¿Cuál es el plan? | Paco Álvarez

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Cada vez más españoles tenemos la impresión de que no hay nadie al mando. No es (sólo) que la comisión de expertos fuera falsa o inexistente, es que el presidente es un muñeco encantado de haberse conocido, que tiene la misma capacidad de gestión y liderazgo que un escarabajo. Por cierto, pronto estrenan una nueva versión en cine de Pinocho, ahí lo dejo.

Al presi le ha desmentido ya todo el mundo, desde el Vaticano hasta la Comisión Europea, cuando Sánchez dijo que sin presupuestos dejarían de llegar ayudas por valor de 20.000 millones. Otra mentira. Oficialmente falso. También su ministro Illa miente como un cosaco cuando dice que los datos sobre la pandemia no son comparables entre países. Otra mentira. Suma y sigue para bingo. Lo malo, no es que mientan tanto, lo malo es que parece que a los españoles ya no nos importa que nuestros administradores nos mientan. Nos pinchan y no sangramos.

Nos da igual, del mismo modo que asistimos cada día a un nuevo record de contagios, aunque llevamos mes y medio con bozal, digo con mascarilla obligatoria. Una más de las normas absurdas que se inventan los asesores de los políticos para que pareciera que hacen algo. La mascarilla no es obligatoria en ningún país de nuestro entorno, pero en el nuestro que es donde se disparan cada día los casos, sí lo es. A lo mejor, sólo a lo mejor, ¿habría que hacérselo mirar, no? Por otra parte, se cerraron los bares de copas y discotecas, donde se controlaban accesos y aforo y donde trabajaba mucha gente, para lanzar a los noctámbulos a fiestas y botellones, donde no se controla nada, evidentemente, y se pierden los puestos de trabajo y empresas que gestionaban locales de ocio nocturno. También cerraron los prostíbulos, pensando, supongo, que así terminarían con la prostitución y su corriente promiscuidad, JA. Inocentes…

En los gimnasios hay que ejercitarse con la mascarilla, pero vas por la acera y cualquier runner de m… pasa a tu lado sin ella boqueando como un arenque fuera del agua (no es obligatoria en ese caso) y regando de babas a quien se cruza. En las bodas no se puede bailar, ni puede haber barra libre, pero en los buses, trenes y metro vamos a centímetros de cientos de desconocidos. Por cierto, ¿puede sustituirse la barra libre por invitar a veinte copas a cada invitado? Pues ya está. Otra norma absurda. Como lo de que los chavales vayan sólo dos horas al cole o lo de que si un niño da positivo, toda la clase se va a su casa y se pone en cuarentena 14 días. Pronto no habrá clases en el cole, y cuando se acerquen los exámenes, ni te cuento.  

No soy experto, pero como todos, tengo una opinión, y es que no se están haciendo las cosas bien. A las pruebas me remito: somos el país de la Unión Europea con peores datos en la gestión del COVID. Los peores en cuanto a número de contagios, de destrucción de empleo, de caída del PIB, de fallecimientos (si contamos los de verdad), etc. El experto Simón, mientras tanto, nos dice en voz baja (10 de septiembre) ante las cámaras y posando delante de las Banderas de España y de la Unión Europea, que “va a meterse el dedo en la nariz” o nos cuenta (el mismo día) que “Da la impresión de que hay una estabilización de la pandemia”. Éste es el experto. Así nos va.

Lo importante para los que gobiernan no es la pandemia, que utilizan sólo para tenernos con miedito. Lo importante para ellos es hacer una comisión de investigación para seguir haciendo oposición a la oposición o criticar el peinado de Ayuso o dar el pésame a Bildu porque un etarra condenado y confeso se haya suicidado. Hombre no hay que alegrarse de la muerte de nadie, pero que el presidente del Gobierno le dé el pésame en público a los amigos y cómplices de un terrorista… curiosamente no le he visto dar el pésame a ningún otro preso, no de ETA, que se haya suicidado mientras estuviera bajo custodia o ya puestos no le ha dado el pésame a nadie que haya fallecido por COVID. Tal vez porque para él, los muertos por COVID no existen, al menos según sus cuentas, no existen unos veintitantos mil, que se dice pronto.

Vale, la crítica es fácil. A éste y a su vice, que desde que lleva pendientes y moño como Doña Rogelia (y un poco chepudo el pobre también es) me cuentan que en vez de “el coletas” le llaman “el moñas”. Incluso compañeros suyos de ese enorme consejo de ministros. No me extraña.

Pero en vez de criticarles, (que podríamos estar todo el día), me pregunto cuál es el plan. Cómo vamos a salir de ésta, aparte de con una nueva ley de memoria histórica, por supuesto. Qué es lo que tiene pensado el gobierno para que no nos arruinemos todos y cada uno y que no haya dinero ni para subvencionar inmigrantes ilegales (para pensiones o para pagar funcionarios ya no tiene).

Ah, me dicen por ahí, que no hay plan, que lo que hace falta es unidad. Que el gobierno dice: Aprobad todos vosotros mis presupuestos y luego ya os contaré de que van. Bueno. No nos extraña que no tengan plan alguno. Están demasiado ocupados con tanta mentira. Ya decía el filósofo que los mentirosos deben tener buena memoria y estos la tienen llena. Entre Franco, la extrema derecha, el feminismo y las tonterías varias, no les queda ni un bit de memoria (que no sea histórica) para dedicar a lo que de verdad importa.

Bueno, casi mejor. Si no tienen plan, que copien. A cualquier otro país, desde Portugal hasta Grecia. Cualquiera lo está haciendo mejor, así que es imposible que se equivoquen. Por favor, que copien. No es mal plan copiar y si no saben ni copiar, por favor, que se hagan a un lado, no llegamos a Navidad con nadie al timón… si hasta el principio de curso les pilló por sorpresa…

Paco Álvarez | Escritor

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