tan recientemente en el Congreso y que, utilizando el discurso de su habitual relato, busca únicamente que las redes vuelvan a estar controladas por esa falsa izquierda, que tiene también diseñada el relato y también sabe venderlo también, mejor dicho regalando subvenciones a los que creen que son incapaces de luchar por su destino y por eso les basta con apuntarse a la facilidad de las palabras huecas y vacías que muy rimbombantes prometen, pero que no dan nada; bueno, sí, dan subvenciones por votos.

Textual, así es lo que estos analfabetos funcionales venden como relato a los actuales y futuros subvencionados, así: …//…»La revolución digital que vivimos desde hace décadas se ha convertido en una fuente de oportunidades para mejorar la vida de las sociedades: ha multiplicado las capacidades de las economías, ha mejorado los avances en el desarrollo de la salud y la educación, e incluso ha posibilitado la interconexión y la transferencia de conocimiento, a una velocidad nunca antes vista. Pero como toda revolución, también lleva consigo: amenazas y riesgos para la ciudadanía«…//…

Sin comentarios, palabras, frases, discurso, bonito, todo muy bonito y benefactor para el pueblo. En realidad, es el mismo discurso y relato de siempre, este de “la digitalización con base humanista” y que, según Pedro, va a hacer temblar a Elon. Su problema es que cada día menos y, a pesar de los pesares y de la compra con 17.000 millones, a cambio de siete votos mantenidos en el tiempo, más lo pagado antes y lo que pagaran después, eso sí que salen de mi bolsillo, del suyo, del de los contribuyentes y que servirán, para continuar con el montaje del “Estat Catala” y la destrucción del Estado Español, y de los paganinis de la fiesta, o sea nosotros.

Yo no sé si Elon Musk estará preocupado. Lo dudo muchísimo, pues Elon se ha currado lo que tiene, además, día a día se pone a trabajar y se rodea de gente, gente que está dispuesta a conseguir un objetivo por el bien de su causa, mala o buena, la causa de su patria y quizás de sus creencias, casi seguro. Mientras, la única creencia de los del “Relato” es simplemente que con los impuestos que nosotros pagamos, en vez de financiar sanidad, educación y pensiones. Tus impuestos lo que van a financiar es Jessicas, y todo lo que las acompaña. No obstante, la cosa ya no va también, pues, aunque Jessica no haya cometido ningún delito, está claro que es el objetivo real de los del relato. Que nosotros estamos aquí para pagarles sus Jessicas, sus apartamentos y sus caprichos de día a día.

Lo cierto es que los del relato tienen un problema, se les está acabando el crédito ético que tenían, y del otro también. Me comentaba un amigo que: además de renunciar a su trabajo, al que por cierto no iba a trabajar, sobre todo porque no había sitio, ni trabajo, casi igual que Jessica; pues eso que el hermanísimo, además ha cerrado el despacho que tenía en el edificio de la «Avenida de Badajoz» de Elvas, seguramente porque ya no hay nada que ocultar y porque las subvenciones y los negocios en el país de al lado, se acabaron.

Eso sí, Pedro I, el líder de Europa y el salvador del wokismo se confunde. Hay una pequeña diferencia entre los suyos y los adversarios. Elon o Donald, escogen a sus huestes por méritos, por ser los mejores. Pedro, los escoge básicamente por ser inferiores en méritos a él y tampoco es muy difícil; pero lo más importante es porque están dispuestos a servir al jefe donde sea y como sea. Eso al final se nota en los resultados a medio plazo, mucho, muchísimo. Ha llegado la hora de que los que valen lleguen y los que simplemente medran, vayan al cubo de la basura, pero los del relato, ellos todavía no se han enterado. Y ahí lo dejo…

José Antonio Ruiz de la Hermosa es, de primera formación, Sanitario y Capitán retirado de Sanidad Militar. Después, historiador, escritor y divulgador. Actualmente dirige en Decisión Radio varios programas de divulgación histórica y “La Cortina de Humo” sobre la actualidad nacional.