Suicidio, un problema social | Jacinto Seara

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España tiene una baja tasa de muertes por suicidio si la comparamos con el resto del mundo. Aun así, según datos publicados, la diferencia entre Comunidades Autónomas españolas es desigual: Encabezan este maldito ránking Asturias y Galicia, siendo los últimos Cantabria y Madrid. El Reino Unido publicó un álbum en donde se recogen las fotos de algunos suicidados (“The last photo”), curiosamente la mayoría sonriendo y felices. Triste realidad, tras esa aparente felicidad se esconde la del suicidio. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE) el número de casos confirmados fue de 3.539 en 2018 (prepandemia) y 3.941 en 2020. De estos últimos, 2.930 fueron hombres y 1.011, mujeres. Por edades, el 40,8 % estaba entre los 40 y 59 años; el 26,9 %, entre 60 y 79 años, y el 16,8 %, jóvenes de 20 a 39 años, esta lacra hay que combatirla. Son datos superiores a los accidentes de coches o a las víctimas de homicidio de cualquier tipo.

Fundación ANAR (Ayuda a Niños y Adolescentes), fundada en 1970, bajo el auspicio de la Convención de los Derechos del Niño de la ONU, actúa en España e Hispanoamérica. En 2021 ayudó a 16.442 menores, de los cuales 4.642 tenían ideas suicidas. Las consultas que atienden referidas al tema tratado se han incrementado sólo en un año el 90,9 % y en los últimos 13 años aumentó un 1.770,5 %. Datos realmente preocupantes.

Es un tema que ha salido ahora a la luz, aunque lleva muchos años sucediendo, quizás porque en estos momentos se ha incrementado de una forma preocupante. Está bien lo que ha hecho el Gobierno, algo que ANAR venía haciendo: el Ministerio de Sanidad habilitó un teléfono de prevención del suicidio, el número 024, se recibe más de 300 llamadas diarias. Como todos los teléfonos de este tipo, es gratuito, personalizado, confidencial e inmediato. Atiende los 365 días del año, las 24 horas. Detrás de ese número existen personas expertas que ya han identificado más de 300 intentos de suicidio. Ocho hospitales ensayan el primer plan piloto nacional para reducir los intentos de suicidio en adolescentes: “Es alarmante el pico en chicas”. Es bueno estudiarlo y conocer lo que está sucediendo en esta “sociedad del bienestar” cuyos efectos se encuentran en todas las edades. El suicidio en estos momentos es un problema de salud pública.

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