PP y PSOE cómplices: Pacto de no agresión para excluir a Sánchez, su mujer, Feijóo y el novio de Ayuso

El bipartidismo se está tapando mutuamente las vergüenzas y controla las comisiones de investigación acordando convertirlas en un paripé

Populares y socialistas sostienen que no ha habido componenda alguna, pero Vox recrimina al PP que no haya citado a Begoña Gómez y Sumar reprocha al PSOE que deje escapar a Alberto González Amador

El régimen bipartidista en España no quiere sorpresas. España no es una democracia, sino que es un régimen de partidos políticos basado en el bipartidismo, que es otra cosa. Y tanto el PP como el PSOE se pelean de cara a la galería, pero van de la mano cuando hay intereses comunes.

Se han dado cuenta que las comisiones de investigación sobre la corrupción de ambos partidos pueden hacer saltar este régimen bipartidista que les ha dado la alternancia en el poder durante los últimos 50 años, y por tanto, han decido pactar el controlarlas, convirtiéndolas en un paripé.

Es obvio que se van arañar, pero sin hacer sangre a sus máximos dirigentes y al sistema. Tienen que dar impresión que esto funciona. Y si hay dos comisiones de investigación, una en el Congreso y otra en el Senado, mejor, ya que habrá la sensación es que ambas cámaras funcionan y sirven para algo.

Pactan hacer comisiones sin contenido. 

Las comisiones de investigación tanto del PP en el Senado como del PSOE en el Congreso creadas en ambas cámaras ya están sobre la mesa. Al menos, en lo que respecta a las primeras solicitudes de comparecencia. Y, los pactos se están cumpliendo.

El PP decidió no llamar a Pedro Sánchez y, en paralelo, el PSOE no llamará a Alberto Núñez Feijóo.

El PP decidió no llamar tampoco a Begoña Gómez y, en paralelo, el PSOE no llamará al novio de Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador

Pactan debilitar a Isabel Ayuso

El PSOE sí llamará, sin embargo, a la presidenta madrileña Isabel Ayuso y a dos de sus hombres de la máxima confianza: su jefe de Gabinete, Miguel Ángel Rodríguez, y el secretario general del PP de Madrid, Alfonso Serrano.

Pero también forma del pacto. Y es que tanto a Sánchez como a Feijóo les interesa por distintos motivos debilitar a la presidenta de la Comunidad de Madrid. Ambas ganan y por tanto así lo han acordado.

El bipartidismo del PP y PSOE se están tapando mutuamente las vergüenzas

Es obvio el bipartidismo del PP y el PSOE niegan este pacto para taparse mutuamente las vergüenzas y corrupciones.  No puede trascender que esto un paripé de cara a la galería.

Comisiones en paralelo, pero distintas

Las comisiones de investigación en ambas cámaras discurrirán en paralelo, aunque con calendarios y tiempos distintos.

La del Senado arrancará el lunes 22 de abril con las comparecencias de Koldo García y Víctor Francos, quien fuera jefe de Gabinete de Salvador Illa en el Ministerio de Sanidad. El jueves 24 tendrá que personarse Illa, ahora candidato del PSC, en vísperas del arranque oficial de la campaña en Cataluña. El grupo de trabajo de la Cámara Alta fijó el lunes una lista de 63 comparecientes, de los que 58 fueron propuestos por el PP. La previsión es que los trabajos de la comisión duren 12 meses. 

Por el contrario, los socialistas, ayudados por sus socios, utilizaran la comisión de investigación del Congreso para contrarrestar la del Senado, poniendo el foco en los contratos que firmaron durante la pandemia las administraciones gobernadas por el PP. La lista completa de comparecientes que registraron incluye a 84 nombres. Además de Ayuso hay otros dos presidentes regionales del PP: el andaluz Juanma Moreno y la balear Marga Prohens.

Se da la circunstancia de que algunos de los comparecientes harán doblete en el Congreso y el Senado. Empezando por la presidenta del Congreso, Francina Armengol, cuyo gobierno en Baleares firmó un contrato con la trama por valor de 3,7 millones de euros. También comparecerán en ambas cámaras los exministros José Luis Ábalos, Salvador Illa y Ángel Víctor Torres. Así como Koldo García y la presidenta del Tribunal de Cuentas, Enriqueta Chicano, entre otros.

Fuente: Ana Martín | El Debate