El informe de 520 páginas cita ejemplos de funcionarios de salud pública de Estados Unidos que hicieron recomendaciones sin base científica (como el uso de mascarillas y el cierre de escuelas para los niños) que violaron la confianza de los ciudadanos estadounidenses en sus líderes.
El informe final del Subcomité Selecto de la Cámara de Representantes de Estados Unidos sobre la Pandemia de Coronavirus expone la corrupción de alto nivel en el sistema de salud pública de Estados Unidos.
El informe de 520 páginas también cita ejemplos de funcionarios de salud pública de Estados Unidos que hicieron recomendaciones sin base científica (como el uso de mascarillas y el cierre de escuelas para niños) que violaron la confianza de los ciudadanos estadounidenses en sus líderes.
“La confianza se gana”, escribió el representante Brad Wrenstrup, quien presidió el subcomité, en una carta al Congreso. “La rendición de cuentas, la transparencia, la honestidad y la integridad recuperarán esta confianza. Una futura pandemia requiere una respuesta de todo Estados Unidos gestionada por personas sin beneficio personal ni prejuicios”.
El informe, que siguió a una investigación de dos años, cubre las “lecciones aprendidas” en la pandemia de COVID-19 y sirve como una “hoja de ruta” para que el gobierno estadounidense y el sector.
El miércoles, el comité completará la revisión final del informe y lo enviará al registro del Congreso.
25 audiencias
Para su investigación, los miembros del comité celebraron 25 audiencias, realizaron más de 30 entrevistas y declaraciones y revisaron más de un millón de páginas de documentos.
El informe abarca más de 100 hallazgos relacionados con diversas cuestiones relacionadas con la pandemia de COVID-19, desde los orígenes de la COVID-19 hasta cómo se gastó el dinero de los contribuyentes y hasta qué punto los funcionarios gubernamentales cooperaron con la investigación.
Los siete puntos destacados del informe
A continuación se presentan siete puntos destacados del informe.
1. Lo más probable es que el virus COVID haya surgido de una fuga de laboratorio
El virus que provocó la pandemia de COVID-19 “muy probablemente” fue el resultado de una investigación de ganancia de función realizada en un laboratorio en Wuhan, China, afirmó el comunicado de prensa.
Los investigadores del Congreso enumeraron los cinco argumentos más fuertes a favor de la teoría de la fuga del laboratorio:
- El virus posee una característica biológica que no se encuentra en la naturaleza.
- Los datos muestran que todos los casos de COVID-19 se originaron a partir de una única introducción en humanos, lo que contrasta con pandemias anteriores en las que hubo múltiples eventos de contagio.
- Wuhan alberga el laboratorio de investigación del SARS más importante de China, que tiene antecedentes de realizar investigaciones de ganancia de función con niveles de bioseguridad inadecuados.
- Los investigadores del Instituto de Virología de Wuhan (WIV) enfermaron con un virus similar al COVID en el otoño de 2019, meses antes de que se descubriera el COVID-19 en el mercado húmedo.
El informe señala que EcoHealth Alliance, encabezada por el virólogo Peter Daszak, utilizó dinero de los contribuyentes estadounidenses para facilitar la investigación sobre ganancia de función en Wuhan, China.
EcoHealth Alliance es una organización sin fines de lucro que recibió millones en subvenciones del NIH financiadas por los contribuyentes, incluida al menos una relacionada con la investigación sobre ganancia de función en el Instituto de Virología de Wuhan.
El informe citó múltiples “fallas” del NIH y EcoHealth, incluyendo cómo el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) del NIH, dirigido por el Dr. Anthony Fauci, no supervisó el trabajo de EcoHealth y cómo EcoHealth no “informó oportunamente un experimento peligroso” al NIH.
En mayo, el HHS suspendió la financiación gubernamental a EcoHealth Alliance después de que el comité publicara evidencia de que la organización sin fines de lucro había violado los términos de su subvención del NIH.
2. Cierres prolongados de escuelas y confinamientos sin respaldo científico
El cierre de las escuelas y su permanencia a largo plazo no se sustentaba en la evidencia científica disponible. El informe señalaba que los primeros datos de Wuhan (China) mostraban que era poco probable que los niños enfermaran gravemente o murieran a causa de la COVID-19.
Esto fue confirmado posteriormente por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades , que informaron que los niños representaron menos del 0,01% de las hospitalizaciones y el 0,0005% de las muertes por COVID-19 entre el 1 de marzo de 2020 y el 25 de julio de 2020.
El informe también citó datos que mostraban que era poco probable que el cierre de escuelas mitigara la propagación del COVID-19. “La ciencia indicaba que las escuelas no eran vectores de propagación viral”, afirmaba el informe.
El informe también analiza cómo las medidas de confinamiento, más allá del cierre de las escuelas, no están respaldadas por evidencia científica. Los confinamientos perjudican innecesariamente a las empresas y a los ciudadanos, especialmente a los niños.
3. Fauci dijo que la recomendación de “seis pies de distancia” (2 metros) “simplemente apareció”
Las recomendaciones sobre el uso de mascarillas y el distanciamiento social carecían de evidencia concluyente que demostrara que ayudaban a frenar la propagación del COVID-19.
Durante la pandemia, los funcionarios de salud pública “cambiaron de opinión” sobre la eficacia de las mascarillas sin proporcionar datos científicos, señalaron. Obligar a los niños de 2 años en adelante a usar mascarillas “causó más daño que beneficio”, según el informe.
Fauci dijo durante un testimonio a puerta cerrada que la recomendación de mantener una distancia de 6 pies (2 metros) entre personas “simplemente apareció”.
4. El gobierno de EE. UU. está fallando a quienes resultaron perjudicados por las vacunas contra el COVID
Los miembros del comité analizaron qué tan bien está funcionando el Programa de Compensación por Lesiones por Medidas Sanitarias (CICP), el mecanismo del gobierno para responder a las personas lesionadas por la vacuna contra el COVID-19 .
Llegaron a la conclusión de que el CICP “no está juzgando de manera eficiente, justa y transparente las reclamaciones por lesiones causadas por la vacuna contra la COVID-19 ”. El CICP opera bajo el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos (HHS).
Es necesario crear un programa de compensación por lesiones causadas por vacunas “sólido y transparente”. El informe explica: “Independientemente de las afirmaciones de que las vacunas contra la COVID-19 son particularmente peligrosas, parece que el gobierno federal las impuso sin un sistema adecuado para juzgar los daños inevitables que causan. Esto puede tener efectos significativos en la confianza del público y dañar la confianza en las vacunas”.
Los autores del informe afirmaron que no es “antivacunas” debatir o discutir las lesiones causadas por las vacunas. Resulta especialmente paradójico etiquetar a alguien que sufrió lesiones causadas por la vacuna contra la COVID-19 como “antivacunas”.
“Este lenguaje divisivo”, escribieron, “fue un paso en falso crítico de la campaña de vacunación contra el COVID-19 que alejó y desestimó a las personas que habían experimentado reacciones adversas a la vacuna, raras pero que alteraron la vida”.
5. El HHS ocultó las pruebas
Los funcionarios del HHS de la administración Biden “ocultaron deliberadamente pruebas que podrían incriminar o avergonzar a altos funcionarios de salud pública”. Según el comunicado de prensa: “El Departamento de Salud y Servicios Humanos de la Administración Biden se involucró en una campaña de varios años de demoras, confusión y falta de respuesta en un intento de obstruir la investigación del Subcomité Selecto y ocultar evidencia que pudiera incriminar o avergonzar a altos funcionarios de salud pública.
“Parece que el HHS incluso destinó intencionalmente menos recursos a su componente que responde a las solicitudes de supervisión legislativa”.
El informe mostró imágenes de documentos del HHS que estaban incompletos o excesivamente redactados.
6. El asesor principal de Fauci también obstruyó la evidencia
El informe dedicó más de 40 páginas a detallar cómo el Dr. David Morens “probablemente destruyó evidencia, usó su correo electrónico personal para esconderse de rendir cuentas y actuó de manera impropia de un empleado federal”.
El comité alegó que Morens, asistente de Fauci desde hace mucho tiempo, destruyó correos electrónicos confidenciales de su cuenta privada de Gmail que contenían mensajes entre Fauci y Daszak.
Un memorando y más de 150 correos electrónicos obtenidos por el comité muestran que Morens gastó mucho tiempo y energía evitando la Ley de Libertad de Información (FOIA), una ley que requiere que los registros de las agencias federales se proporcionen al público a pedido, con excepciones limitadas.
Además de eliminar correos electrónicos confidenciales, Morens trabajó con un administrador del NIAID en la oficina de FOIA para escribir mal estratégicamente palabras clave que el público podría solicitar que se buscaran, alega el comité.
El comité dijo en su comunicado de prensa que Morens “probablemente mintió” al Congreso en múltiples ocasiones, borró ilegalmente registros federales de COVID-19 y compartió información no pública sobre los procesos de subvenciones del NIH con Daszak.
7. Daszak también intentó ocultar pruebas al subcomité.
Aproximadamente 10 páginas detallan varias formas en que Daszak y EcoHealth Alliance obstruyeron la investigación del comité.
Por ejemplo, Daszak intentó evitar facilitar información. El informe afirma: “En respuesta a la solicitud del Subcomité Selecto de documentos y comunicaciones entre el Dr. Daszak y la Dra. Marion Koopmans, miembro de la investigación de los orígenes de la OMS [Organización Mundial de la Salud], el Dr. Daszak planeó obstruir al Subcomité Selecto alegando ‘inmunidad diplomática’ y ‘reglas de privacidad de la OMS’”.
Daszak también ordenó a su personal que redujera el alcance y el ritmo de las producciones. Después de que el subcomité amenazara con citar a EcoHealth para que presentara documentos, Daszak escribió: “Una vez que nos escriban con problemas en nuestra producción, produciremos más rápidamente e intentaremos evitarlo”.
El comité comparó el testimonio de Daszak —“tanto durante la entrevista transcrita como durante la audiencia pública”— con los documentos disponibles y concluyó: “Es probable que el Dr. Daszak haya proporcionado declaraciones falsas al Subcomité Selecto”.
Fuente: The Defender
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4 comentarios en «La mentira se derrumba: 7 conclusiones del informe de la Cámara de Representantes sobre la pandemia de COVID y la respuesta del gobierno»
…jamás se sabrá el contenido de las falsas vacunas y el objetivo que se pretende, es un arma secreta de guerra, amparado por políticos y medios de comunicación a las órdenes de poderes ocultos y financieros
… lo mismo que con la «dana» de Valencia, crimen premeditado, jamás se sabrá
… lo mismo que el 11S o el 11M
… jamás se sabrá, quizás se sepa de aquí a una centuria