Mañana jueves 7 de marzo concluye el plazo para que PSOE y Junts presenten un nuevo texto de la ley de Amnistía en la Comisión de Justicia del Congreso y será enviado al Senado antes de Semana Santa.
Sánchez y Puigdemont cierran el círculo de la amnistía sin poder blindarla ante los jueces, pero han tenido que dejar cabos sueltos
Tras la negativa de los de Carles Puigdemont a la aprobación del primer texto, la Mesa del Congreso prorrogó el plazo para presentar un segundo texto, plazo que termina, como decimos, mañana 7 de marzo.
Sánchez es un cadáver político por lo que Puigdemont no puede estirar más
Desde que Junts rechazó y tumbó la anterior versión de la ley han pasado muchas cosas. Sánchez cada día está más débil y acorralado por los casos de corrupción que le afectan no solo a su gobierno sino también a su familia y que puede extenderse a él mismo. En la actualidad es un cadáver político. Carles Puigdemont sabe que no puede estirar más «el chicle» y no dejará pasar este tren aunque tenga que rebajar sus pretensiones. El PSOE y Junts se encaminan a aprobar juntos un nuevo dictamen sobre la ley de amnistía, el definitivo, en la Comisión de Justicia que se celebrará el jueves 7 de marzo a las 11 horas en el Congreso.
Acuerdo PSOE-JUNTS
Como se recordará, Junts quiere mayores garantías de que todos los delitos, incluidos los de terrorismo, serán amnistiados.
Aunque ninguna de las dos partes quiso hacer oficial el acuerdo a lo largo de este lunes, la satisfacción mostrada por el PSOE, Sumar y sus socios hizo evidente que el pacto es una realidad. De hecho, lo es desde el pasado fin de semana. El sábado, el exdiputado Jaume Asens, que en todos estos meses siempre ha ido adelantando el siguiente paso, anunció la inminencia de la fumata blanca. No por casualidad, Félix Bolaños se quedó en España en lugar de acompañar a Pedro Sánchez a Roma, donde participó en el Congreso del Partido de los Socialistas Europeos.
Plazos previsibles
La previsión de los socialistas es aprobar el nuevo texto en la Comisión de Justicia el jueves y elevarlo al Pleno la próxima semana, cuando se cumplirán cuatro meses desde que el grupo parlamentario socialista registró la proposición de ley orgánica en solitario. Si no puede ser sería la semana del 18 de marzo, previa a Semana Santa.
El Tribunal Supremo tendrá la última palabra
A la aprobación definitiva de la ley de amnistía por las Cortes le seguirá la inmediata publicación en el BOE y el inicio de una nueva fase. Porque, a partir de ahí, será a los jueces a quienes les corresponderá aplicarla. Cada uno de los tribunales competentes tendrá que analizar caso por caso si los procesados y condenados por delitos vinculados al procés pueden acogerse a la norma; aunque el Supremo, como órgano sentenciador de la pieza principal, tendrá la última palabra. Todo apunta a que el alto tribunal presentará una cuestión prejudicial ante el Tribunal Europeo de Justicia (TJUE), que suspendería la aplicación de la ley de inmediato.
Otra cosa es que luego esta ley pueda finalmente tener efecto. Pues la reciente decisión del Tribunal Supremo – que el PSOE no controla aún- de investigar a Puigdemont por terrorismo en el caso ‘Tsunami Democratic’ puede complicar las cosas a PSOE y Junts.
Y es que Puigdemont quiere ser el candidato de Junts a las elecciones europeas para buscar el aforamiento y el alto tribunal se lo puede complicar. El artículo 384 bis de la Ley de Enjuiciamiento Criminal abre la puerta a que un auto de procesamiento por terrorismo le inhabilite de inmediato para cargo público.
Ya que el Supremo podría presentar una ‘cuestión prejudicial’ ante el TJUE si considera que la amnistía no se ajusta al derecho europeo. Y en ese caso, se suspenderían los efectos de la ley hasta que la justicia europea se pronunciase. Además, la sentencia del TJUE es vinculante para el Tribunal Constitucional español, que preside el sanchista filomasón Cándido Conde Pumpido.
Rechazo unánime de los españoles
Y en este contexto crece el rechazo de los españoles a la ley de Amnistía. Así se desprende tanto de una encuesta publicada por El Mundo según la cual sólo el 27% la respalda así como por otro sondeo publicado en ABC, el 61% de votantes socialistas está en contra de amnistiar el terrorismo secesionista.