Aunque han  dado un gran impulso al euskera durante las últimas cuatro décadas en detrimento del español no les parece suficiente al ejecutivo vasco. ¿La razón? : quieren eliminar el español de la sociedad vasca.

Pero se encuentran con una realidad: la sociedad vasca no quiere un idioma a la fuerza e inventado. Y por ello, pese a que la imposición lingüista es total, actualmente el 90% de la escolarización se hace total en euskera o de modo bilingüe, el uso de la lengua apenas alcanza el 21%.

Otro paso de tuerca

El Ejecutivo de Iñigo Urkullu quiere ahora promover la imposición del euskera en el ámbito familiar, “desde la gestación hasta la escuela”, además de en el resto de ámbitos sociales, en particular entre jóvenes menores de 16 años.

La última encuesta sociolingüística del Gobierno vasco revelaba que si hace tres décadas la vía de transmisión del euskera era fundamentalmente la familia, ahora ese lugar de aprendizaje lo había ocupado la escuela. Por ello se quiere poner en marcha acciones que obliguen al hogar familiar como ámbito de transmisión y uso.

Diferentes realidades lingüísticas

El proyecto que ahora ha puesto en marcha a través de un trabajo de consultoría y análisis, busca en una primera fase abarcar a toda Vascongadas y posteriormente a Navarra y el País Vasco francés, el ámbito cultural del vasco.

Las metodologías se confía en poder tenerlas analizadas y puestas a prueba en un periodo de dos años, desde este año hasta 2025. Para septiembre de este año está previsto que se puedan poner en marcha las primeras experiencias piloto, que se prolongarían durante un ciclo de cinco meses para ser evaluadas en una primera etapa, en febrero del próximo año, y en una segunda en septiembre de 2025, un año después de su implementación.

(Con información de El Independiente)