Por tierras de España: Valle de Baztán | José Riqueni

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Portada: Arco de entrada a Amaiur

Nuestro amigo Marinus Vader, un profesor y escritor holandés, ya jubilado, por más señas gran conocedor y enamorado de España, de su gastronomía y tradiciones, en especial de Navarra, pasiones que compartimos al cien por cien, nos invitó a su preciosa casa de campo a las afueras de Irurita, localidad cercana a Elizondo que, por cierto y por suerte, estaba en fiestas.

 

Junto a la casa de Marinus (Foto del autor)

 Marinus no sólo puso a nuestra disposición su casa, sino que en su propio coche nos enseñó la zona durante varios días de inolvidables excursiones en la que degustamos, al amor de la amistad y la grata tertulia de sobremesa, la cocina navarra, así como conocimos pueblos y paisajes de gran belleza, tales como Irurita, Elizondo, Etxalar, Zugarramurdi…

Esta forma pues, tan llena de encanto, puso a nuestro alcance conocer una parte del valle de Batzán (Navarra), el mismo escenario que aparece en la “Trilogía del Baztán”, un valle popularizado gracias a la pluma de la escritora donostiarra Dolores Redondo.

Baztán se localiza justo en la vertical norte de la capital, Pamplona, y dista unos 60 km, ocupando la cuenca alta del río Bidasoa (río Baztán). Se trata del municipio más extenso de Navarra y está integrado por 15 localidades agrupadas en cuatro cuarteles distintos, a su vez, cada pueblo puede llegar a tener cuatro barrios y caseríos dispersos se distribuyen por doquier. Elizondo es el pueblo más grande y poblado y Aniz el que menos habitantes tiene, no llega a un centenar.

Los lugareños, conocidos como baztaneses, baztanés él y baztanesa ella, habitan una de las zonas bilingües de Navarra en donde el euskera es hablado por más de las tres cuartas partes de la población.

Tradicionalmente, la economía del valle de Baztán ha estado enraizada en las tareas agrícolas y ganadera, actividades en torno al caserío, esto es, en una explotación familiar, no obstante, entrado el s. XXI, el turismo ha ido cobrando cada vez más peso, convirtiéndose en una gran fuente de ingresos y dando un nuevo uso a los caseríos, ahora al servicio del creciente turismo rural que demandan los urbanitas cuyo último descubrimiento es comprar por unos días la paz que inspiran estos valles, llenar sus contaminados pulmones con el aire puro de la foresta y de los espacios abiertos, así como descubrir la gastronomía de siempre, la de antaño que es la de hoy, tan alejada de pizzas, hamburguesas y refrescos destroza intestinos.

La casa tradicional baztanesa tiene tres partes: En la planta baja están las cuadras para el ganado, la primera planta o planta noble es la destinada a vivienda (aquí se encuentran la cocina, el comedor, la sala principal y los dormitorios) y en la parte superior el “sabai”, destinado a despensa y también el lugar donde se guarda la hierba seca para alimentar al ganado en invierno. Dicha división responde a un esquema racional: El calor que generan los animales de la cuadra y el efecto aislante de la hierba bajo el tejado hacen que la vivienda sea más agradable en verano y templada en invierno.

El cordero en chilindrón y la cuajada, hervida con piedra caliente -una antiquísima tradición pastoril-, son dos de los platos típicos de estas tierras. Vaya por delante que el sabor del cordero de Navarra nada se parece al de Castilla, son carnes bien distintas debido en gran parte a la alimentación. De igual manera, los nombres con los que se conoce a estos animales difiere según la zona de España, aunque en esencia su denominación alude a la edad de cada animal: En Andalucía y Extremadura se dice cordero (cordero mayor que el lechal) ; en Castilla, lechazo (cordero lechal); en Aragón y Navarra, ternasco (cordero que aún no ha pastado)…como también es popular ese dicho que advierte bien “no confundir” bien “no mezclar churras con merinas”, ya que las churras dan buena carne y las merinas buena lana.

Berroeta

A Berroeta se llega por la carretera, tomando el desvío a la derecha que hay a la salida del túnel de Almandoz en la N-121-A.

Merece la pena visitar el merendero que se encuentra a la entrada del pueblo. Un artesano de la localidad realizó una verdadera labor de cantería tallando unas figuras acompañadas de un texto.

Mirador del valle de Baztan

 Mirador del valle de Baztán: Siguiendo por la NA-2540, la carretera Berroeta-Irurita, dejando atrás Ziga, damos con este observatorio desde el que contemplar las mejores vistas del valle del Baztan.

Irurita

La NA-8307 atraviesa el pueblo en cuya plaza, conocida como plaza de Rebote, podemos ver partidos de “laxoa” -pelota vasca- y contemplar bellas casas que transmiten un conjunto urbano bien conservado. Un poco más alejado del núcleo urbano se encuentra Dorrea o Jauregizarrea, uno de los doce palacios más antiguos de Reino de Navarra, conocidos sus dueños como “Señores de Baztan”, señorío ya documentado en el siglo XI. Otra casa de interés de entre otras tantas, ésta en la misma plaza, es la casa Etxeberria.

Gartzain

Siguiendo la NA-8307, un kilómetro antes de Elizondo, hay que tomar un desvío a la derecha que indique Gartzain.

Elizondo

Junto a la N-121-B damos con Elizondo, la localidad más grande del valle que concentra gran parte de los servicios.

El caserío de este pueblo se adapta al trazado que marca el río Baztan con una calle en cada orilla: Una es la calle Jaime Urrutia, antes C/ Mayor, otra es la calle Braulio Iriarte o antigua, antes C/ Eguzkialde (calle del Sol). Junto a estas calles medievales se encuentra la calle Santiago, antigua zona de huertas que alberga la iglesia y algunas casas de indianos.

Las fiestas patronales se celebran en honor a su Patrón, Santiago Apóstol, el día 25 de julio.

Hace unos años, alojados en una casa rural a las afueras de Irurita -la de nuestro amigo Marinus-, nos acercamos a Elizondo que bullía en plena fiesta de finales de julio y en el frontón Baztan, con gradas para el público, pudimos contemplar una exhibición de corta de troncos, bien con hacha en el caso de maderas duras bien con azada, si la madera es blanda, como es el caso del chopo, al igual que el serrado de un tronco con sierra de hoja manejada por dos mozos, uno en cada extremo o el levantamiento de piedras, unas esféricas, otras en forma de cubo, cilindro, etc.

Gigantes en Elizondo

El pasacalle de gigantes, con su rey y su reina acompañados de otros personajes, al son del txistu, nos sorprendió y tras él fuimos hasta llegar al rellano de la iglesia. Cohetes, bullicio y cerveza en la barra del bar de la plaza. Navarra, su esencia, la alegría de la fiesta y un lento atardecer, ¿acaso uno puede pedir más?

Elbete

Se encuentra junto Elizondo. En Elbete destacan el palacio de Jarola y la elegante portada del palacio de Askoa. Junto al puente, se reunía la Junta General del Valle.

Azpilkueta

Siguiendo la N121-B, cruce a la izquierda nos señala Azpilkueta, localidad que cuenta con cuatro barrios: Arribiltoa, Apaioa, Urrasun y Zuaztoi.

Una leyenda cuenta que en el paraje de Meatzera fueron enterradas dos mujeres. Al parecer ambas eran lamias y la tradición asegura que de ese mismo lugar proceden las tempestades.

Arizkun

Se llega por la N121-B, una vez pasados Elizondo y Elbete, tomando un desvío a la derecha que indica Arizkun. Cuenta con cuatro barrios, Aintzialde, Bozate, Ordoki y Pertalats.

El palacio de Ursua, una casa-torre cercana al barrio de Bozate, fue en su día cuna de uno de más rancios linajes de la nobleza navarra y está ligado a una leyenda en la que se cuenta que una hermosa dama, hija de la Casa de Lantaina del norte del país, se casó con el heredero del palacio baztanés. En el banquete nupcial, el novio notó que su esposa estaba en cinta y …

Erratzu

Siguiendo por la N121-B llegamos a una salida a la derecha por la que entramos en la NA-2600 en dirección a Erratzu.

Amaiur

Continuando por la N-121-B, justo cuando comenzamos a subir el puerto de Otsondo, un desvío a la derecha nos lleva a Amaiur.

La entrada a la localidad está flanqueada por un arco, pero antes encontramos un crucero de finales del siglo XVII.

Amaiur

 El lugar más emblemático de Amaiur es el monolito que recuerda el último intento de la dinastía navarra por recuperar su territorio.

Su antiguo castillo, asediado encarnizadamente por el ejército y la artillería del Duque de Nájera y del Conde de Lerín, beaumonteses, fue defendido con obstinado heroísmo por la guarnición agramontesa a cargo del Alcaide Jaime Velaz de Medrano, hasta que fue totalmente destruido en 1522. Un museo alberga una exposición permanente sobre el castillo y los restos arqueológicos encontrados en el mismo en las distintas excavaciones llevadas a cabo.

Urdax

Siguiendo por la N-121-B, un desvío a la izquierda nos deja en Urdax (urdazubi, agua y puente), siendo uno de los principales encantos de esta villa la combinación armoniosa del carácter señorial y tradicional en sus edificios. El centro urbano está atravesado por un canal que alimentaba el antiguo molino harinero.

En los alrededores están las Cuevas de Urdax.

Zugarramurdi

Cueva de Zugarramurdi

 La cueva de Zugarramurdi, muy cercana al pueblo del mismo nombre, es una oquedad de más de cien metros de largo con una gran bóveda lisa. Las leyendas de brujas que circulan por el lugar han dado lugar a la creación de un museo en el pueblo, el “Museo de las Brujas”, así como en los comercios se venden interesantes libros sobre esta temáticas e infinidad de objetos bien decorativos bien de uso diario adornados con dibujos de brujas y de la propia cueva.

Arraioz

A la vuelta hacia Pamplona, bajando por la N-121-B, que atraviesa el pueblo, damos con Arraioz que tiene un barrio llamado Mardea. Son interesantes los palacios de Jauregizarrea (se puede observar desde la propia carretera que atraviesa el pueblo, a la izquierda), Jauregia de Vicuña (junto a la iglesia) y Zubiria (al lado del río).

Parque Natural Señorío de Bertiz

Justo a la altura de Oronoz, en la unión de la N-121-A, que sube desde Pamplona, con la N-121-B, que baja desde Elizondo, se accede al Señorío de Bértiz, el primer Parque Natural declarado en Navarra.

En Bertiz encontramos senderos que recorren las orillas del río Bidasoa, se puede visitar el Centro de Interpretación del Parque, exposiciones en el palacio de Aizkolegi y una maqueta del parque en la Cochera.

 

© José Riqueni Barrios | Escritor

 

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