Los proetarras de EH Bildu exigen al PSOE que le facilite el gobierno de la Diputación Foral de Guipúzcoa y los consistorios de Vitoria y Pamplona.
Sellar un pacto con EH Bildu tiene sus consecuencias. Sánchez alcanzó ese pacto para poder llegar a la Moncloa —Bildu votó su investidura y ha negociado todos los Presupuestos Generales del Estado— y ahora se enfrenta a tener que pagar su parte del acuerdo. Y las elecciones municipales han dejado a la vista el precio de ese pago. Tres plazas se perfilan como el escenario principal de juego entre los dos partidos. Uno de ellos es el ayuntamiento de Vitoria, donde Bildu ha sido la primera fuerza. Otro es el de Pamplona, donde los proetarras son la segunda fuerza por debajo de UPN. El tercero es la Diputación de Guipúzcoa, donde, de nuevo, los proetarras de Otegi son la primera fuerza.
Pero en los tres focos de poder, EH Bildu necesita del respaldo —con voto o abstención— del PSOE de Pedro Sánchez. Y Otegi tiene claro que, por el momento, ese es el precio para el pago del pacto entre EH Bildu y el PSOE.
Otegi filtra sus mensajes clave
Otegi ha filtrado ya sus mensajes clave para que le lleguen claros a Sánchez. EH Bildu considera que cualquier ascenso en esas localidades del PNV o UPN supone una ruptura del pacto con Pedro Sánchez. Y, por lo tanto, si el PSOE impide que Maddalen Iriarte sea diputada general de Guipúzcoa, Rocio Vitero alcaldesa de Vitoria o Joseba Asirón alcalde de Pamplona «tendrán que explicar por qué lo hacen». Porque si el PSOE toma esa decisión «no va a hacer un buen negocio», ha dicho el proetarrra Otegi.
Pedro Sánchez se enfrenta a un dilema: si regala esas plazas a Bildu habrá quedado más que claro su pacto con Otegi justo antes de las elecciones generales. Y, si no lo hace, se someterá a las consecuencias de haber pactado con Bildu y haber hecho, como le amenaza Otegi, «un mal negocio».
(Con información de OK/Carlos Cuesta )