Nuevas formas de esclavitud | Norma Barba

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En pleno siglo XXI la esclavitud sigue siendo un sistema social y económico. Una condición personal bajo que se encuentran sometidas por lo menos 46 millones de personas en el mundo. (Informe sobre el índice Global de Esclavitud, fundación Walf).La abolición de la esclavitud no ha sido suficiente para erradicarla, pues de forma análoga o clandestina se sigue practicando, sobajando la dignidad humana y mermando el derecho de todo hombre a desarrollarse en plenitud.
Es verdad que las formas de esclavitud han cambiado con el paso del tiempo y que incluso no todas son reconocida como tales, por lo que las listas y las cifras varían. No hay un consenso internacional único, ¿Cómo entonces se erradicará?
De acuerdo con la Fundación australiana Walt Free (Camina Libre) organismo internacional encargada de erradicar la esclavitud moderna, existen por lo menos seis formas:
Las dos primeras son aquellas que se ejerce a través de la intimidación, violencia o manipulación, a fin de hacerse cobrar una deuda (servidumbre) o bien porque requieren de sus servicios (forzoso) como el reclutamiento por la delincuencia, ambos registrados en el que México como sus principales formas de esclavitud de acuerdo con la la Comisión de Derechos humanos.
Las siguientes dos tienen que ver con la explotación y comercialización de las personas en su integridad física y sexual. Es decir trata de personas y redes e industria de prostitución concentrándose particularmente en America de Sur y Asia (UNODC, 2019).
Una consideración especial merecen las últimas dos formas de esclavitud moderna: el trabajo y matrimonio infantil tanto por su magnitud como por su trascendencia, ya que son particularmente vulnerables a la explotación, trata, trabaja forzoso, prostitución y reclutamiento por la delincuencia.
En el mundo existen 168 millones de niños víctimas de trabajo infantil de las cuales 1.2 son víctimas de trata, 5.7 por servidumbre, 1.8 millones por prostitución (UNICEF), mientras que de acuerdo con la ONG Plan Internacional cada dos segundos una niña es obligada a casarse.
Sin embargo existen otras formas de esclavitud modernas que, aunque no sean catalogadas como tales por organismos e instituciones, sí suponen violacion a sus derechos y garantías fundamentales de libertad, salud, educación, creencias, patrimoniales y de bienestar:
La pobreza es una de ellas. En el mundo hoy viven más 800 millones de personas en extrema pobreza que subsisten con 1.9 dólares al día según datos de la ONU, mientras que se estima que otros 150 millones se sumarán a raíz de la pandemia por el Covid 19.
La migración, es otra de ellas, duramente denunciada por Papa Francisco como la gran tragedia humanitaria ”en la que hasta el 2019 se registraron 272 millones de personas que renunciado a su patria, familia y posesiones se ven obligadas a buscar n futuro mejor en condiciones complejas.
Otra forma de esclavitud y quizás las más desdibujada es la falta de oportunidades de todo tipo: educativas, laborales, de salud, alimentarias, propiedad, etc., en la que se ven obligados en muchas de las veces a renunciar a una vida mas digna y lícitas aspiraciones.
En este sentido las leyes discrepan de la realidad. Porque no es falta de garantías, sino de malos manejos presupuestarios, de priorizar ideologías ante salud, populismo ante educación, intereses personales a comunitarios. El bien común se subordina al poder.
En definitiva este siglo XXI nos presenta un gran reto por superar: la deshumanización y el descarte.
El ser humano como propiedad no existe, es contradictorio a su esencia aunque así convenga a sistemas sociales deshumanos y económicos utilitarios y reduccionistas como el comunismo y el liberalismo.
¡ La esclavitud no denigra solo a quien sobaja, sino también al que la ejecuta o permite.!

Norma Barba | Abogada. Experta en Política Familiar

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