¿Elecciones generales en 2022?

Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin

La sensación de que puede haber elecciones generales anticipadas el año que viene la vislumbraba hace semanas el PNV. Y lo maliciaban otros socios de Pedro Sánchez que han ido tomando nota en estos meses de las estrategias de Moncloa. Los nacionalistas vascos son una pieza fundamental en el engranaje de la estabilidad nacional, siempre manejan buena información, y hoy creen que la tensión dentro de la coalición ha cruzado ya una raya que sólo puede llevar a que las generales se convoquen antes de que venza la legislatura.

Mandan los intereses estratégicos en las urnas, e incluso con Presupuestos Generales del Estado aprobados, el calendario que se vislumbra anima a que Moncloa baraje un golpe de efecto que, sobre todo, sirva para que Sánchez no repita lo que le sucedió al ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero entre 2010 y 2011. Lección aprendida: hay que convocar elecciones antes de que estalle con su máxima fuerza la crisis económica y social que deja la pandemia. El presidente buscaría aprovechar el efecto de los fondos europeos.

La irrupción en la campaña que se avecina en la Comunidad de Madrid de Pablo Iglesias abre aún más el escenario de confrontación y el futuro del Gobierno de la Nación.

El PP tiene que reajustar su posición, igual que el PSOE, porque habían dado por hecho que Podemos estaba muerto. Y ahora es evidente que el grupo de Iglesias sí tendrá representación en la Asamblea madrileña. Génova cuenta con que Isabel Díaz Ayuso subirá de forma exponencial, pero dentro del partido también advierten del riesgo de dejarse cegar por ese espejismo.

Entran en terreno del todo o nada y la capacidad de movilización de Ayuso se fundamentará en el discurso ideológico y también en la utilización de su condición de oposición al Gobierno de coalición. En su equipo sostienen que la candidata sí tiene espacio para buscar voto en el centro porque ha roto con las banderas de las siglas con sus decisiones en materia sanitaria y económica. Apelan al voto de los madrileños que han visto cómo se salvaba su negocio gracias a su política contraria a hacer seguidismo de las decisiones de Pedro Sánchez. También aseguran que otra de sus fortalezas será presentarse como la única alternativa para evitar que se repita la coalición que ha dirigido el Gobierno de la Nación desde las últimas elecciones generales.

En Sol venden confianza. En Génova no están tan confiados. Pablo Casado tendrá una importante presencia en la campaña, pero la dirección principal la llevarán desde el equipo de la presidenta. Y Ayuso marcará el perfil al margen de que en la organización popular preocupe que su estrategia para mantener la Presidencia de la Comunidad afecte a las siglas en el resto del territorio.

En el PP huelen a adelanto electoral para el año que viene, como ya viene avisando el PNV desde hace semanas. Sin un mayor desarrollo de la crisis económica las expectativas de Casado de conseguir una mayoría para gobernar se acortan, y en su equipo saben que las próximas elecciones pueden ser su última oportunidad como candidato a La Moncloa.

Por tanto, Iglesias desestabiliza aún más el tablero madrileño, pero también ha introducido más incertidumbre en el futuro político de la actual cúpula popular.

(Diario La Razón)

Deja un comentario